A medida que la guerra hace estragos en diferentes partes del mundo, muchos de nosotros queremos ayudar a nuestros hermanos y hermanas que están hambrientos, cansados y asustados. Pero ¿cómo podemos marcar la diferencia?
Ida Smith sintió lo mismo en 1914, durante la Primera Guerra Mundial. Su esposo, Hyrum M. Smith, era el presidente de la Misión Europea. Vivían en Liverpool, Inglaterra.
Un día, vio un cartel en el que se pedía ayuda para tejer ropa de abrigo para los soldados.
“Nunca he tejido una puntada en mi vida”, pensó.
Entonces el Espíritu le habló al corazón: “Ahora es el momento de que las Sociedades de Socorro de la Misión Europea den un paso al frente y ofrezcan sus servicios”.
Así que Ida organizó una reunión con Winifred Rathbone, la esposa del alcalde, quien estaba organizando las labores de tejido. Todavía tenía muchas dudas. ¿Serían capaces de hacer lo suficiente para ayudar?
“Haremos lo mejor que podamos”, le dijo Ida a la señora Rathbone.
Ida aprendió a tejer. También reclutó a otras hermanas de la Sociedad de Socorro para que tejieran, y se corrió la voz del proyecto.
¡Después de una semana, las tejedoras de la Sociedad de Socorro pasaron de ser ocho hermanas a cuarenta! Ellas escuchaban números musicales o mensajes de la Iglesia mientras tejían.
Con el tiempo, Ida fue llamada a ser presidenta de las Sociedades de Socorro en la Misión Europea. Viajó por toda Inglaterra para “organizar nuevas Sociedades de Socorro, capacitar a sus miembros y reclutarlas para tejer”.
¡Al final del proyecto, habían creado 2427 artículos para los soldados! Un observador escribió: “Si todas las organizaciones de mujeres de Gran Bretaña trabajaran como lo están haciendo las mujeres Santos de los Últimos Días, a nuestros soldados no les faltaría nada”.
¡Tus esfuerzos pequeños pueden marcar una gran diferencia en el mundo! Como demostró Ida: “por medio de cosas pequeñas y sencillas se realizan grandes cosas” (Alma 37:6).
Encontrar un proyecto
Notas
Adaptado del capítulo 11 de Santos, tomo III.
Véase también Notes from the Field, Relief Society Magazine, noviembre de 1915.