Doctrina y Convenios 2021
28 marzo. ¿Por qué necesito la expiación de Jesucristo? Doctrina y Convenios 29


“28 marzo. ¿Por qué necesito la expiación de Jesucristo? Doctrina y Convenios 29”, Ven, sígueme — Para cuórums del Sacerdocio Aarónico y clases de las Mujeres Jóvenes: Temas doctrinales 2021 (2020)

“28 marzo. ¿Por qué necesito la expiación de Jesucristo?”Ven, sígueme — Para cuórums del Sacerdocio Aarónico y clases de las Mujeres Jóvenes: Temas doctrinales 2021

Cristo orando

Cristo en Getsemaní, por Heinrich Hofmann

28 marzo

¿Por qué necesito la expiación de Jesucristo?

Doctrina y Convenios 29

icono de deliberar en consejo

Deliberar en consejo

Dirigido por un miembro de la presidencia de cuórum o de clase; 10–20 minutos aproximadamente

Al principio de la reunión, reciten juntos el Lema de los cuórums del Sacerdocio Aarónico o el Lema de las Mujeres Jóvenes. Después dirijan un análisis sobre asuntos como los siguientes y planifiquen maneras de actuar de conformidad con lo que conversen (pueden decidir en la reunión de presidencia cuáles serán esos asuntos a analizar):

  • Nuestro cuórum o clase. ¿Qué podemos hacer para edificar la unidad entre los miembros del cuórum o de la clase? ¿En qué metas nos gustaría trabajar juntos?

  • Nuestros deberes y responsabilidades. ¿Qué estamos haciendo para compartir el Evangelio? ¿Qué experiencias hemos tenido al realizar la obra del templo y de historia familiar?

  • Nuestra vida. ¿De qué manera hemos visto la mano del Señor en nuestra vida? ¿Qué cosas nos han inspirado durante nuestro estudio de las Escrituras esta semana?

Según sea apropiado, hagan lo siguiente al terminar la lección:

  • Testificar de los principios que se enseñaron.

  • Recordar a los miembros del cuórum o de la clase los planes y las invitaciones que se hicieron durante la reunión.

icono de enseñar la doctrina

Enseñar la doctrina

Dirigido por un líder adulto o un(a) joven; 25–35 minutos aproximadamente

Prepárate espiritualmente

El presidente Ezra Taft Benson enseñó: “De la misma manera que un hombre realmente no desea comida hasta que siente hambre, del mismo modo no desea la salvación de Cristo hasta que comprende la razón por la que necesita a Cristo. Nadie sabe de forma adecuada y precisa la razón por la que necesita a Cristo hasta que comprende y acepta la doctrina de la Caída y su efecto sobre toda la humanidad” (véase “El Libro de Mormón y Doctrina y Convenios”, Liahona, julio de 1987, pág. 87). Al estudiar Doctrina y Convenios 29 esta semana, tal vez hayas notado la descripción que el Salvador hace de la Caída y de cómo somos redimidos de ella. ¿Cómo obtuviste un testimonio de Jesucristo y de Su función como tu Salvador y Redentor? Piensa de qué manera el fortalecer el testimonio que los miembros del cuórum o de la clase tengan de Él producirá un cambio en ellos. Al prepararte, considera estudiar “El albedrío y la caída de Adán y Eva”, “La expiación de Jesucristo” y “La misión divina de Jesucristo” en el capítulo 3 de Predicad Mi Evangelio (2018, págs. 49–52, 60–61).

Mujeres jóvenes en una clase

Debido a que el Salvador nos redimió de la Caída, podemos hallar gozo.

Aprender juntos

Para dar inicio al análisis de hoy, podrías invitar a quienes enseñas a que escriban en la pizarra cualquier cosa que sepan sobre la caída de Adán y Eva. Por ejemplo, ¿qué aprenden de la Caída en Doctrina y Convenios 29:36–50? ¿Qué evidencias de la Caída vemos a nuestro alrededor? Las siguientes actividades ayudarán a tu cuórum o clase a descubrir cómo la expiación de Jesucristo nos ayuda a superar los efectos de la Caída.

  • Para comprender mejor la caída de Adán y Eva, los miembros del cuórum o de la clase podrían leer “Caída” en Leales a la Fe (págs. 36–39) o “El albedrío y la caída de Adán y Eva” en el capítulo 3 de Predicad Mi Evangelio (págs. 49–50). Invítales a imaginar que un amigo les pregunta: “¿Por qué necesito a Jesucristo?”. Pídeles que se enseñen mutuamente, de dos en dos, cómo responderían esa pregunta basándose en lo que aprendieron durante su lectura.

  • ¿Cómo puedes ayudar a los miembros del cuórum o de la clase a aprender de las Escrituras por qué necesitan la expiación de Jesucristo? Una manera es apuntar en la pizarra algunas de las referencias de las Escrituras que figuran en “Recursos de apoyo” y luego escribir en tiras de papel afirmaciones que resuman dichas referencias. Entrega a cada miembro del cuórum o de la clase una de las tiras de papel. Invítales a leer las referencias de las Escrituras que se encuentran en la pizarra y buscar una que coincida con la afirmación que tengan. (Algunas afirmaciones hacen referencia a más de un pasaje de las Escrituras). Invita a cada uno de los miembros del cuórum o de la clase a leer en voz alta el pasaje de las Escrituras que corresponda a la afirmación que tenga y a compartir lo que haya aprendido sobre por qué necesitamos la expiación del Salvador.

  • Invita a los miembros del cuórum o de la clase a que respondan en privado preguntas como las siguientes: ¿De qué manera soy bendecido mediante la expiación de Jesucristo? ¿Qué desearía el Salvador que yo cambiara para poder experimentar más plenamente las bendiciones de Su expiación? Luego pídeles que analicen juntos la primera pregunta. Podrían repasar “La expiación de Jesucristo” y “La misión divina de Jesucristo”, en el capítulo 3 de Predicad Mi Evangelio (págs. 51–52, 60–61), y uno o más de los videos que aparecen en “Recursos de apoyo”. Invítales a compartir lo que aprendieron.

Actuar con fe

Insta a los miembros del cuórum o de la clase a meditar y anotar lo que harán para actuar de conformidad con las impresiones que hayan recibido el día de hoy. ¿En qué forma se relaciona la clase de hoy con las metas personales que se han puesto? Si lo desean, los miembros del cuórum o de la clase podrían compartir sus ideas.

Recursos de apoyo

Enseñar a la manera del Salvador

El Salvador oró por Sus discípulos y les sirvió constantemente; buscó oportunidades de estar con ellos y expresarles Su amor. ¿Qué oportunidades tienes para hacer lo mismo por quienes enseñas? (Véase Enseñar a la manera del Salvador, 2016, pág. 6).