Sección 124
Revelación dada a José Smith el Profeta en Nauvoo, Illinois, el 19 de enero de 1841. A causa de las persecuciones y los procedimientos ilícitos cada vez más numerosos, tramados contra ellos por las autoridades públicas, los santos se habían visto obligados a salir de Misuri. La orden exterminadora expedida por Lilburn W. Boggs, gobernador de Misuri, fechada el 27 de octubre de 1838, no les había dejado otro recurso. En 1841, cuando se dio esta revelación, los santos habían edificado la ciudad de Nauvoo en el sitio que anteriormente había ocupado el pueblo de Commerce, Illinois, y allí se había establecido la cabecera de la Iglesia.
1–14, Se le manda a José Smith hacer una proclamación solemne del Evangelio al presidente de los Estados Unidos, a los gobernadores y a los soberanos de todas las naciones; 15–21, Hyrum Smith, David W. Patten, Joseph Smith, padre, y otros de entre los vivos y de entre los muertos son bendecidos por su integridad y sus virtudes; 22–28, Se manda a los santos edificar en Nauvoo una casa de alojamiento para los forasteros, así como un templo; 29–36, El bautismo por los muertos debe efectuarse en los templos; 37–44, El pueblo del Señor siempre edifica templos para efectuar en ellos ordenanzas santas; 45–55, Se exime a los santos de edificar el templo en el condado de Jackson por motivo de la opresión de sus enemigos; 56–83, Se dan instrucciones para la edificación del Mesón de Nauvoo; 84–96, Hyrum Smith es llamado a ocupar el oficio de patriarca y recibir las llaves y ocupar el lugar de Oliver Cowdery; 97–122, Se dan consejos a William Law y a otros hermanos en cuanto a sus obras; 123–145, Se nombran oficiales generales y locales, junto con sus deberes y afiliación en cuanto a sus cuórums.
1 De cierto, así te dice el Señor, mi siervo José Smith, estoy bien complacido con la ofrenda y los reconocimientos que has hecho; porque para este fin te he levantado, para manifestar mi sabiduría por medio de las cosas débiles de la tierra.
2 Tus oraciones son aceptas delante de mí, y como respuesta te digo que ahora eres llamado para hacer inmediatamente una proclamación solemne de mi evangelio y de esta estaca que he asentado para ser una piedra angular de Sion, la cual ha de ser bruñida con la exquisitez que es a semejanza de un palacio.
3 Se hará esta proclamación a todos los reyes del mundo, hasta sus cuatro ángulos, al honorable presidente electo, a los eminentes gobernadores de la nación en que vives y a todas las naciones de la tierra esparcidas en el extranjero.
4 Escríbase con el espíritu de mansedumbre y por el poder del Espíritu Santo, que estará en ti al escribirla;
5 porque por el Espíritu Santo se te concederá saber mi voluntad concerniente a dichos reyes y autoridades, sí, lo que les acontecerá en lo porvenir.
6 Porque he aquí, estoy a punto de mandarles que presten atención a la luz y a la gloria de Sion, porque ha llegado la hora señalada para favorecerla.
7 Por tanto, exhórtalos con una fuerte proclamación y con tu testimonio, sin temerlos, porque son como la hierba, y toda su gloria es como la flor de la hierba que pronto cae, para que también queden sin excusa,
8 y para que yo los visite en el día de la visitación, cuando descubra la faz de mi velo, para señalar la porción del opresor entre los hipócritas, donde es el crujir de dientes, si rechazan a mis siervos y mi testimonio que les he revelado.
9 Además, los visitaré y ablandaré sus corazones, muchos de ellos para vuestro beneficio, a fin de que halléis gracia ante sus ojos, para que vengan a la luz de la verdad, y los gentiles a la exaltación y enaltecimiento de Sion.
10 Porque el día de mi visitación viene pronto, a la hora que no pensáis; y, ¿dónde habrá seguridad para mi pueblo y refugio para aquellos que quedaren?
