“El mensaje no tan oculto del libro de Apocalipsis”, Para la Fortaleza de la Juventud, diciembre de 2023.
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Apocalipsis
El mensaje no tan oculto del libro de Apocalipsis
Además de sus profecías de la segunda venida de Jesucristo, el libro de Apocalipsis contiene un poderoso mensaje de paz y consuelo.
I Stand at the Door and Knock [Yo estoy a la puerta y llamo], por J. Kirk Richards
Algunas personas dicen que la segunda venida de Jesucristo les aterra. Guerra, hambre, enfermedades: las profecías contienen algunas señales funestas, pero también hablan de acontecimientos emocionantes y promesas divinas. De modo que, además de informarnos de las señales de la Segunda Venida, las profecías también ofrecen mucho consuelo.
Esto ocurre con el libro de Apocalipsis, por ejemplo, que fue escrito por el apóstol Juan. Contiene muchas profecías acerca de la Segunda Venida y también tiene algunos de los pasajes más reconfortantes de todas las Escrituras. Estos son algunos mensajes de consuelo del libro de Apocalipsis.
Puedes dar oído a la voz del Salvador y abrir la puerta
A los santos de la época de Juan —y a nosotros— el Salvador dijo:
“He aquí, yo estoy a la puerta y llamo; si alguno oye mi voz y abre la puerta, entraré y cenaré con él, y él conmigo” (Apocalipsis 3:20).
El Salvador desea acercarse a ti (véase Doctrina y Convenios 88:63). Él te llama. Puedes abrir la puerta y permitirle entrar en cualquier momento.
Puedes encontrar protección
En el libro de Apocalipsis, el Señor manda: “Salid [del mundo], pueblo mío, para que no seáis partícipes de sus pecados ni recibáis parte de sus plagas” (Apocalipsis 18:4). Esas plagas son malas, pero están reservadas para aquellos que aman la iniquidad y no tratan de escapar de ella.
Acércate al Señor y a Su pueblo. Deja el mundo atrás, puedes encontrar paz interior y protección en el refugio de Sion.
Tú puedes vencer
En Apocalipsis encontrarás maravillosas promesas del Señor a Sus santos que vencen al mundo (véase, en especial, Apocalipsis 2–3). Esas bendiciones eternas son para aquellos que hacen convenios con Dios y los guardan. El Señor resumió esas bendiciones:
“El [o la] que venciere heredará todas las cosas; y yo seré su Dios, y él [o ella] será mi hijo [o hija]” (Apocalipsis 21:7).
Juan te dice no solo cuáles son las bendiciones, sino también cómo puedes recibirlas, que es “por medio de la sangre del Cordero y de la palabra de [tu] testimonio” (Apocalipsis 12:11). Para vencer, puedes confiar en la gracia de Jesucristo y ejercer fe en Él. Como enseñó el presidente Russell M. Nelson:
“Vencer al mundo ciertamente no significa llegar a ser perfectos en esta vida, ni significa que sus problemas se esfumarán como por arte de magia, porque no lo harán. Y no significa que no seguirán cometiendo errores. Sin embargo, vencer al mundo sí significa que la resistencia de ustedes al pecado aumentará. Su corazón se ablandará a medida que su fe en Jesucristo aumente. Vencer al mundo significa llegar a amar a Dios y a Su Hijo Amado más que a cualquier otra persona o cosa” (“Vencer al mundo y hallar descanso”, Conferencia General de octubre de 2022 [Liahona, noviembre de 2022, págs. 96–97]).
Puedes prepararte
Un mensaje claro del libro de Apocalipsis es que Jesucristo vendrá de nuevo, y que puedes prepararte para ello mediante la fe en Jesucristo, el arrepentimiento, el hacer y guardar convenios, y el perseverar hasta el fin. Con esa preparación viene la seguridad de que no tienes que temer Su venida. En vez de ello, puedes recordar Su supremo consuelo para Sus santos:
“Y enjugará Dios toda lágrima de los ojos de ellos; y ya no habrá más muerte, ni habrá más llanto, ni clamor ni dolor, porque las primeras cosas han dejado de ser” (Apocalipsis 21:4).
Con un consuelo y una seguridad así, sentirás el deseo de decir lo mismo que Juan dice al final de su libro: “… ven, Señor Jesús” (Apocalipsis 22:20).