“7 – 13 septiembre. 3 Nefi 1–7: ‘Alza la cabeza y sé de buen ánimo’”, Ven, sígueme — Para uso individual y familiar Libro de Mormón 2020 (2020)
“7 – 13 septiembre. 3 Nefi 1–7”, Ven, sígueme — Para uso individual y familiar 2020
7 – 13 septiembre
3 Nefi 1–7
“Alza la cabeza y sé de buen ánimo”
Los nefitas fueron testigos de señales y milagros, mas con el tiempo se olvidaron de lo que habían experimentado (véase 3 Nefi 2:1). El anotar las impresiones que reciba le ayudará a recordar sus experiencias espirituales durante su estudio de 3 Nefi 1–7.
Anote sus impresiones
Por una parte, este fue un tiempo emocionante para ser un creyente en Jesucristo. Las profecías se estaban cumpliendo; grandes señales y milagros entre el pueblo indicaban que el Salvador pronto nacería. Por otra parte, también fue un tiempo de angustias para los creyentes, ya que a pesar de todos los milagros, los incrédulos insistían en que “ya había pasado el tiempo” para el nacimiento del Salvador (3 Nefi 1:5). Esas personas causaron “un gran alboroto por toda la tierra” (3 Nefi 1:7) y aun fijaron una fecha para matar a todos los creyentes si no se cumplía la señal profetizada por Samuel el Lamanita: una noche sin oscuridad.
En estas difíciles circunstancias, el profeta Nefi “clamó fervorosamente a su Dios a favor de su pueblo” (3 Nefi 1:11). La respuesta del Señor es inspiradora para todo aquel que enfrenta persecución o dudas y necesita saber que la luz vencerá a la oscuridad: “Alza la cabeza y sé de buen ánimo; … he de cumplir todas las cosas que he hecho declarar por boca de mis santos profetas” (3 Nefi 1:13).
Ideas para el estudio personal de las Escrituras
El Señor cumplirá todas Sus palabras.
¿Cómo piensa que se habría sentido si usted hubiera sido uno de los creyentes en el tiempo que se describe en 3 Nefi 1–7? ¿Cómo debe haber sido, por ejemplo, esperar que llegara la noche en la que no habría oscuridad, que anunciaría el nacimiento del Salvador, sabiendo que lo matarían a usted si eso no sucediera? A medida que lea 3 Nefi 1:4–21 y 5:1–3, averigüe qué hicieron Nefi y los demás creyentes para conservar su fe durante esos tiempos difíciles. ¿Cómo los bendijo el Señor? ¿Qué aprende usted aquí que le puede ayudar cuando se halle en las situación de esperar bendiciones que le ha prometido el Señor?
El olvidar las experiencias espirituales me hace vulnerable a las tentaciones de Satanás.
Quizás piense que presenciar algo tan milagroso como una noche sin oscuridad permanecería en su memoria por mucho tiempo y sería un ancla para su testimonio. Sin embargo, el recuerdo de las señales y las maravillas que presenciaron los nefitas pareció desvanecerse con el tiempo. ¿Qué les hizo olvidarlas, y qué consecuencias trajo el olvidarlas? (véase 3 Nefi 1:22; 2:1–3).
¿Qué está haciendo usted para recordar y renovar su testimonio de las verdades espirituales? Por ejemplo, piense en cómo le puede ayudar el registrar sus experiencias espirituales. ¿Cómo compartirá usted su testimonio con las personas más allegadas a usted para ayudarles a creer?
Véanse también Alma 5:6; Henry B. Eyring, “Oh recordad, recordad”, Liahona, noviembre de 2007, págs. 66–69; Neil L. Andersen, “La fe no es una casualidad, sino una elección”, Liahona, noviembre de 2015, págs. 65–68.
3 Nefi 2:11–12; 3:1–26; 5:24–26
El Señor fortalece a Sus santos contra los peligros espirituales.
En nuestros días, por lo general, no vemos a bandas de ladrones que nos fuercen a dejar nuestros hogares y a reunirnos en un solo lugar. Sin embargo, enfrentamos peligros espirituales, y la experiencia de los nefitas contiene lecciones que nos ayudarán. Trate de determinar cuáles son esas lecciones a medida que lea 3 Nefi 2:11–12 y 3:1–26.
En 3 Nefi 5:24–26 leemos sobre cómo será juntado el pueblo del Señor en los últimos días. ¿Qué nos enseñan esos versículos acerca de la manera en que el Señor está recogiendo a Su pueblo hoy en día?
Véanse también “Devocional mundial para los jóvenes: Mensajes del presidente Russell M. Nelson y la hermana Wendy W. Nelson”, 3 de junio de 2018, churchofjesuschrist.org; “Israel—La congregación de Israel”, Guía para el Estudio de las Escrituras, scriptures.churchofjesuschrist.org.
Soy un discípulo de Jesucristo.
¿Qué cree usted que significa ser un discípulo de Jesucristo? (véase D. y C. 41:5). En 3 Nefi 5:12–26, Mormón interrumpió su compilación de los registros nefitas y declaró que él era un discípulo de Jesucristo. Luego, en 3 Nefi 7:15–26, él describió el ministerio de otro discípulo: el profeta Nefi. ¿Qué ve usted en estos dos pasajes que le permita entender lo que significa ser un discípulo de Cristo?
Ideas para el estudio familiar de las Escrituras y la Noche de Hogar
Al leer las Escrituras con su familia, el Espíritu le ayudará a saber qué principios debe enfatizar y analizar a fin de cubrir las necesidades de su familia. A continuación se presentan algunas ideas:
3 Nefi 3:13–14, 25–26
¿Qué hicieron los nefitas para protegerse de los enemigos a los que se enfrentaban? ¿Qué estamos haciendo para que nuestro hogar sea un lugar de refugio y protección de los males del mundo?
3 Nefi 2:1–3; 6:15–17
Para ayudar a su familia a saber la manera en que Satanás nos puede engañar, dibuje un cuerpo, y a medida que su familia lea 3 Nefi 2:1–3 y 6:15–17, marque las diversas partes del cuerpo que se mencionan. De acuerdo con estos versículos, ¿cuáles son algunas de las formas en que Satanás nos tienta a olvidarnos de Dios y a volvernos hacia el pecado?
3 Nefi 4:7–12, 30–33
¿Qué hicieron los nefitas cuando vieron venir a los ladrones de Gadiantón? ¿Qué puede aprender nuestra familia de los nefitas para cuando nos enfrentemos a situaciones difíciles? ¿Qué aprendemos de las palabras de los nefitas después de que el Señor los ayudara en sus tiempos de dificultades?
3 Nefi 5:13; Doctrina y Convenios 41:5
Lean 3 Nefi 5:13 y Doctrina y Convenios 41:5 y analicen lo que significa ser un discípulo de Cristo. Los miembros de la familia podrían hablar de las veces en que se vieron como discípulos de Cristo. Si tienen hijos pequeños, podrían elaborar una insignia que diga: “Soy un discípulo de Cristo”, y permitirles llevarla puesta cada vez que usted vea que están siguiendo al Salvador.
Para consultar más ideas para enseñar a los niños, vea la reseña de esta semana en Ven, sígueme — Para la Primaria.