“7 – 13 febrero. Génesis 12–17; Abraham 1–2: ‘Ser un seguidor más fiel de la rectitud’”, Ven, sígueme — Para uso individual y familiar: Antiguo Testamento 2022 (2021)
“7 – 13 febrero. Génesis 12–17; Abraham 1–2”, Ven, sígueme — Para uso individual y familiar: 2022
7 – 13 febrero
Génesis 12–17; Abraham 1–2
“Ser un seguidor más fiel de la rectitud”
Al leer acerca de Abram y Sarai (a los que luego se llamó Abraham y Sara, respectivamente) y la familia de estos, medite en la forma en que sus ejemplos le inspiran. Apunte sus impresiones en cuanto a lo que puede hacer para “ser un seguidor más fiel de la rectitud” (Abraham 1:2).
Anote sus impresiones
Debido al convenio que Dios hizo con Abraham, este ha sido llamado “el padre de los fieles” (Doctrina y Convenios 138:41) y “amigo de Dios” (Santiago 2:23). Hoy en día, hay millones de personas que lo honran como su antepasado directo, mientras que otras han sido adoptadas en su familia por medio de la conversión al evangelio de Jesucristo. No obstante, Abraham provenía de una familia problemática: su padre, que se había apartado de la verdadera adoración a Dios, intentó ofrecer a Abraham en sacrificio a dioses falsos. A pesar de ello, el deseo de Abraham era ser un “seguidor más fiel de la rectitud” (Abraham 1:2), y la historia de su vida demuestra que Dios honró ese deseo. La vida de Abraham es un testimonio de que, sin importar cuáles hayan sido los antecedentes de la familia de una persona, el futuro de esta puede rebosar de esperanza.
Ideas para el estudio personal de las Escrituras
Dios me bendecirá por mi fe y mis deseos justos.
Al igual que muchos de nosotros, Abraham vivía en un entorno inicuo; no obstante, deseaba ser justo. El presidente Dallin H. Oaks enseñó sobre la importancia de tener deseos rectos: “Aun con lo importante que es perder todo el deseo de pecar, la vida eterna requiere más. A fin de lograr nuestro destino eterno, desearemos las cualidades que se requieran para convertirnos en un ser eterno y trabajaremos para obtenerlas […]. Si eso parece demasiado difícil, y en verdad no es fácil para ninguno de nosotros, entonces debemos comenzar con el deseo de tener dichas cualidades e implorar a nuestro amoroso Padre Celestial ayuda en cuanto a nuestros sentimientos [véase Moroni 7:48]” (“El deseo”, Liahona, mayo de 2011, págs. 44–45). Al leer Abraham 1:1–19, considere la forma en que esos versículos demuestran lo que el presidente Oaks ha enseñado. Algunas preguntas como las siguientes podrían resultar de ayuda:
-
¿Qué es lo que Abraham deseaba y procuraba? ¿Qué hizo para demostrar su fe?
-
¿Cuáles son los deseos de usted? ¿Hay algo que sienta que debe hacer para purificar sus deseos?
-
¿Qué desafíos afrontó Abraham a causa de sus deseos rectos? ¿De qué manera lo ayudó Dios?
-
¿Qué mensaje contienen esos versículos para aquellos cuyos familiares no deseen la rectitud?
Véanse también Mateo 7:7; “La liberación de Abraham” (video), ChurchofJesusChrist.org.
¿A quiénes incluye el convenio de Abraham?
Cuando el Señor hizo Su convenio con Abraham, prometió que dicho convenio continuaría en la posteridad de Abraham (en su “descendencia”), y que “cuantos reciban este evangelio […] serán considerados tu descendencia” (Abraham 2:10–11). Eso significa que las promesas del convenio de Abraham se extienden a los miembros de la Iglesia de la actualidad, ya sea que fueren descendientes literales de Abraham, o fuesen adoptados en su familia mediante el bautismo y la conversión al evangelio de Jesucristo (véanse Gálatas 3:26–29; Doctrina y Convenios 132:30–32). Para ser contada entre la descendencia de Abraham, la persona debe obedecer las leyes y las ordenanzas del Evangelio.
