Presidentas de la Sociedad de Socorro

Emma Smith
Emma Smith
1842–1844

Emma Smith fue la primera presidenta de la Sociedad de Socorro, que se organizó en Nauvoo, Illinois, el 17 de marzo de 1842. Bajo su liderazgo, la Sociedad de Socorro Femenina de Nauvoo juntó fondos para el Templo de Nauvoo, confeccionó ropa para los obreros del templo, hizo una petición al gobernador Thomas Carlin para que protegiera a José Smith, atendió a los enfermos, cuidó de los pobres y brindó socorro donde y cuando se necesitaba. Durante los primeros años de la Iglesia, Emma padeció muchas pruebas y persecuciones con los Santos. En 1830, por medio del profeta José Smith, Emma recibió una revelación en la que se le dieron instrucciones y se le prometieron grandes bendiciones, incluso “una corona de justicia” (D. y C. 25:15) si ella obedecía los mandamientos. Estaba casada con José Smith, y tuvieron 11 hijos, incluso gemelos adoptados.


Eliza R. Snow
Eliza R. Snow
1868–1887

Eliza R. Snow prestó servicio como la primera secretaria de la Sociedad de Socorro de Nauvoo y más tarde llevó el Libro de registros de la organización al Valle del Lago Salado. Era escritora y poeta de gran talento que escribió muchos himnos de la Iglesia y apoyaba la educación. También participó vigorosamente en la obra del templo. En 1866, el presidente Brigham Young la llamó para ayudar a los obispos a organizar la Sociedad de Socorro (y más tarde la Primaria y una organización para las mujeres jóvenes) en cada barrio y rama de la Iglesia. La presidencia de la hermana Snow hizo hincapié en la espiritualidad y la autosuficiencia. La Sociedad de Socorro mandó mujeres a la escuela de medicina, capacitó enfermeras, abrió el Hospital Deseret, hizo funcionar tiendas cooperativas, promovió la fabricación de seda, almacenó trigo, construyó graneros y comenzó a publicar el periódico Women’s Exponent. En 1888, la Sociedad de Socorro ya tenía más de 22.000 miembros en 400 barrios y ramas. La hermana Snow fue sellada al profeta José Smith en Nauvoo y más tarde se casó con Brigham Young.


Zina D. H. Young
Zina D. H. Young
1888–1901

Zina D. H. Young, partera y educadora, trabajó en estrecha colaboración con Eliza R. Snow en la Sociedad de Socorro. En 1870 Brigham Young llamó a la hermana Young para promover la producción de seda entre las mujeres de la Iglesia como parte del énfasis de la Iglesia en la industria del hogar y la autosuficiencia. Durante su presidencia, la Sociedad de Socorro se afilió al Consejo Nacional de Mujeres de los Estados Unidos e hizo campaña a favor del sufragio femenino. La hermana Young continuó con el énfasis de la Sociedad de Socorro en la salud, el almacenamiento de cereales, la educación y el servicio caritativo.


Bathsheba W. Smith
Bathsheba W. Smith
1901–1910

Bathsheba W. Smith pertenecía a la Sociedad de Socorro de Nauvoo original y, al igual que sus predecesoras, sufrió persecución y fue a pie hacia el oeste con los santos. Era conocida por su encanto, refinamiento y hospitalidad. Durante su vida vio crecer a la Sociedad de Socorro: pasó de ser un pequeño grupo de hermanas de Nauvoo a tener más de 40.000 miembros. Mientras la hermana Smith era la presidenta, la Sociedad de Socorro siguió capacitando enfermeras, almacenando granos y haciendo hincapié en el servicio caritativo. Las necesidades de una nueva generación de hermanas dio lugar al inicio de clases para madres, la primera instrucción formal de la Sociedad de Socorro. La hermana Smith y su esposo, George A. Smith, tuvieron tres hijos.


