Mateo 1:18–25; Lucas 1:26–35
Jesucristo: el Hijo de Dios y de María
El ángel Gabriel le dijo a María que el niño que daría a luz sería “Hijo del Altísimo” (Lucas 1:32). Esta lección puede ayudarte a entender cómo las características que Jesús heredó de una madre mortal y un Padre inmortal lo hacen singularmente capaz de ayudarnos a superar todos los desafíos de la vida terrenal.
Superar los desafíos
Observa el siguiente dibujo y piensa en aquello a lo que recurres cuando surgen desafíos o dificultades.
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¿Cuáles dirías que son algunos de los desafíos más comunes que enfrentan las personas de tu edad?
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¿A qué recurren los jóvenes al intentar hacer frente a estos desafíos?
El élder Ronald A. Rasband, del Cuórum de los Doce Apóstoles, compartió el siguiente testimonio sobre Jesucristo:
Jesucristo es siempre la respuesta. Al comprender Su misión y Su evangelio, nuestro amor por Él y nuestra creencia y confianza en Él nos dan fortaleza.
(Ronald A. Rasband, “Jesucristo es la respuesta” [Una velada con una Autoridad General, 8 de febrero de 2019]; broadcasts.ChurchofJesusChrist.org).
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¿Por qué crees que Jesucristo siempre es la respuesta cuando enfrentamos desafíos o preguntas en la vida?
Toma un momento para pensar acerca de tu fe y confianza en Jesucristo. ¿Con qué frecuencia confías en Él para obtener fortaleza y apoyo?Mientras estudias hoy, busca la inspiración del Espíritu Santo para ayudarte a aprender verdades sobre Jesucristo que aumentarán tu fe en Él y te llevarán a acudir a Él con más frecuencia para obtener paz y fortaleza.
El origen de Jesucristo
Jesucristo es singularmente capaz de ayudarnos con cualquier desafío o pregunta que enfrentemos en la vida terrenal, en parte, debido a los rasgos que heredó de Sus padres.
Estudia los siguientes pasajes de las Escrituras para buscar enseñanzas sobre quiénes eran los padres del Salvador:
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¿Qué aprendiste sobre el Padre y la madre de Jesucristo?
Una verdad que podemos aprender de estos versículos es que Jesucristo es el Hijo divino de Dios el Padre y María.
Lee la siguiente declaración del presidente Russell M. Nelson y busca las características que Jesucristo heredó del Padre Celestial y de María.
… De Su Padre inmortal, Jesús heredó el poder de vivir para siempre; de Su madre mortal, heredó el destino de la muerte física […].Esos singulares atributos de Su origen eran esenciales para Su misión de expiar los pecados de toda la humanidad. Por lo tanto, Jesús el Cristo nació para morir […] (véase 3 Nefi 27:13–15). Él murió a fin de que pudiéramos vivir nuevamente; Él nació para que todas las personas pudieran […] vivir más allá del sepulcro.
(Russell M. Nelson, “La paz y el gozo de saber que el Salvador vive”, Liahona, diciembre de 2011, pág. 22).
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¿Qué aprendiste sobre Jesucristo a partir de esta declaración?
De Su madre, María, una mujer mortal, Jesús heredó la mortalidad, que incluía la muerte física. De Dios, nuestro Padre Celestial, Jesús heredó la inmortalidad, la capacidad de vivir para siempre mediante la Resurrección. También fue capaz de experimentar los dolores, las tentaciones y los pesares asociados con la mortalidad, y de aguantar el dolor y el sufrimiento de la Expiación, que ningún ser mortal podría haber soportado (véase Mosíah 3:7).
Lee Mosíah 7:33 y busca ideas sobre cómo podemos obtener la ayuda del Salvador para nuestros desafíos terrenales.
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¿Qué aprendiste de este versículo sobre cómo podemos tener acceso a la ayuda del Salvador?
Gracias a Él
Mira el video “Gracias a Él” (2:44) en busca de algunas de las cosas que el Salvador pudo hacer gracias a que vino a la tierra, experimentó la mortalidad y venció todas las cosas. Este video está disponible en LaIglesiadeJesucristo.org.
1. Completa la siguiente actividad en tu diario de estudio:
Crea tu propio mensaje sobre el Salvador comenzando con las palabras “Gracias a Él”. Puedes completar la frase con una o más declaraciones sobre aquello con lo que el Salvador es singularmente capaz de ayudarte o con lo que te ha ayudado en tu vida. Considera usar materiales artísticos para mejorar tu creación, si tienes suficiente tiempo y materiales.
Opcional: ¿quieres aprender más?
Mateo 1:18.
¿Qué significa que “se halló que [María] había concebido del Espíritu Santo”?
El presidente Ezra Taft Benson (1899–1994) enseñó:
Los testimonios de los testigos señalados no dejan duda alguna en cuanto a la paternidad de Jesucristo. Dios fue el Padre de Su tabernáculo de carne y María, una mujer mortal, fue Su madre […].
… Él no fue hijo de José, ni fue engendrado por el Espíritu Santo. ¡Él es el Hijo del Padre Eterno!
(Ezra Taft Benson, “Five Marks of the Divinity of Jesus Christ”, Ensign, diciembre de 2001, págs. 10, 11).
El presidente Harold B. Lee (1899–1973) hizo una advertencia sobre el intento de explicar todos los detalles que rodean el nacimiento milagroso del Salvador.
Si los maestros fueran sabios al hablar de [la concepción de Jesucristo] sobre la cual el Señor ha dicho muy poco, limitarían su análisis sobre este tema únicamente a las palabras que están registradas al respecto en Lucas 1:34–35 […]. Permitamos que el Señor dé por concluido el asunto con esa declaración y aguardemos hasta que Él considere adecuado decirnos más.
(The Teachings of Harold B. Lee, ed. Clyde J. Williams, 1996, pág. 14).
¿Qué le permitieron hacer a Jesús las características que heredó de sus padres?
El presidente Ezra Taft Benson (1899–1994) enseñó:
Cuando el Gran Dios del universo condescendió a nacer de una mujer mortal, Él se sometió a las debilidades de la mortalidad, a “sufri[r] tentaciones, y dolor en el cuerpo, hambre, sed y fatiga, aún más de lo que el hombre puede sufrir sin morir” ( Mosíah 3:7). Él heredó estas debilidades de Su madre mortal. Pero, debido a que Su Padre era Dios, Jesucristo tenía poderes que ningún ser humano había tenido antes ni ha tenido desde entonces. Él era Dios en la carne, aun el Hijo de Dios. Estos poderes le permitieron efectuar milagros, señales, maravillas, la gran Expiación y la Resurrección —todos los cuales son indicadores adicionales de Su divinidad—.
(Ezra Taft Benson, “Five Marks of the Divinity of Jesus Christ”, Ensign, diciembre de 2001, pág. 10).
Mateo 1:25.
¿Qué significa que José “no la conoció”?
El término conocer o conoció en la Biblia puede referirse a las relaciones sexuales (véase Génesis 4:1). José no tuvo relaciones sexuales con María antes de que naciera Jesús. Este detalle refuerza el hecho de que no pudo haber sido el padre de Jesús y de que Su concepción fue milagrosa.