11 ¡Despertad, oh reyes de la tierra! ¡Venid, oh venid con vuestro oro y con vuestra plata en auxilio de mi pueblo, a la casa de las hijas de Sion!
12 Y además, de cierto te digo, ayúdete mi siervo Robert B. Thompson a escribir dicha proclamación, porque estoy bien complacido con él y con que permanezca contigo.
13 Por tanto, escuche él tu consejo, y lo bendeciré con multiplicidad de bendiciones; sea fiel y verídico desde ahora en adelante en todas las cosas, y será grande ante mis ojos.
14 Pero recuerde que de sus manos le requeriré que me rinda cuentas de su mayordomía.
15 Y además, de cierto te digo, bendito es mi siervo Hyrum Smith, porque yo, el Señor, lo amo a causa de la integridad de su corazón, y porque él ama lo que es justo ante mí, dice el Señor.
16 Además, mi siervo John C. Bennett te ayudará en la obra de enviar mi palabra a los reyes y pueblos de la tierra, y te sostendrá a ti, mi siervo José Smith, en la hora de aflicción; y no fallará su recompensa, si acepta consejo.
17 Y a causa de su amor, será grande; porque si hace esto, será mío, dice el Señor. He visto la obra que ha hecho, la cual acepto si continúa, y lo coronaré con bendiciones y gran gloria.
18 Y además, te digo que es mi voluntad que mi siervo Lyman Wight siga predicando a favor de Sion, con el espíritu de mansedumbre, confesándome ante el mundo; y lo sostendré como en alas de águila; y engendrará gloria y honra tanto para él como para mi nombre.
19 Para que, cumplida su obra, yo lo reciba, como recibí a mi siervo David Patten, que está conmigo ahora, y también a mi siervo Edward Partridge y a mi anciano siervo Joseph Smith, padre, que se sienta a la diestra de Abraham; y bendito y santo es él, porque es mío.
20 Además, te digo que mi siervo George Miller es sin engaño; se puede confiar en él por motivo de la integridad de su corazón; y por el amor que él tiene por mi testimonio, yo, el Señor, lo amo.
21 Por tanto, te digo que sello sobre su cabeza el oficio de un obispado, semejante a mi siervo Edward Partridge, para que reciba las consagraciones de mi casa, a fin de que confiera bendiciones sobre la cabeza de los pobres de mi pueblo, dice el Señor. Nadie desprecie a mi siervo George, porque él me honrará.
22 Edifiquen una casa en mi nombre mi siervo George, y mi siervo Lyman, y mi siervo John Snider y otros, tal como mi siervo José les muestre, en el sitio que él también les indicará.
23 Y será una casa de hospedaje, una casa en donde el forastero que venga de lejos pueda alojarse; sea, pues, una casa buena, digna de toda aceptación, para que el viajero cansado goce de salud y seguridad mientras reflexione sobre la palabra del Señor, y la piedra angular que le he señalado a Sion.
24 Esta casa será una habitación sana, si se edifica a mi nombre, y si el que sea nombrado para administrarla no permite que sea contaminada. Será santa, o el Señor vuestro Dios no morará en ella.
25 Y además, de cierto os digo, vengan desde lejos todos mis santos;
26 y enviad mensajeros veloces, sí, mensajeros escogidos, y decidles: Venid, vosotros, con todo vuestro oro, vuestra plata, vuestras piedras preciosas y todas vuestras antigüedades; y con todos aquellos que tengan conocimiento de antigüedades, que quieran venir, vengan, y traigan el boj, el abeto y el pino, junto con todos los árboles preciosos de la tierra;
27 y con hierro, cobre, bronce, cinc y todas vuestras cosas preciosas de la tierra; y edificad una casa a mi nombre, para que en ella more el Altísimo.
28 Porque no existe lugar sobre la tierra a donde él pueda venir a restaurar otra vez lo que estaba perdido para vosotros, o lo que él ha quitado, a saber, la plenitud del sacerdocio.
