¿Se perdió Una velada con una Autoridad General, con el élder D. Todd Christofferson?

El 26 de enero de 2018 , el élder D. Todd Christofferson, del Cuórum de los Doce Apóstoles, y el élder Kim B. Clark, de los Setenta, hablaron acerca de defender la verdad a los educadores religiosos del Sistema Educativo de la Iglesia en una transmisión mundial desde el Tabernáculo de Salt Lake. Mire el devocional aquí.
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El élder Clark comenzó el devocional y testificó del aprendizaje profundo acerca del evangelio de Jesucristo. Además, el élder Clark extendió la invitación del Salvador a aprender de Él, al decir: “Aprender a conocer a Jesucristo abre nuestro corazón y mente a la influencia del Espíritu Santo y nos ofrece la seguridad del amor del Señor” (“Aprended de Mí”, [Una velada con una Autoridad General, con el élder D. Todd Christofferson, 26 de enero de 2018], broadcasts.lds.org).
El élder Christofferson habló luego y explicó la necesidad de defender la verdad eterna y comprender que “el conocimiento de la verdad en cualquier medida notable requiere ayuda divina, ya sea a través de la Luz de Cristo o la ayuda del Espíritu Santo” (“La verdad perdura”, [Una velada con una Autoridad General, con el élder D. Todd Christofferson, 26 de enero de 2018], broadcasts.lds.org). Aprendemos toda verdad mediante la ayuda divina.
La verdad en sí misma es independiente e inalterable. El élder Christofferson lo describió como “una realidad fija” (“La verdad perdura”). El pensamiento relativista y el relativismo moral —o la creencia de que la verdad depende de la moral y la ética de la persona— no apoya el orden ni la justicia y niega los principios básicos de nuestra existencia.
La función entonces, como maestros de Seminario e Instituto, es “ayudar a los alumnos, en las palabras del Salvador, a ‘[vivir] conforme a la verdad’, eso es, aceptar de todo corazón la Luz de Cristo en ellos y recibir la luz y la verdad adicionales que se reciben por el Espíritu Santo” (“La verdad perdura”). A medida que ayudemos a nuestros alumnos a practicar esos principios, ellos podrán aprender esas verdades eternas.
El élder Christofferson concluyó sus palabras testificando de las cinco verdades básicas que debemos enseñar continuamente:
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“Dios, nuestro Padre Celestial, vive, el único Dios verdadero y viviente.
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“Jesucristo es el Hijo Unigénito de Dios.
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“Jesucristo vino a la tierra a redimir a Su pueblo, Él sufrió y murió para expiar los pecados de ellos.
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“Se levantó de entre los muertos, llevando a cabo la Resurrección.
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“Todos comparecerán ante Él para ser juzgados en el último día del juicio, de acuerdo con sus obras” (“La verdad perdura”).