Mi llamamiento como presidenta de las Mujeres Jóvenes
Responsabilidades
El Señor está agradecido por su disposición a prestar servicio en Su Iglesia. A continuación encontrará un resumen de las responsabilidades de su llamamiento.
Propósito de las Mujeres Jóvenes
La organización de las Mujeres Jóvenes ayuda a las amadas hijas de Dios a prepararse para regresar a Su presencia. Ayuda a las mujeres jóvenes a hacer convenios sagrados y cumplirlos, y a profundizar su conversión a Jesucristo y Su Evangelio. En sus clases, las mujeres jóvenes prestan servicio a los demás, cumplen con las responsabilidades que adquirieron con sus convenios, cultivan la unidad, y aprenden y viven la doctrina (véase Manual General: Servir en La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, 11.1.1).
Presidenta y presidencia
La presidenta sirve en el consejo de barrio y en el consejo de barrio para la juventud (véase 11.3.4.4). Lleva a cabo reuniones de presidencia con regularidad y se reúne con el obispo. La presidencia ministra a las mujeres jóvenes a medida que se convierten en discípulas de Jesucristo para toda la vida; también enseña a las presidencias de clase sus responsabilidades y las apoya en su labor de liderazgo (véase 11.3.2). La presidenta supervisa los registros, los informes y las finanzas. Sus consejeras brindan apoyo. La presidenta también aconseja a las jóvenes en cuanto a las dificultades que afronten para las que no se requiera la participación del obispo y que no estén relacionadas con el abuso ni el maltrato.
Líderes jóvenes
La presidencia de las Mujeres Jóvenes apoya a las líderes jóvenes. Las presidentas de clase sirven en el consejo de barrio para la juventud. Las presidencias de clase dirigen y ministran a las jóvenes a medida que se acercan más al Salvador y participan en la obra de Dios de salvación y exaltación. Con el apoyo de las líderes adultas, planifican proyectos de servicio, actividades y reuniones dominicales (véase 11.3.4.2).
Clases dominicales
Los obispados y las líderes adultas de las Mujeres Jóvenes deciden con espíritu de oración cómo organizar las clases de acuerdo con las edades y consideran las oportunidades de liderazgo para las mujeres jóvenes. Cada clase, sin importar su tamaño, debe tener una presidenta y, donde sea posible, una o dos consejeras y una secretaria (véase 11.1.3).
Servicio y actividades
Las presidencias de clase, con el apoyo de las líderes adultas, planifican proyectos de servicio y actividades que edifiquen su testimonio, fortalezcan a las familias, fomenten la unidad de la clase y proporcionen oportunidades de bendecir a los demás (véase 11.2.1.3). Los proyectos de servicio y las actividades son una oportunidad para reunir a las jóvenes, compartir el gozo de vivir el Evangelio y participar en la poderosa obra del Señor.
Pautas y normas
Todos los adultos que trabajen con jóvenes deben completar la capacitación Cómo proteger a los niños y jóvenes durante el primer mes después de haber sido sostenidos (ProtectingChildren.ChurchofJesusChrist.org). En la sección 11.6 del Manual General se encuentran pautas y normas en cuanto a mujeres jóvenes con discapacidades, los emblemas de los jóvenes y más.