29 Porque no hay una pila bautismal sobre la tierra en la que mis santos puedan ser bautizados por los que han muerto,
30 porque esta ordenanza pertenece a mi casa, y no me puede ser aceptable, sino en los días de vuestra pobreza, durante los cuales no podéis edificarme una casa.
31 Pero os mando a todos vosotros, mis santos, que me edifiquéis una casa; y os concedo el tiempo suficiente para que me la edifiquéis; y durante este tiempo vuestros bautismos me serán aceptables.
32 Mas he aquí, vuestros bautismos por vuestros muertos no me serán aceptables al cabo de este plazo; y si no habéis hecho estas cosas para cuando termine el plazo, seréis rechazados como iglesia, junto con vuestros muertos, dice el Señor vuestro Dios.
33 Porque de cierto os digo, vuestros bautismos por vuestros muertos no me pueden ser aceptables después que hayáis tenido el tiempo suficiente para edificarme una casa, donde corresponde la ordenanza del bautismo por los muertos, para quienes se instituyó desde antes de la fundación del mundo;
34 porque en ella se confieren las llaves del santo sacerdocio, a fin de que recibáis honra y gloria.
35 Y pasado dicho tiempo, vuestros bautismos por los muertos, efectuados por los que se encuentren esparcidos en otras partes, no me serán aceptables, dice el Señor.
36 Porque se ha decretado que en Sion, y en sus estacas, y en Jerusalén, esos sitios que he señalado como refugio, han de ser los lugares designados para vuestros bautismos por vuestros muertos.
37 Además, de cierto os digo, ¿cómo podré aceptar vuestros lavamientos, si no los efectuáis en una casa que hayáis erigido a mi nombre?
38 Porque por esta causa le mandé a Moisés que construyera un tabernáculo, para que lo llevaran consigo por el desierto, y que construyera una casa en la tierra de promisión, a fin de que se revelaran las ordenanzas que habían estado ocultas desde antes que el mundo fuese.
39 Por tanto, de cierto os digo que vuestras unciones y lavamientos, y vuestros bautismos por los muertos, y vuestras asambleas solemnes y memoriales para vuestros sacrificios por medio de los hijos de Leví, y para vuestros oráculos en vuestros lugares santísimos en donde recibís conversaciones, y vuestros estatutos y juicios, para el principio de las revelaciones y fundamento de Sion, y para la gloria, honra e investidura de todos sus habitantes, son conferidos mediante la ordenanza de mi santa casa, que a mi pueblo siempre se le manda construir a mi santo nombre.
40 Y de cierto os digo, edifíquese esta casa a mi nombre, para que en ella pueda yo revelar mis ordenanzas a mi pueblo;
41 porque me propongo revelar a mi iglesia cosas que han estado escondidas desde antes de la fundación del mundo, cosas que pertenecen a la dispensación del cumplimiento de los tiempos.
42 Y le mostraré a mi siervo José todas las cosas concernientes a esta casa, y su sacerdocio, y el sitio sobre el cual se ha de edificar.
43 Y la construiréis en el lugar donde habéis proyectado, porque es el sitio que os he escogido para construirla.
44 Si trabajáis con todo vuestro poder, yo consagraré ese lugar para que sea santo.
45 Y si los de mi pueblo escuchan mi voz, y la voz de mis siervos que he nombrado para guiar a mi pueblo, he aquí, de cierto os digo que no serán quitados de su lugar.
46 Mas si no escuchan mi voz, ni la voz de estos hombres que he nombrado, no serán bendecidos, porque contaminan mi tierra santa, y mis santas ordenanzas y estatutos, y mis santas palabras que yo les doy.
47 Y acontecerá que si edificáis una casa a mi nombre, y no hacéis las cosas que yo mando, no realizaré el juramento que os hago, ni cumpliré las promesas que esperáis de mis manos, dice el Señor.
