Instrucción para líderes, octubre de 2023
“Os regocijaréis conmigo” (Jacob 5:75): La relación entre la adoración en el hogar y en la Iglesia


“‘Os regocijaréis conmigo’ (Jacob 5:75): La relación entre la adoración en el hogar y en la Iglesia”, Reunión de liderazgo de la conferencia general — Octubre de 2023, 2023

“La relación entre la adoración en el hogar y en la Iglesia”, Reunión de liderazgo de la conferencia general — Octubre de 2023

Reunión de liderazgo de la conferencia general — Octubre de 2023

“Os regocijaréis conmigo” (Jacob 5:75): La relación entre la adoración en el hogar y en la Iglesia

Instrucción del élder David A. Bednar

Edificios de la Iglesia, familias leyendo y estudiando

El Señor nos proporciona momentos sagrados y lugares santos para ayudarnos a aprender y vivir las verdades de Su Evangelio restaurado y sentir gozo duradero con Él.

Los momentos sagrados incluyen “[ir] a la casa de oración y [ofrecer] [nuestro]s sacramentos en [Su] día santo” (Doctrina y Convenios 59:9), participar en las ordenanzas del sacerdocio, recibir y renovar convenios y aprender acerca de nuestro Salvador Jesucristo.

Los lugares santos incluyen las Casas del Señor, los centros de reuniones e instalaciones aprobadas.

Los propósitos principales tanto de los momentos sagrados como de los lugares santos son idénticos: centrar repetidamente nuestra atención en nuestro Padre Celestial y en Su plan, en el Señor Jesucristo y Su Expiación, en el poder edificante del Espíritu Santo y en las promesas correspondientes a los convenios sagrados y las ordenanzas del Evangelio restaurado del Salvador.

Nuestras experiencias continuas en el día de reposo, en el templo y en el hogar pueden fortalecernos con el poder del Espíritu Santo, con una conexión por convenio constante y más fuerte con el Padre y el Hijo, y con “un fulgor perfecto de esperanza” (2 Nefi 31:20) en las promesas eternas de Dios.

Nuestro hogar debe ser la combinación suprema tanto del tiempo sagrado como del lugar santo en el que las personas y las familias pueden aprender y recordar que Dios es nuestro Padre Celestial, que somos Sus hijos, que Jesucristo es nuestro Salvador y que el gozo duradero se halla en el Señor.

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