Emmeline B. Wells
Emmeline B. Wells
1910–1921

Emmeline B. Wells viajó con los santos de Nauvoo al Valle del Lago Salado. En 1876, el presidente Brigham Young le pidió que instara a las mujeres a prepararse para la hambruna juntando y almacenando trigo. Dado que era una escritora talentosa, se convirtió en la editora del periódico Women’s Exponent en 1877. Durante su presidencia, la Sociedad de Socorro experimentó muchas transiciones. En 1912, el presidente Joseph F. Smith hizo responsable a la Sociedad de Socorro de las sepulturas y la ropa del templo. En 1914, la Sociedad de Socorro introdujo un curso de estudio estandarizado. En 1915, el periódico Women’s Exponent fue reemplazado por la revista Relief Society Magazine, que incluía lecciones para las maestras visitantes y lecciones para las reuniones semanales de la Sociedad de Socorro. En 1918, la Sociedad de Socorro le vendió su trigo al gobierno de los Estados Unidos para ayudar a las víctimas de la guerra y fomentó la conservación de recursos durante épocas de guerra y muchas clases de iniciativas de socorro. Durante la presidencia de la hermana Wells, la Sociedad de Socorro hizo hincapié en el carácter sagrado de la maternidad, juntó fondos para templos, apoyó leyes relacionadas con las mujeres y los niños, y cooperó con organizaciones de bienestar de la comunidad. Viuda con dos hijitas, la hermana Wells se casó con Daniel H. Wells y tuvieron tres hijas.


Clarissa S. Williams
Clarissa S. Williams
1921–1928

Clarissa S. Williams era maestra de escuela y una mujer humilde con una excepcional habilidad ejecutiva. Su presidencia fue testigo de un aumento de la participación de la Sociedad de Socorro en la comunidad. Por recomendación suya, el interés acumulado en el fondo de trigo de la Sociedad de Socorro se usó para proyectos de bienestar relacionados con la salud, la maternidad y los niños. El Departamento de Servicios Sociales de la Sociedad de Socorro, establecido en 1919, capacitaba trabajadoras sociales, buscaba empleo para las mujeres y ofrecía servicios de adopción. La Sociedad de Socorro también capacitaba enfermeras, ayudaba a los refugiados y fundó una casa de maternidad como parte de un énfasis en cuestiones de salud y maternidad. La hermana Williams consideraba que uno de los aspectos más destacados de su presidencia había sido el éxito de los esfuerzos de asistencia médica. Ella y su esposo, William N. Williams, tuvieron 11 hijos.


Louise Y. Robison
Louise Y. Robison
1928–1939

Louise Y. Robison se crió en Scipio, Utah, donde aprendió mucho acerca del servicio caritativo de su madre, que era presidenta de la Sociedad de Socorro de estaca. La hermana Robison amaba el templo y disfrutaba de la función de la Sociedad de Socorro en el Departamento de Ropa de Sepultura. También amaba la música y, durante su presidencia, se organizaron coros de madres de la Sociedad de Socorro. Estuvo a la cabeza de la Sociedad de Socorro durante los difíciles años de la Gran Depresión, época durante la cual la organización cooperó con agencias gubernamentales de ayuda y la Cruz Roja, y ayudó a establecer las bases del sistema de bienestar de la Iglesia. En 1937, la Sociedad de Socorro abrió Mormon Handicraft, una tienda donde las mujeres podían vender su trabajo hecho a mano para complementar los ingresos de la familia. La hermana Robison y su esposo, Joseph L. Robison, tuvieron seis hijos.


Amy B. Lyman
Amy B. Lyman
1940–1945

Amy Brown Lyman, una administradora de gran talento, se preocupaba profundamente por el trabajo social. Durante 16 años, dirigió el primer departamento de bienestar social de la Iglesia, que formó parte de la Sociedad de Socorro hasta 1969. También prestó servicio en la Asamblea legislativa de Utah. Mientras su esposo era presidente de la misión europea, presidió las organizaciones de mujeres de la Iglesia en Europa. Durante su presidencia, la Sociedad de Socorro celebró sus primeros cien años con un total de 115.000 miembros. Estuvo a la cabeza de la Sociedad de Socorro durante la Segunda Guerra Mundial e hizo hincapié en la frugalidad durante épocas de guerra y la preparación para emergencias, así como también en la ayuda para las víctimas de la guerra. En una época en que las industrias de la guerra llevaban a muchas mujeres a ingresar a la fuerza laboral, la hermana Lyman se centró en fortalecer a la familia y defendió la función de la madre en el hogar. Ella y su esposo, Richard R. Lyman, tuvieron dos hijos.


Belle S. Spafford
Belle S. Spafford
1945–1974

Belle S. Spafford, maestra, escritora y administradora capaz, dirigió a la Sociedad de Socorro durante casi 30 años. Después de la Segunda Guerra Mundial, la Sociedad de Socorro ayudó a socorrer a las personas que estaban sufriendo en Europa. La organización envió ropa, ropa de cama, jabón y otros artículos necesarios a zonas devastadas por la guerra. Durante la década de 1950, la Sociedad de Socorro empezó a hacer más hincapié en la educación, especialmente en cuanto a economía doméstica y servicios sociales. Las hermanas de todo el mundo juntaron fondos para el Edificio de la Sociedad de Socorro, que se dedicó en 1956. Las reglas para pertenecer a la Sociedad de Socorro cambiaron durante la década de 1970 y se empezó a inscribir automáticamente a todas las mujeres Santos de los Últimos Días mayores de 18 años. La hermana Spafford era ampliamente conocida y respetada fuera de la Iglesia también, y de 1968 a 1970 prestó servicio como presidenta del Consejo Nacional de Mujeres. Ella y su esposo, Willis Earl Spafford, tuvieron dos hijos.