48 Porque en lugar de bendiciones, vosotros, por vuestras propias obras, traéis maldiciones, ira, indignación y juicios sobre vuestra propia cabeza, a causa de vuestras insensateces y todas vuestras abominaciones que cometéis ante mí, dice el Señor.
49 De cierto, de cierto os digo, que cuando doy un mandamiento a cualquiera de los hijos de los hombres de hacer una obra en mi nombre, y estos, con todas sus fuerzas y con todo lo que tienen, procuran hacer dicha obra, sin que cese su diligencia, y sus enemigos vienen sobre ellos y les impiden la ejecución de ella, he aquí, me conviene no exigirla más a esos hijos de los hombres, sino aceptar sus ofrendas.
50 Y la iniquidad y violación de mis santas leyes y mandamientos visitaré sobre la cabeza de aquellos que impidieron mi obra, hasta la tercera y la cuarta generación, mientras no se arrepientan y me aborrezcan, dice Dios el Señor.
51 Así que, por esta causa yo he aceptado las ofrendas de aquellos a quienes mandé que edificasen una ciudad y una casa a mi nombre en el condado de Jackson, Misuri, y cuyos enemigos se lo impidieron, dice el Señor vuestro Dios.
52 Y juicio, ira, indignación, llanto, angustia y crujir de dientes devolveré sobre su cabeza hasta la tercera y la cuarta generación, mientras no se arrepientan y me aborrezcan, dice el Señor vuestro Dios.
53 Y os hago de esto un ejemplo para vuestro consuelo, en lo que concierne a todos aquellos a quienes se ha mandado hacer alguna obra, y las manos de sus enemigos y la opresión se lo han impedido, dice el Señor vuestro Dios.
54 Porque soy el Señor vuestro Dios, y salvaré a todos los de vuestros hermanos que fueron de corazón puro, y que han sido muertos en la tierra de Misuri, dice el Señor.
55 Además, de cierto os digo, de nuevo os mando construir una casa a mi nombre en este lugar, para que probéis ante mí que sois fieles en todas las cosas que os mando, para que yo os bendiga y os corone con honra, inmortalidad y vida eterna.
56 Y ahora os digo, en cuanto a mi casa de huéspedes que os he mandado construir para el alojamiento de forasteros, edificadla a mi nombre, y lleve sobre ella mi nombre, y haya lugar en ella para mi siervo José y su casa, de generación en generación.
57 Porque he confirmado esta unción sobre su cabeza, a fin de que su bendición también sea sobre la cabeza de su posteridad después de él.
58 Y como dije a Abraham, tocante a las familias de la tierra, así también le digo a mi siervo José: En ti y en tu simiente serán benditas las familias de la tierra.
59 Por consiguiente, haya lugar en esa casa para mi siervo José y para su posteridad después de él, de generación en generación, para siempre jamás, dice el Señor.
60 Y sea el nombre de esa casa el Mesón de Nauvoo; y sea una habitación deleitosa para el hombre, y un lugar de reposo para el viajero fatigado, para que contemple la gloria de Sion y la gloria de esta, su piedra del ángulo;
61 a fin de que también reciba el consejo de aquellos a quienes he puesto para que sean como plantas de renombre y como centinelas en sus muros.
62 He aquí, de cierto os digo, organícense mis siervos George Miller, Lyman Wight, John Snider y Peter Haws, y nómbrese a uno de ellos presidente de su cuórum con objeto de construir esa casa.
63 Y formarán una institución mediante la cual puedan reunir capital para la edificación de esa casa.
64 Y no recibirán menos de cincuenta dólares por cada acción de esa casa, y se les permitirá recibir hasta quince mil dólares de una sola persona por acciones de dicha casa.
65 Pero no se les permitirá aceptar más de quince mil dólares de capital de una sola persona;
66 ni les será permitido recibir menos de cincuenta dólares de una sola persona, por una acción de esa casa.
