Illustration of Elisha showing his servant the chariots of fire [Ilustración de Eliseo mostrando a su siervo los carros de fuego], © Review & Herald Publishing/licencia de goodsalt.com.

4 – 10 julio

2 Reyes 2–7

“Hay profeta en Israel”

Las actividades de esta reseña tienen por objeto que usted genere sus propias ideas creativas. Mediante el estudio acompañado de la oración, podrá recibir inspiración para atender las necesidades de los niños a quienes enseña.

Anote sus impresiones

Invitar a compartir

A fin de animar a los niños a compartir lo que sepan sobre el profeta Eliseo, invítelos a hacer un dibujo de algo que él hizo.

Enseñar la doctrina: Niños pequeños

2 Reyes 4–5

Dios puede obrar milagros en mi vida.

Mediante el profeta Eliseo, Jehová bendijo a muchas personas de maneras milagrosas. Ayude a los niños a reconocer los milagros del Señor en su propia vida.

Posibles actividades

• Comparta uno o más de los milagros que están registrados en 2 Reyes 4–5 (véanse “Elías y Eliseo” y el tercer milagro en “El profeta Eliseo: Tres milagros” en Relatos del Antiguo Testamento). Permita que los niños compartan lo que les gusta sobre esas historias. Invítelos a volver a contarse las historias unos a otros.

• Testifique que el Señor puede usar Su poder a fin de realizar grandes cosas para ayudarnos. Esas cosas son lo que llamamos milagros. Hable de la forma en que el Señor le ha demostrado Su amor a usted de maneras grandes o pequeñas. Entonen juntos una canción que hable del amor de Dios, como “Mi Padre Celestial me ama” (Canciones para los niños, págs. 16–17). Pida a los niños que expresen cómo saben que el Padre Celestial los ama.

2 Reyes 5:1–15

Puedo escoger hacer lo que Dios manda por medio de Su profeta.

A Naamán se le dificultaba obedecer cuando el profeta Eliseo le dijo cómo curarse de la lepra. Medite sobre cómo puede ayudar a los niños a entender las bendiciones que provienen de ser obedientes.

Posibles actividades

• Relate la historia de Naamán (véanse 2 Reyes 5:9–14; el tercer milagro en “El profeta Eliseo: Tres milagros”, en Relatos del Antiguo Testamento; véase también la imagen de Naamán en la reseña de esta semana de Ven, sígueme — Para uso individual y familiar). Haga hincapié en que al principio Naamán no se quería lavar en el río Jordán, aun cuando Eliseo le dijo que eso sanaría su enfermedad. Hable sobre alguna ocasión en la que no se haya sentido seguro de hacer lo correcto y ayude a los niños a pensar en sus propios ejemplos; luego hable de cómo Naamán fue bendecido cuando tomó la decisión correcta.

• Lea 2 Reyes 5:13 a los niños y explique que los siervos de Naamán le ayudaron a decidir obedecer al profeta Eliseo. Ayude a los niños a pensar en formas en que pudieran ayudar a sus amigos o familiares a escuchar y obedecer al profeta.

2 Reyes 6:8–17

El Señor está velando por mí.

Cuando el siervo de Eliseo vio al ejército sirio que los rodeaba, sintió mucho temor; sin embargo, Eliseo le dijo que “no t[uviera] miedo” porque Jehová estaba con ellos (2 Reyes 6:16).

Posibles actividades

• Lea 2 Reyes 6:15 a los niños o parafraséelo para que puedan entender. Invítelos a imaginar que están rodeados por un gran ejército con caballos y carros, tal como lo estuvo el siervo de Eliseo. ¿Cómo se sentirían? ¿Qué harían? Pida a los niños que cierren los ojos mientras usted les lee 2 Reyes 6:16–17. Cuando llegue a la parte que dice “abras sus ojos”, pida a los niños que abran los ojos. Descríbales lo que el siervo vio que estaba protegiéndolos a él y a Eliseo. Exprese cómo es que usted sabe que el Señor está velando por nosotros.

• Entonen juntos una canción que hable del cuidado que Dios nos da, tal como la primera estrofa de “Caros niños, Dios os ama” (Himnos, nro. 47). Reemplace las palabras de la canción por los nombres de los niños para hacer hincapié en que Dios los cuida.

Enseñar la doctrina: Niños mayores

2 Reyes 4–5

Dios puede obrar milagros en mi vida.