Barbara B. Smith
Barbara B. Smith
1974–1984

Bárbara B. Smith demostró buen juicio y tolerancia como presidenta de la Sociedad de Socorro durante un período de intenso conflicto en cuanto a temas relacionados con las mujeres. A menudo la entrevistaban para hablar acerca de su posición en contra de la propuesta de enmendar la igualdad de derechos en la Constitución de los Estados Unidos. Animó a las mujeres Santos de los Últimos Días a participar en sus comunidades y representar la posición de la Iglesia respecto de la mujer sin pelear ni causar divisiones. La hermana Smith continuó el énfasis de la Sociedad de Socorro en dar ayuda ante desastres, la preparación para emergencias y el bienestar. También recalcó la educación en economía doméstica y la importancia de la familia. Durante su presidencia, la Sociedad de Socorro aumentó y alcanzó un total de aproximadamente dos millones de miembros en todo el mundo. La hermana Smith pidió a las mujeres de la Iglesia que se comprometieran individualmente a aprender y prestar servicio activo durante toda la vida. Ella y su esposo, Douglas H. Smith, tienen siete hijos.


Barbara W. Winder
Barbara W. Winder
1984–1990

Barbara W. Winder es una mujer de gran compasión y humildad. Bajo su dirección, la Sociedad de Socorro hizo hincapié en la espiritualidad personal y dio especial atención a las necesidades de la familia y las hermanas adultas solteras. La hermana Winder resumió la misión de la Sociedad de Socorro en cuatro puntos básicos: edificar la fe y el testimonio, fortalecer a las familias, brindar servicio caritativo y sostener al sacerdocio. Durante su presidencia, las oficiales generales de la Sociedad de Socorro, las Mujeres Jóvenes y la Primaria se mudaron al remodelado Edificio de la Sociedad de Socorro, donde podían trabajar más estrechamente en una hermandad de organizaciones. Al final de la presidencia de la hermana Winder, la Sociedad de Socorro tenía más de tres millones de miembros en 135 países y territorios. Ella visualizó a la Sociedad de Socorro como una organización que podía bendecir a cada mujer y cada familia y una organización en la que cada mujer podía participar plenamente. Ella y su esposo, Richard W. Winder, tienen cuatro hijos.


Elaine L. Jack
Elaine L. Jack
1990–1997

Elaine L. Jack se crió en Cardston, Alberta, Canadá. Su visión de la Sociedad de Socorro se caracterizó por su gran confianza en la bondad de las mujeres, en las contribuciones únicas que las mujeres hacen en forma individual y colectiva, y en la importancia de fortalecer a las familias. Instó a las hermanas a que “La caridad nunca deja de ser” fuese un lema de suma importancia personal, a fin de que el mundo entero resultara bendecido. Durante el sesquicentenario de la Sociedad de Socorro, que ocurrió en 1992, las hermanas de todo el mundo participaron en proyectos de servicio para ayudar a sus comunidades. Una extensión del servicio es la labor constante de alfabetización del Evangelio. Ese esfuerzo fue iniciado por la Sociedad de Socorro para ayudar a todos los miembros de la Iglesia a obtener las habilidades básicas de lectura y escritura necesarias para leer la palabra de Dios y para alentar la superación personal y el estudio del Evangelio durante toda la vida. La caridad, la alfabetización y la familia no sólo caracterizan el servicio de la hermana Jack como presidenta, sino que además son características distintivas de su vida. Ella y su esposo, Joseph E. Jack, tienen cuatro hijos varones.