67 Y no se les permitirá recibir a persona alguna como accionista de esa casa, a menos que entregue en sus manos el valor de las acciones al recibirlas;
68 y recibirá acciones de esa casa en proporción a la cantidad que entregue en sus manos; pero si no entrega nada en sus manos, no recibirá acciones de la casa.
69 Y si alguien entrega dinero en sus manos, será a cambio de acciones de esa casa, para él y su posteridad después de él, de generación en generación, mientras él y sus herederos retengan esas acciones y no las vendan o traspasen de sus manos, por su voluntad y acto propios, si queréis obedecer mi voluntad, dice el Señor vuestro Dios.
70 Además, de cierto os digo, si mis siervos George Miller, Lyman Wight, John Snider y Peter Haws reciben capital en sus manos, ya sea dinero o bienes que representen el valor real del dinero, no usarán parte alguna de ese capital para otro propósito sino el de esa casa.
71 Y si destinan cualquier parte de ese capital a otro objeto ajeno al de esa casa, sin el consentimiento del accionista, y no reponen con cuatro tantos el valor del capital que hayan destinado a otro uso, serán maldecidos y quitados de su lugar, dice el Señor Dios; porque yo, el Señor, soy Dios, y no he de ser burlado en ninguna de estas cosas.
72 De cierto os digo, compre mi siervo José acciones de esa casa, de manos de ellos, como le parezca bien; pero mi siervo José no puede invertir más de quince mil dólares de capital en esa casa, ni menos de cincuenta; ni tampoco podrá hacerlo ningún otro hombre, dice el Señor.
73 Y también hay otros que desean saber mi voluntad concerniente a ellos, porque me lo han pedido.
74 Por tanto, os digo en cuanto a mi siervo Vinson Knight, si quiere hacer mi voluntad, compre acciones de esa casa para él y para su posteridad después de él, de generación en generación.
75 Y alce su voz larga y fuertemente en medio del pueblo, para abogar la causa de los pobres y los necesitados, y no flaquee, ni su corazón desmaye; y aceptaré sus ofrendas, porque no serán para mí como las de Caín, porque él será mío, dice el Señor.
76 Regocíjese su familia y aparten su corazón de la congoja, porque lo he escogido y ungido, y se le honrará en medio de su casa, porque le perdonaré todos sus pecados, dice el Señor. Amén.
77 De cierto os digo, invierta capital en esa casa mi siervo Hyrum como bien le parezca, para él y su posteridad después de él, de generación en generación.
78 Invierta capital en esa casa mi siervo Isaac Galland, porque yo, el Señor, lo amo por la obra que ha hecho, y perdonaré todos sus pecados; por consiguiente, sea tenido en memoria por su parte en esa casa, de generación en generación.
79 Nómbrese entre vosotros a mi siervo Isaac Galland, y ordénelo y bendígalo mi siervo William Marks, para que vaya con mi siervo Hyrum a cumplir la obra que mi siervo José les indique, y serán grandemente bendecidos.
80 Invierta capital en esa casa mi siervo William Marks, como bien le parezca, para él y para su posteridad, de generación en generación.
81 Invierta capital en esa casa mi siervo Henry G. Sherwood, como bien le parezca, para él y su posteridad después de él, de generación en generación.
82 Invierta capital en esa casa mi siervo William Law, para él y su posteridad después de él, de generación en generación.
83 Si quiere obedecer mi voluntad, no lleve a su familia a las regiones del este, es decir, a Kirtland; no obstante, yo, el Señor, edificaré a Kirtland, pero tengo preparado un azote para sus habitantes.
84 Y en cuanto a mi siervo Almon Babbitt, hay muchas cosas que no me complacen; he aquí, ambiciona imponer su propio criterio en lugar del consejo que yo he ordenado, sí, el de la Presidencia de mi iglesia; y levanta un becerro de oro para que mi pueblo lo adore.