Génesis 12:1–3; 13:15–16; 15:1–6; 17:1–8, 15–22; Abraham 2:8–11
El convenio de Abraham me bendice a mí y a mi familia.
Ya que todos los miembros de la Iglesia están incluidos en el convenio de Abraham, tal vez desee dedicar algo de tiempo a meditar por qué dicho convenio es significativo en su vida. Anote sus reflexiones en cuanto a la siguiente pregunta:
¿De qué manera las promesas que están en Abraham 2:8–11 nos bendicen a mí y a mi familia? (Véanse también Génesis 12:1–3; 13:15–16).
¿Qué aprendo sobre el convenio de Abraham en Génesis 15:1–6; 17:1–8, 15–22?
¿Qué me siento inspirado a hacer para contribuir a cumplir la promesa de que “serán bendecidas todas las familias de la tierra”? (Abraham 2:11).
Es posible que considere que algunas de las bendiciones terrenales prometidas a Abraham y a Sara, tales como heredar una tierra prometida y ser padres de una gran posteridad, tienen paralelismos eternos. Entre esos paralelismos se hallan una heredad en el Reino Celestial (véase Doctrina y Convenios 132:29) y el matrimonio eterno, junto con una posteridad eterna (véanse Doctrina y Convenios 131:1–4; 132:20–24, 28–32). El presidente Russell M. Nelson ha enseñado que es “en el templo” donde “recibimos nuestras máximas bendiciones como descendientes de Abraham, de Isaac y de Jacob” (“El recogimiento del Israel disperso”, Liahona, noviembre de 2006, pág. 80).
Véanse también Traducción de José Smith, Génesis 15:9–12; 17:3–12 (en el apéndice de la Biblia); Guía para el Estudio de las Escrituras, “Abraham, convenio de (convenio abrahámico)”; “Ideas a tener presentes: El convenio”, en este material.
Ideas para el estudio familiar de las Escrituras y la Noche de Hogar
-
Génesis 13:5–12.¿Qué hizo Abraham para establecer la paz en su familia? Tal vez los miembros de su familia podrían practicar cómo ser pacificadores al igual que Abraham haciendo una dramatización de cómo resolver los conflictos que podrían surgir en la familia.
-
Génesis 13:16; 15:2–6; 17:15–19.¿Cómo puede ayudar a su familia a comprender la promesa del Señor que está en estos versículos de que, aunque Abraham y Sara aún no tenían hijos, su posteridad sería tan numerosa como el polvo de la tierra, las estrellas en el cielo o la arena de la orilla del mar? (Véase también Génesis 22:17). Quizá podría mostrar a la familia un recipiente con arena, o podrían observar las estrellas, o emplear la ilustración que acompaña esta reseña. ¿Cómo podemos confiar en las promesas de Dios aun cuando parezcan imposibles?
-
Génesis 14:18–20.¿Qué aprendemos sobre Melquisedec en la Traducción de José Smith, Génesis 14:25–40 (en el apéndice de la Biblia; véase también Alma 13:13–19). ¿Cómo podemos “establec[er] la rectitud”, tal como lo hizo Melquisedec? (Versículo 36). ¿Qué más nos inspira del ministerio de Melquisedec?
-
Génesis 16.Leer acerca de Agar podría brindar la oportunidad de analizar la forma en que el Señor nos ayuda cuando nos sentimos agraviados. Tal vez podría mencionar que “Ismael” significa “Dios escucha”. ¿En qué ocasiones hemos sentido que el Señor nos ha escuchado y ayudado al habernos visto agraviados? (Véase Génesis 16:11).
Para consultar más ideas sobre cómo enseñar a los niños, véase la reseña de esta semana de Ven, sígueme — Para la Primaria.
Canción que se sugiere: “Voy a vivir el Evangelio”, Canciones para los niños, pág. 72.