Mary Ellen W. Smoot
Mary Ellen W. Smoot
1997–2002

Mary Ellen W. Smoot es una mujer de gran humildad, dedicación y visión. La hermana Smoot recalcó la importancia de trabajar estrechamente con los líderes del sacerdocio para ayudar a las mujeres y sus familias a venir a Cristo. A la cabeza de cerca de cinco millones de miembros de la Sociedad de Socorro en todo el mundo, la hermana Smoot recorrió más de 320.000 km durante el tiempo que fue presidenta. Durante un viaje ayudó con la labor humanitaria en Kosovo y alivió el sufrimiento de muchas personas. Su deseo de ayudar a las familias se hizo evidente mientras prestaba servicio en el Comité del Congreso Mundial para la Familia. También publicó la declaración de la Sociedad de Socorro para ayudar a las mujeres a alcanzar su potencial divino como hijas de Dios. La reunión de economía doméstica fue reemplazada por la reunión de Superación personal, de la familia y del hogar. Se cambió el formato del mensaje mensual de las maestras visitantes para centrarlo en principios del Evangelio, pasajes de las Escrituras y citas de líderes de la Iglesia; los mensajes también alentaron a las mujeres a compartir su testimonio unas con otras. La hermana Smoot deseaba que las mujeres de la Iglesia estuvieran preparadas espiritualmente para enfrentar los desafíos que tuvieran; que fueran ejemplos de vivir el Evangelio; y que avanzaran con fe, valor, y fortaleza espiritual, mental y emocional. La hermana Smoot y su esposo, Stanley M. Smoot, tienen siete hijos y cincuenta nietos.


Bonnie D. Parkin
Bonnie D. Parkin
2002–2007

Bonnie D. Parkin dirigió a más de cinco millones de hermanas de la Sociedad de Socorro de 165 naciones de todo el mundo. Llena de caridad y amor profundo y perdurable por las mujeres del mundo, deseaba que todas las mujeres sintieran el amor del Señor cada día al guardar sus convenios, ejercer la caridad y fortalecer a las familias. Con un profundo compromiso personal, la hermana Parkin se centró en preparar y fortalecer a las jovencitas en la transición de pasar de ser jóvenes a ser mujeres. Su deseo era que, en la Sociedad de Socorro, la organización del Señor para las mujeres, las hermanas de todas las edades encontraran un lugar donde se sintieran cómodas y hallaran un vínculo de confianza, amistad y ayuda. La hermana Parkin tenía un testimonio de que las maestras visitantes eran el alma de la Sociedad de Socorro y vio ese programa como una medida del corazón, una obra desinteresada y una responsabilidad sagrada que bendice tanto al que da como al que recibe. Alentó a las mujeres de todo el mundo a poner en práctica los principios de bienestar al cultivar y luego compartir su tiempo y sus talentos en sus barrios y estacas. Como una mujer de convenio consagrada a la causa de Jesucristo, la hermana Parkin animó a otras personas a “escoger la buena parte” a diario sirviendo al Señor y a los demás por medio de actos de servicio y amor (véase Lucas 10:42). Es madre de cuatro hijos y abuela de muchos.


Julie B. Beck
Julie B. Beck
2007–2012

Julie B. Beck prestaba servicio como primera consejera de la presidencia general de las Mujeres Jóvenes cuando recibió el llamamiento de dirigir a la Sociedad de Socorro. De niña, aprendió a hablar portugués cuando vivió en Brasil con sus padres, y diez hermanos y hermanas, mientras su padre servía como presidente de misión. En la Iglesia, ha prestado servicio en la mesa directiva general de las Mujeres Jóvenes, como presidenta de las Mujeres Jóvenes y la Primaria de barrio, como consejera de una presidencia de Sociedad de Socorro de estaca y en el Centro de Capacitación Misional de Provo, Utah. Ella se graduó de Dixie College y de la Universidad Brigham Young. La hermana Beck era ama de casa antes de ser llamada a la presidencia general de las Mujeres Jóvenes. Vive en Alpine, Utah, con su esposo, Ramon, y tienen tres hijos y ocho nietos.


Linda K. Burton
Linda K. Burton
2012–Presente

Linda K. Burton se percató de su testimonio del Evangelio cuando era una joven adolescente y vivía en Nueva Zelanda, donde su padre prestaba servicio como presidente de misión. Mientras vivía a la sombra del Templo de Nueva Zelanda, fue testigo personal de los grandes sacrificios que los miembros de la Iglesia estaban dispuestos a hacer para recibir las bendiciones del templo, ya que iban de todas partes del Pacífico para recibir las ordenanzas sagradas del templo. Muchos años más tarde prestó servicio junto a su esposo mientras él presidía la Misión Corea Seúl Oeste, otra experiencia que aumentó su amor y admiración por la gente dispuesta a sacrificarse con el fin de hacer y guardar convenios. Espera ayudar a mujeres de todas las edades y culturas a aumentar su fe en Jesucristo y Su expiación, a fortalecer sus familias y hogares guardando sus convenios con buen ánimo y a trabajar en unión con los líderes del sacerdocio y de las organizaciones auxiliares en la obra de salvación. Comparte sus mayores alegrías, que se centran en las bendiciones eternas de la familia, con su esposo, Craig P. Burton. Agradecen ser padres de seis hijos.