“Dios es justo, incluso si las condiciones sociales no lo son”
Ruffin Bridgeforth, Darius Gray y Eugene Orr, Santos de los Últimos Días de raza negra, se unieron a la Iglesia durante la época de la historia de la Iglesia en la que no se ordenaba a hombres de ascendencia africana negra al sacerdocio ni se permitía que los hombres y las mujeres de raza negra recibieran las ordenanzas esenciales del templo. En 1971, los tres se reunieron para analizar estrategias para apoyar a los Santos de los Últimos Días afroamericanos en medio del racismo que normalmente encontraban en sus barrios locales.
Eugene se comunicó con el Presidente de la Iglesia, Joseph Fielding Smith, quien designó a los apóstoles Gordon B. Hinckley, Thomas S. Monson y Boyd K. Packer para que se reunieran con Ruffin, Darius y Eugene. Después de reunirse periódicamente durante cuatro meses, el élder Hinckley le pidió a Ruffin que se desempeñara como presidente de una nueva organización, con Darius y Eugene como sus consejeros. El 19 de octubre de 1971 se organizó oficialmente el Grupo Génesis. Mary Lucille Perkins Bankhead, bisnieta de Green Flake, quien había sido un pionero afroamericano Santo de los Últimos Días, aceptó un llamamiento como presidenta de la Sociedad de Socorro.
Alice Faulkner Burch, presidenta de la Sociedad de Socorro de Génesis desde agosto de 2014 hasta diciembre de 2019, comentó sobre ese momento emocionante: “¿Pueden imaginar a un hombre afroamericano liderando una organización de la Iglesia Santo de los Últimos Días? ¿O una presidenta de la Sociedad de Socorro afroamericana, en una época en la que eso no solo era inaudito, sino que se estimaba que nunca sería posible?”.
Los objetivos del Grupo Génesis eran hacer la obra misional y facilitar la reactivación entre los miembros afroamericanos en la región de Salt Lake. Los miembros del grupo realizaban obras de teatro, organizaban cenas con comida sureña y pícnics de verano para toda la comunidad negra de Utah. Los servicios de adoración incorporaban música espiritual negra, el batir de palmas y sermones con exclamaciones de la congregación que eran más típicos de las iglesias afroamericanas.
Bajo la dirección de sus primeros líderes, Lyn Dudley, James Sheppard y Ellie Mae Johnson, el coro Génesis se volvió famoso por su estilo diferente de música Santo de los Últimos Días. Si la congregación comenzaba a cantar demasiado suave, Ellie los detenía y decía: “¡Bueno, podemos hacerlo mejor que eso! ¡Nos han dado permiso para hacer que el techo vibre!”. Según Ellie, “era un dicho común que solían decir Darius Grey, el presidente Harwell y James Sheppard”, que la Primera Presidencia les había otorgado un permiso especial. Entonces se cantaba “con las voces en alto y con gozo dentro del edificio para hacer vibrar el techo y animar a todas las personas presentes, sin importar cuán mala hubiera sido nuestra semana”.
La comunidad Génesis se construyó sobre el poderoso legado espiritual de los pioneros afroamericanos Santos de los Últimos Días, como Elijah Able y Jane Manning James, quienes siguieron siendo fieles incluso frente a la esclavitud y al racismo dentro de la Iglesia.
“La fe de Jane la mantuvo anclada a la creencia de que Dios es justo, incluso si las condiciones sociales no lo son. Es esta misma creencia y profunda fe”, dijo Alice, “lo que nos permitió unirnos a la Iglesia antes de que se eliminara la restricción del sacerdocio, unirnos frente al ostracismo racista evidente en nuestros propios barrios, unirnos a pesar de la falta de apoyo, y permanecer”.
Después de la revelación del 1 de junio de 1978, que hizo que las bendiciones del sacerdocio y del templo estuvieran disponibles para todos, las reuniones del Grupo Génesis se descontinuaron. Sin embargo, el racismo y la discriminación contra los miembros afroamericanos persistieron. En 1996, Ruffin se reunió con Gordon B. Hinckley, ahora Presidente de la Iglesia, quien lo apoyó para reanudar el Grupo Génesis. El presidente Hinckley le recordó a Ruffin que el manto de presidente sobre el Grupo Génesis nunca se le había quitado por el solo hecho de haber dejado de reunirse. Ruffin retomó su llamamiento como presidente de Génesis y se reanudaron las reuniones mensuales regulares.
Hoy en día, el propósito de Génesis es “organizar charlas fogoneras y actividades para apoyar y edificar a todas las personas que se sientan marginadas o que sean tratadas como si no fueran bienvenidas en los barrios locales”, afirmó Alice.
En octubre de 2021, los miembros del grupo celebraron el 50.º aniversario de Génesis. “Génesis es, según fue creado, diferente a cualquier otra unidad de la Iglesia”, comentó Darius, “pero ese llamamiento especial es hermoso”.