Principio de autosuficiencia 8: Comunicación: Saber escuchar en el ambiente social y espiritual
La comunicación es clave para el desarrollo personal en la autosuficiencia. Continúe leyendo para saber cómo comunicarse eficazmente con los demás
El cerebro puede procesar una cantidad extraordinaria de información sobre otras personas; sin embargo, a menudo nos centramos en lo que sentimos que son nuestras propias necesidades: la necesidad de ser escuchados, la necesidad de expresarnos, la necesidad de tener razón. En un grupo, dicha mentalidad crea un desequilibrio entre satisfacer las necesidades de la persona y las necesidades del grupo. Puede dar lugar al resentimiento, y la productividad puede verse perjudicada.
En su libro Social, Matthew Lieberman explora las maneras en que el cerebro está diseñado para hacer conexiones. Luego de examinar estudio tras estudio, él concluye: “La equidad es una de las muchas señales de que tenemos una conexión social. Un trato justo implica que otras personas nos valoran y que cuando existan recursos que deban compartirse en el futuro, posiblemente recibamos lo que nos corresponde” (Social, 2014, pág. 74). Cuando sentimos que hay injusticia, surgen sentimientos negativos.
¿Cómo, pues, promovemos la imparcialidad en nuestros grupos?
Para comenzar, dejamos a un lado la necesidad de expresar nuestra opinión o parecer y simplemente escuchamos a los demás. Cuando todos los miembros del grupo sienten que su voz se escucha por igual —sin importar cuál sea la decisión final—, es más probable que tengan sentimientos positivos debido a que recibieron un trato imparcial.
Saber escuchar es una habilidad, y requiere práctica. Estos cuatro pasos pueden ayudarle a saber escuchar:
Nuestra capacidad de escuchar también mejorará conforme escuchemos al Espíritu. En ocasiones, el Espíritu Santo nos da respuestas a nuestras oraciones, pero pasamos por alto la inspiración personal porque estamos distraídos con las cosas que debemos hacer. En un devocional del SEI en 2014, la hermana Linda K. Burton compartió algunos pasos sencillos que nos ayudan a recibir revelación personal.
Conforme aprendamos la habilidad social de escuchar a los demás y la destreza espiritual de escuchar la guía del Espíritu, progresaremos en nuestras labores terrenales y, lo que es más importante, seremos felices en dichas labores.