Dones espirituales


Los dones espirituales son bendiciones o aptitudes que Dios da por medio del poder del Espíritu Santo. Los dones del Espíritu se dan para bendecir y favorecer a los que aman al Señor y procuran guardar Sus mandamientos. (Véase D. y C. 46:9).

Información adicional

Todo miembro fiel de la Iglesia tiene al menos un don espiritual, y el Señor invita a Sus hijos a “buscar . . . diligentemente los mejores dones, recordando siempre para qué son dados“ (D. y C. 46:8). En las Escrituras se enseña sobre muchos dones del Espíritu:

El conocimiento de “que Jesucristo es el Hijo de Dios, y que fue crucificado por los pecados del mundo” (D. y C. 46:13).

La capacidad para creer en las palabras de los que testifican de Jesucristo (véase D. y C. 46:14).

El conocimiento de las “diferencias de administración” (D. y C. 46:15; véase también 1 Corintios 12:5). Dicho don se usa para administrar y dirigir a la Iglesia.

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Materiales adicionales para el estudio

  • “Dones del Espíritu” Guía para el Estudio de las Escrituras

  • “Los dones del Espíritu” Principios del Evangelio, Capítulo 22

  • “Los dones del Espíritu” La Mujer Santo de los Últimos Días, Parte B, Lección 3

  • “Los dones espirituales” Deberes y bendiciones del sacerdocio, Parte B, Lección 34

  • “…buscad diligentemente los mejores dones” Doctrina y Convenios y la Historia de la Iglesia, Doctrina del Evangelio: Manual para el maestro, Lección 15