85 No se vaya de este lugar nadie que haya venido aquí con la intención de obedecer mis mandamientos.
86 Si viven aquí, vivan para mí; y si mueren, mueran para mí; porque aquí descansarán de todos sus afanes, y continuarán sus obras.
87 Por tanto, confíe mi siervo William en mí, y cese de temer en cuanto a su familia por causa de la enfermedad que hay en la tierra. Si me amáis, guardad mis mandamientos, y la enfermedad de la tierra redundará en gloria para vosotros.
88 Salga mi siervo William y proclame mi evangelio sempiterno en voz alta y con gran gozo, según lo inspire mi Espíritu, a los habitantes de Warsaw, y también a los habitantes de Carthage y de Burlington, así como a los de Madison, y espere paciente y diligentemente instrucciones adicionales en mi conferencia general, dice el Señor.
89 Si quiere obedecer mi voluntad, escuche de aquí en adelante el consejo de mi siervo José, y con su ganancia apoye la causa de los pobres y publique la nueva traducción de mi santa palabra a los habitantes de la tierra.
90 Y si hace esto, lo bendeciré con multiplicidad de bendiciones, de manera que no será abandonado, ni su descendencia tendrá que mendigar pan.
91 Además, de cierto os digo, sea nombrado, ordenado y ungido mi siervo William como consejero de mi siervo José, en lugar de mi siervo Hyrum, para que mi siervo Hyrum ocupe el oficio de Sacerdocio y Patriarca que le señaló su padre por bendición y también por derecho;
92 para que desde ahora en adelante tenga las llaves de las bendiciones patriarcales sobre la cabeza de todo mi pueblo;
93 para que cualquiera que él bendiga sea bendecido, y cualquiera que él maldiga sea maldecido; para que lo que atare en la tierra sea atado en los cielos, y lo que desatare en la tierra sea desatado en los cielos.
94 Y desde ahora en adelante, lo nombro profeta, vidente y revelador de mi iglesia, así como mi siervo José;
95 a fin de que también obre de común acuerdo con mi siervo José, y de él reciba consejo, y mi siervo José le mostrará las llaves mediante las cuales podrá pedir y recibir, y ser coronado con igual bendición, gloria, honra, sacerdocio y dones del sacerdocio que en un tiempo se confirieron al que fue mi siervo Oliver Cowdery;
96 para que mi siervo Hyrum testifique de las cosas que le mostraré, a fin de que su nombre se guarde en memoria honorable, de generación en generación para siempre jamás.
97 Reciba también mi siervo William Law las llaves mediante las cuales pueda pedir y recibir bendiciones; sea humilde y sin engaño delante de mí, y recibirá de mi Espíritu, sí, el Consolador, que le manifestará la verdad de todas las cosas y le indicará, en la hora precisa, lo que ha de decir.
98 Y estas señales lo seguirán: Sanará a los enfermos, echará fuera demonios y será librado de los que quieran administrarle veneno mortífero;
99 y será conducido por sendas donde la serpiente venenosa no podrá herir su calcañar; y se remontará en la imaginación de sus pensamientos como si fuera en alas de águila.
100 Y si dispongo que resucite a los muertos, no detenga él su voz.
101 Proclame, pues, mi siervo William en alta voz y sin cesar, con gozo y regocijo y hosannas, a aquel que se sienta para siempre jamás sobre el trono, dice el Señor vuestro Dios.
102 He aquí, os digo, tengo reservada una misión para mi siervo William y para mi siervo Hyrum, y solamente para ellos; y permanezca en casa mi siervo José porque hace falta. El resto os lo mostraré después. Así sea. Amén.
103 Además, de cierto os digo, si mi siervo Sidney quiere servirme y ser consejero de mi siervo José, levántese y venga y ocupe el oficio de su llamamiento, y humíllese delante de mí.
