Mi llamamiento como miembro de la presidencia de clase de las Mujeres Jóvenes

Cómo empezar

De la Presidencia General de las Mujeres Jóvenes

Querida miembro de la presidencia de clase de las Mujeres Jóvenes:

¡Felicitaciones por tu nuevo llamamiento! Estamos agradecidas de que hayas dicho que sí. Sabemos que el Padre Celestial te conoce y te ama. Tu clase y tu barrio te necesitan como líder, necesitan tu energía y se fijarán en tu ejemplo. Ten confianza en ti misma y en el Señor. Él te bendecirá a medida que hagas todo lo posible por servirle a Él y servir a las jóvenes de tu clase.

Cuando fuiste apartada bajo la dirección de aquellos que poseen las llaves del sacerdocio, se te dio autoridad para actuar en tu llamamiento (véase Manual General, 3.4.3.1, ChurchofJesusChrist.org). Al orar a tu Padre Celestial y pensar en las jóvenes de tu clase, recibirás revelación para guiarte. Cuando recibas pensamientos e impresiones, actúa de acuerdo con ellos.

Busca la mano del Señor en tu servicio: estará allí. Comparte las bendiciones y los milagros que veas con tu presidencia y con tu familia. Esta es la obra del Señor (véase Moisés 1:39) y estás ayudando a Sus preciadas hijas a acercarse más a Él. El Señor te guiará y magnificará tus esfuerzos a medida que dediques tu tiempo y tu amor a la obra.

Oramos para que descubras gran gozo y paz al servir al Señor.

Con amor,

Bonnie H. Cordon

Michelle D. Craig

Rebecca L. Craven

Presidencia General de las Mujeres Jóvenes

No estás sola

Has sido llamada por Dios y Él te ayudará. Puedes orar pidiéndole guía y seguridad. Él magnificará tus esfuerzos en tu llamamiento y en otros aspectos de tu vida. Sentirás el amor que Él tiene por ti, por las jóvenes a las que sirves y por sus familias.

Las demás miembros de tu presidencia, tus líderes adultas de las Mujeres Jóvenes, otras presidencias de clase y de cuórum y el obispado están a tu lado para apoyarte. Recurre a los talentos y fortalezas de cada uno de ustedes al servir juntos y ministrar a los jóvenes de tu barrio.

También puedes acudir a tus padres, a tu familia y a otros adultos de confianza. El Señor te ha rodeado, y continuará rodeándote, de personas que te ayudarán a tener éxito.

Cómo empezar

Antes del sostenimiento

• Ser llamada como líder de las Mujeres Jóvenes es una linda y sagrada oportunidad de ver a las jóvenes de tu clase como el Padre Celestial las ve. Lee el lema de las Mujeres Jóvenes (ChurchofJesusChrist.org) y piensa en cada persona. Al igual que tú, ellas también son “hijas amadas”.

• Al considerar lo que el Padre Celestial necesita que hagas como líder, recuerda estos dos principios eternos:

  • “… [C]uando os halláis al servicio de vuestros semejantes, solo estáis al servicio de vuestro Dios” (Mosíah 2:17).

  • “Allegaos a mí, y yo me allegaré a vosotros; buscadme diligentemente, y me hallaréis” (Doctrina y Convenios 88:63).

  Los hábitos religiosos personales que han bendecido tu vida —la oración, el estudio de las Escrituras y el ayuno— serán aún más importantes para ti como líder.

• Familiarízate con los recursos que están a tu disposición en tu llamamiento:

  • Lee “Mujeres Jóvenes”, capítulo 11 del Manual General, en especial las secciones que hablan del propósito de la organización de las Mujeres Jóvenes (véase 11.1.1) y de las responsabilidades de tu presidencia (véase 11.3.4).

  • Lee los recursos adicionales que se mencionan y que aparecen con vínculos al final de esta guía para tu llamamiento.

Después de ser sostenida y apartada

• Poco después de que se aparte a tu presidencia, un miembro del obispado les enseñará acerca de sus responsabilidades (véase “Recursos para las presidencias de cuórum y de clase”, ChurchofJesusChrist.org).

• Como presidencia, deliberen en consejo con las líderes adultas de las Mujeres Jóvenes. Ellas están entusiasmadas, quieren ayudarlas y las guiarán a medida que aprenden a dirigir y unir a su clase.

• Realicen reuniones regulares de presidencia de clase. Si se reúnen semanalmente, verán milagros en su servicio. Encontrarás más información sobre lo que deben hacer como presidencia en la siguiente sección: “¿En qué debo centrarme?”.