La gratitud es un sentimiento de aprecio y agradecimiento por las bendiciones o los beneficios que hemos recibido. Al cultivar una actitud de agradecimiento, seremos más felices y más fuertes espiritualmente. Debemos expresar nuestro agradecimiento a Dios con regularidad por las bendiciones que nos da y a las demás personas por sus actos de bondad hacia nosotros.
Información adicional
El Señor ha prometido: “El que reciba todas las cosas con gratitud será glorificado” (D. y C. 78:19). La gratitud es una actitud que enaltece y exalta. Por lo general, la gente es más feliz cuando siente gratitud en el corazón. Cuando nos sentimos agradecidos es imposible que nos sintamos amargados, rencorosos o que tengamos mal genio.
Debemos estar agradecidos por las maravillosas bendiciones que recibimos y las grandes oportunidades que tenemos. Podemos estar agradecidos a nuestros padres, familiares, amigos y maestros. Debemos expresar gratitud a todos los que nos han ayudado de alguna manera.
Debemos dar gracias a nuestro Padre Celestial por Su bondad hacia nosotros reconociendo Su mano en todas las cosas, dándole gracias por todo lo que nos da, guardando Sus mandamientos y prestando servicio a los demás. En especial, debemos darle gracias por Su Hijo Amado, Jesucristo, por el gran ejemplo del Salvador, por Sus enseñanzas, por Su mano que se extiende para elevar y ayudar, por Su infinita Expiación.
—Véase Leales a la fe, 2004, págs. 97–98
Referencias de las Escrituras
Materiales adicionales para el estudio
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“Acción de gracias; Agradecido; Agradecimiento”
Guía para el Estudio de las Escrituras
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“Cultivemos la gratitud”
La Mujer Santo de los Últimos Días, Parte B, Lección 35
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“La gratitud”
Para la Fortaleza de la Juventud, pág. 14.