104 Y si me ofrece una ofrenda y reconocimientos aceptables, y permanece con mi pueblo, he aquí, yo, el Señor vuestro Dios, lo sanaré para que quede sano; y nuevamente alzará su voz sobre las montañas, y será un portavoz delante de mi faz.
105 Venga y radique a su familia en la vecindad donde reside mi siervo José.
106 Y en todas sus jornadas alce su voz como con el son de trompeta, amonestando a los habitantes de la tierra a huir de la ira venidera.
107 Ayúdenle a mi siervo José, él, y también mi siervo William Law, a hacer una solemne proclamación a los reyes de la tierra, así como antes os he dicho.
108 Si mi siervo Sidney quiere hacer mi voluntad, no traslade a su familia a las regiones del este, sino múdeles su habitación, tal como he dicho.
109 He aquí, no es mi voluntad que él procure encontrar seguridad y refugio fuera de la ciudad que os he señalado, a saber, la ciudad de Nauvoo.
110 De cierto os digo, que aún ahora, si quiere escuchar mi voz, le irá bien. Así sea. Amén.
111 Y además, de cierto os digo, compre acciones mi siervo Amos Davies de aquellos que he nombrado para construir una casa de alojamiento, que es el Mesón de Nauvoo.
112 Haga él esto si quiere tener parte; y escuche el consejo de mi siervo José y trabaje con sus propias manos para ganarse la confianza de los hombres.
113 Y cuando se haya mostrado fiel en todas las cosas que le sean confiadas, sí, aun cuando fueren pocas, se le pondrá por mayordomo sobre muchas;
114 humíllese, pues, para que sea exaltado. Así sea. Amén.
115 Además, de cierto os digo que si mi siervo Robert D. Foster quiere obedecer mi voz, constrúyale una casa a mi siervo José, de acuerdo con el contrato que ha concertado con él, según las oportunidades que de cuando en cuando se le presenten.
116 Arrepiéntase de toda su necedad, y vístase de caridad; y cese de obrar el mal, y deseche todas sus palabras ásperas;
117 y compre también acciones del cuórum del Mesón de Nauvoo para él y su posteridad después de él, de generación en generación;
118 y obedezca el consejo de mis siervos José, y Hyrum, y William Law, así como a las autoridades que he llamado para establecer los cimientos de Sion; y para siempre jamás le irá bien. Así sea. Amén.
119 Además, de cierto os digo, ninguno ha de comprar acciones del cuórum del Mesón de Nauvoo, a menos que crea en el Libro de Mormón y en las revelaciones que os he dado, dice el Señor vuestro Dios;
120 porque lo que sea más o menos que esto, de mal procede, y será acompañado de maldiciones y no de bendiciones, dice el Señor vuestro Dios. Así sea. Amén.
121 Además, de cierto os digo, reciban los miembros integrantes del cuórum del Mesón de Nauvoo justa remuneración por toda su labor en la construcción de dicha casa; y sean sus sueldos según convengan entre sí, en cuanto a su precio.
122 Y si es menester, aporte cada accionista su porción de los sueldos de ellos para su sostén, dice el Señor; de otra manera, recibirán acciones de esa casa por su trabajo. Así sea. Amén.
123 De cierto os digo, ahora os nombro a los oficiales correspondientes a mi sacerdocio, para que tengáis las llaves de este, sí, el Sacerdocio que es según el orden de Melquisedec, que es según el orden de mi Unigénito Hijo.
124 Primeramente os nombro a Hyrum Smith para ser vuestro patriarca, para poseer las bendiciones de sellar en mi iglesia, sí, el Santo Espíritu de la promesa, mediante el cual sois sellados para el día de la redención, a fin de que no lleguéis a caer, no obstante la hora de tentación que pueda sobreveniros.
125 Os nombro a mi siervo José para ser élder presidente de toda mi iglesia, para ser traductor, revelador, vidente y profeta.
126 Le doy a él por consejeros a mis siervos Sidney Rigdon y William Law, para que constituyan un cuórum y Primera Presidencia, a fin de recibir los oráculos para toda la iglesia.