Durante su ministerio, Eliseo sanó y bendijo a muchas personas. ¿Cómo pueden los milagros registrados en 2 Reyes 4–5 ayudar a los niños a reconocer la mano del Padre Celestial en su vida?

Posibles actividades

• Invite a los niños a anotar en la pizarra los milagros que recuerden de las Escrituras y luego concédales tiempo para repasar 2 Reyes 4–5 y agregar más milagros a su lista (véanse 2 Reyes 4:1–7, 14–17, 32–35, 38–41, 42–44; 5:10–14). ¿Qué nos enseñan esos milagros sobre lo que siente el Padre Celestial por nosotros?

• Pida a los niños que hablen sobre lo que es un milagro. Si precisaran ayuda, podrían repasar “Milagros” en la Guía para el Estudio de las Escrituras (escrituras.ChurchofJesusChrist.org). Invítelos a mencionar algunos milagros que Jesús llevó a cabo. Hable sobre la forma en que usted ha visto el poder de Dios en su vida. Podría incluir milagros cotidianos, tales como sentimientos de paz, el don de la vida diaria o ayuda con tareas cotidianas. Invite a los niños a hablar sobre los milagros de su vida, tanto grandes como pequeños.

2 Reyes 5:1–15

Puedo escoger ser fiel, humilde y obediente.

Naamán quería ser sanado de la lepra, pero no esperaba la instrucción sencilla que Eliseo le dio: “Ve y lávate siete veces en el Jordán” (2 Reyes 5:10). Considere cómo podría valerse de esta historia para enseñar a los niños en cuanto a la fe en Jesucristo, la humildad y la obediencia.

Posibles actividades

• Escriba fe, humildad y obediencia en la pizarra, y pregunte a los niños qué significan esas palabras (véase Leales a la Fe, págs. 90–92, 103–104, 126–127). Invite a los niños a leer 2 Reyes 5:9–14. También podría mostrar partes del video “Naamán y Eliseo” (ChurchofJesusChrist.org). ¿De qué manera demostró Naamán fe en Jehová, humildad y obediencia? ¿Por qué es importante que tengamos estas cualidades?

• Pida a los niños que hablen sobre alguna ocasión en la que un amigo les haya ayudado a escoger lo correcto. Usted también comparta una experiencia propia. Lean juntos 2 Reyes 5:10–13 para averiguar cómo los siervos de Naamán le ayudaron a escoger obedecer al profeta. ¿Qué podemos hacer para ayudarnos unos a otros a seguir al profeta en la actualidad?

• Invite a los niños a completar la hoja de actividades y a compartir con un miembro de su familia o un amigo algo que hayan aprendido de la historia de Naamán que se encuentra en 2 Reyes 5:1–15.

2 Reyes 6:8–17

No estoy solo.

Es posible que los niños a quienes enseña en ocasiones se sientan como el siervo de Eliseo: inseguros de cómo afrontar los desafíos que tienen. Puede valerse del relato que se encuentra en 2 Reyes 6:8–17 para enseñarles a “no ten[er] miedo”, ya que el Señor no los ha dejado solos.

Posibles actividades

• Lean juntos 2 Reyes 6:15–17 e invite a uno de los niños a hacer de cuenta que es el siervo de Eliseo mientras que los otros niños hacen preguntas en cuanto a su experiencia, tales como qué sintió cuando el ejército sirio rodeaba la ciudad o cuáles fueron sus sentimientos al ver al ejército de Dios. Hable con los niños sobre las ocasiones en las que se hayan sentido solos al vivir el Evangelio. ¿De qué manera nos ayuda el Señor a saber que no estamos solos?

• Entonen una canción que hable de confiar en el Señor, tal como “La fe” (Himnos, nro. 68). ¿Qué nos enseña esa canción sobre confiar en el Señor?

Alentar el aprendizaje en el hogar

Invite a los niños a compartir experiencias con su familia en las que hayan reconocido la mano de Dios en su vida. Ínstelos a que pidan a los integrantes de su familia que compartan experiencias similares.

Cómo mejorar nuestra enseñanza

Los niños aprenden de muchas maneras. “Su labor de enseñar a los niños resultará más eficaz si emplea una variedad de métodos de enseñanza”, incluyendo relatos, ayudas visuales y música (Enseñar a la manera del Salvador, pág. 25).