Ayudas para el estudio
Introducción


Guía para el Estudio de las Escrituras

En la serie de temas que aparecen por orden alfabético en la Guía para el Estudio de las Escrituras se definen ciertas doctrinas, principios, personas y lugares que se mencionan en la Santa Biblia, el Libro de Mormón, Doctrina y Convenios y la Perla de Gran Precio. También se proporcionan referencias importantes de las Escrituras sobre dichos temas para el estudio individual. Esta Guía servirá al lector de fuente de consulta en el estudio individual y familiar de las Escrituras, así como para responder a preguntas acerca del Evangelio, estudiar determinados temas en las Escrituras, preparar discursos y lecciones, y aumentar su conocimiento y testimonio del Evangelio.

A continuación figura una muestra del texto de esta Guía con explicaciones acerca de su presentación:

Ejemplo

Tierra

El planeta sobre el cual vivimos, creado por Dios por medio de Jesucristo para el uso del hombre durante su probación mortal. El destino final de la tierra es ser glorificada y exaltada (DyC 77:1–2; 130:7–9). La tierra se convertirá en la herencia eterna de los que sean dignos de heredar una gloria celestial (DyC 88:14–26), donde disfrutarán también de la presencia del Padre y del Hijo (DyC 76:62).

Se creó para el hombre

Tinieblas de afuera

Tribus perdidas

Los temas están escritos en negrilla.

Se da una breve definición de cada tema.

Algunos temas tienen subtítulos, los cuales figuran en letra cursiva.

Las referencias que se dan entre paréntesis tienen relación con el pasaje citado.

Algunos temas de la lista alfabética no presentan definiciones ni referencias, pero la palabra en cursiva Véase indica al lector otros temas donde puede encontrar información pertinente.

A veces, otros temas de la guía contienen información relacionada con el tema que se está estudiando. Las palabras en cursiva Véase también indican los temas correlacionados.

En este párrafo, las referencias que aparecen entre paréntesis sirven al lector para comprender mejor la definición.

Antes de cada referencia de las Escrituras, aparece una breve cita del pasaje o un resumen de este.

Cuando se hace referencia a un subtítulo en los temas correlacionados después de Véase o Véase también, siempre se cita en combinación con el tema principal. Por ejemplo: Véase Israel — Las diez tribus perdidas de Israel.