127 Os nombro a mi siervo Brigham Young para ser presidente del consejo viajante de los Doce,
128 quienes tienen las llaves para abrir la autoridad de mi reino en los cuatro ángulos de la tierra, y para enviar, después de eso, mi palabra a toda criatura.
129 Son: Heber C. Kimball, Parley P. Pratt, Orson Pratt, Orson Hyde, William Smith, John Taylor, John E. Page, Wilford Woodruff, Willard Richards, George A. Smith;
130 a David Patten lo he tomado para mí; he aquí, nadie le quita su sacerdocio; pero de cierto os digo, se puede nombrar a otro al mismo llamamiento.
131 Además, os digo que os nombro a un sumo consejo para que sea la piedra angular de Sion,
132 a saber, Samuel Bent, Henry G. Sherwood, George W. Harris, Charles C. Rich, Thomas Grover, Newel Knight, David Dort, Dunbar Wilson —a Seymour Brunson lo he tomado para mí; nadie toma su sacerdocio, pero se puede nombrar a otro al mismo sacerdocio en su lugar; y de cierto os digo, en su lugar sea ordenado a este llamamiento mi siervo Aaron Johnson— David Fullmer, Alpheus Cutler y William Huntington.
133 Además, os nombro a Don C. Smith para ser presidente de un cuórum de sumos sacerdotes,
134 ordenanza que se instituye con el propósito de habilitar a aquellos que serán nombrados presidentes residentes o siervos sobre diversas estacas esparcidas fuera de aquí;
135 y también pueden viajar, si lo desean, pero más bien son ordenados presidentes residentes; este es el oficio de su llamamiento, dice el Señor vuestro Dios.
136 Le nombro como consejeros a Amasa Lyman y a Noah Packard, para que presidan el cuórum de sumos sacerdotes de mi iglesia, dice el Señor.
137 Y además, os digo que os nombro a John A. Hicks, Samuel Williams y Jesse Baker, y este sacerdocio presidirá el cuórum de élderes, el cual se ha instituido para los ministros residentes; no obstante, pueden viajar, pero son ordenados para ser ministros residentes de mi iglesia, dice el Señor.
138 Y además, os nombro a Joseph Young, Josiah Butterfield, Daniel Miles, Henry Herriman, Zera Pulsipher, Levi Hancock y James Foster para presidir el cuórum de setentas,
139 cuórum que se ha instituido para que los élderes viajantes testifiquen de mi nombre en todo el mundo, donde los envíe el sumo consejo viajante, mis apóstoles, para preparar el camino delante de mi faz.
140 La diferencia entre este cuórum y el de los élderes es que uno ha de viajar continuamente, y el otro ha de presidir las iglesias de vez en cuando; uno tiene la responsabilidad de presidir de cuando en cuando, y el otro no tiene la responsabilidad de presidir, dice el Señor vuestro Dios.
141 Además, os digo que os nombro a Vinson Knight, Samuel H. Smith y Shadrac Roundy, si este quiere recibirlo, para presidir el obispado. Las instrucciones en cuanto a dicho obispado os son dadas en el libro de Doctrina y Convenios.
142 Y además os digo, a Samuel Rolfe y a sus consejeros como presbíteros, y el presidente de los maestros y sus consejeros, y también el presidente de los diáconos y sus consejeros, y también el presidente de la estaca y sus consejeros.
143 Os he designado los oficios anteriores, junto con sus llaves correspondientes, en calidad de auxilios y gobernaciones, para la obra del ministerio y para perfeccionar a mis santos.
144 Y un mandamiento os doy, que llenéis todos estos oficios, y aprobéis o desaprobéis en mi conferencia general a las personas cuyos nombres he mencionado;
145 y que preparéis salas para todos estos oficios en mi casa cuando la edifiquéis a mi nombre, dice el Señor vuestro Dios. Así sea. Amén.