Jóvenes
Reseña general para las Mujeres Jóvenes


Reseña general para las Mujeres Jóvenes

Propósito del Progreso Personal

El Progreso Personal te ayudará a fortalecer tu fe en Jesucristo y tu testimonio de Él a medida que aprendas Sus enseñanzas y las apliques con regularidad en tu vida. Te ayudará a fortalecer a tu familia actual, así como a tu futura familia. Te ayudará a prepararte para hacer y guardar convenios sagrados, recibir las ordenanzas del templo y ser miembro activo y fiel de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días.

En el programa del Progreso Personal se utilizan los ocho valores de las Mujeres Jóvenes para ayudarte a comprender plenamente quién eres, por qué estás aquí sobre la tierra y lo que debes estar haciendo como hija de Dios para prepararte para el día en que vayas al templo a hacer convenios sagrados. Te ayudará a prepararte para tu futura función como mujer, esposa, madre y líder fiel en el reino de Dios. El participar en el Progreso Personal te enseña a hacer compromisos, a llevarlos a cabo y a informar de tu progreso a uno de tus padres o a una de tus líderes. Los modelos que establezcas al trabajar en el Progreso Personal—tal como la oración, el estudio de las Escrituras, el servicio y el llevar un diario—se convertirán en hábitos diarios personales que fortalecerán tu testimonio y te ayudarán a aprender y a superarte durante toda la vida.

Requisitos

Para completar el programa del Progreso Personal debes:

  • Asistir a la reunión sacramental con regularidad (siempre que sea posible).

  • Vivir las normas de Para la Fortaleza de la Juventud.

  • Completar las experiencias con un valor y el proyecto con un valor para cada uno de los ocho valores.

  • Llevar un diario personal.

  • Asistir a seminario o participar en estudios independientes del Evangelio (donde esté disponible).

  • Leer el Libro de Mormón con regularidad.

  • Escribir tu testimonio del Salvador Jesucristo.

Después de cumplir con estos requisitos, tendrás derecho a recibir el Reconocimiento a la Mujer Virtuosa después de tener una entrevista de dignidad con tu obispo o presidente de rama.

Para comenzar

Puedes comenzar a trabajar en el programa del Progreso Personal a los 12 años o cuando te bautices si tienes entre 12 y 18 años. Las mujeres jóvenes que no son miembros de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días también son bienvenidas a participar.

Al comenzar, recibirás un collar de la antorcha con el emblema de la antorcha de las Mujeres Jóvenes. El usar ese collar significa que te has comprometido a sostener en alto tu luz y defender la verdad y la rectitud.

Pide a tus padres que te ayuden a planificar y a completar el programa del Progreso Personal. El compartir esas experiencias puede fortalecer la relación que tengas con ellos. Tu madre u otra mujer ejemplar puede trabajar contigo en el Progreso Personal y juntas pueden recibir el Reconocimiento a la Mujer Virtuosa. Puedes adaptar las experiencias y los proyectos de acuerdo con tus circunstancias, intereses y necesidades personales, con la aprobación previa de tus padres, de una líder de las Mujeres Jóvenes o de otro adulto.

El Progreso Personal puede formar parte de las cosas buenas que estés haciendo en el hogar, en la Iglesia, en la escuela, en seminario y en la comunidad. Utiliza el índice de temas que se encuentra en la parte final de este libro para encontrar temas específicos que te interesen y aprender cómo pueden ser utilizados como parte del Progreso Personal. Recuerda reconocer el mérito que tienen todas las cosas buenas que hagas cada día. “…por medio de cosas pequeñas y sencillas se realizan grandes cosas” (Alma 37:6).

Pautas

Completarás seis experiencias (tres requeridas y tres optativas) y un proyecto de diez horas para cada uno de los primeros siete valores de las Mujeres Jóvenes. Para el valor virtud completarás cuatro experiencias que se requieren y el proyecto que se requiere de leer el Libro de Mormón. Puedes comenzar con cualquier valor y trabajar en cualquier orden.

Cuando hayas terminado una experiencia o un proyecto con un valor, repásalo con uno de tus padres, una líder u otro adulto. Haz que esa persona escriba sus iniciales junto a la experiencia o el proyecto en tu libro del Progreso Personal. Lleva un registro de tu progreso en la hoja Registro del Progreso Personal (véase la página 77).

Experiencias con un Valor

  • Se recomienda que termines las tres experiencias requeridas de un valor antes de seguir adelante con las experiencias optativas de ese mismo valor.

  • En las experiencias con un valor optativas, puedes escribir un máximo de dos experiencias propias por cada valor o adaptar las experiencias sugeridas para que se ajusten a tus propios intereses, metas o circunstancias personales. Pide a uno de tus padres, a una líder o a otro adulto que las apruebe antes de comenzar.

Proyectos con un Valor

  • Con excepción del valor virtud, completa las experiencias que se requieren con un valor antes de comenzar el proyecto para ese valor. Puedes comenzar a leer el Libro de Mormón en cualquier momento.

  • Pide a uno de tus padres, a una líder o a otro adulto que apruebe cada proyecto con un valor antes de comenzar.

  • Puedes invitar a otras personas para que te ayuden con tus proyectos con un valor, pero debes dedicar un mínimo de diez horas de tu propio tiempo a cada proyecto.

Ritmo del progreso y reconocimiento

  • Puedes trabajar a tu propio paso, pero siempre debes estar trabajando por lo menos en una experiencia o un proyecto. Se recomienda lo siguiente:

    • Completa por lo menos una experiencia al mes y un proyecto cada seis meses (dos proyectos al año).

    • Asiste a la reunión sacramental y participa en seminario con regularidad (siempre que sea posible).

    • Reúnete con un miembro del obispado por lo menos una vez al año para hablar de tu avance en el Progreso Personal, de tus esfuerzos por vivir las normas de Para la Fortaleza de la Juventud y de cualquier otra duda que puedas tener.

  • Cuando completes todas las experiencias y el proyecto de ese valor, tu líder reconocerá tu logro en una reunión de las Mujeres Jóvenes y te entregará un emblema para que lo coloques en la página del Certificado de Logro del Progreso Personal de este libro (véase la página 78) y una cinta para que la coloques en tus Escrituras.

  • Tendrás la oportunidad de compartir tus logros en el Progreso Personal cada año en la Tertulia de la Excelencia de las Mujeres Jóvenes.

  • Tu avance en el Progreso Personal también puede reconocerse cuando recibas tus certificados de Abejitas, Damitas y Laureles al pasar de una clase a otra.

Terminación del Progreso Personal

  • Cuando hayas completado todas las experiencias y proyectos con un valor del Progreso Personal, escribe tu testimonio del Salvador Jesucristo en la página 79. Repasa la sección de este libro “Reconocimiento a la Mujer Virtuosa” con uno de tus padres, una líder u otro adulto (página 76). Después programa una entrevista con tu obispo para que él firme la recomendación de la página 82 y haga los arreglos necesarios para entregarte el certificado y el medallón de Reconocimiento a la Mujer Virtuosa.

  • Se recomienda que trabajes en el Progreso Personal durante el tiempo que estés en las Mujeres Jóvenes, aun después de que hayas obtenido el Reconocimiento a la Mujer Virtuosa. En la sección “¿Qué hago una vez que complete el programa del Progreso Personal?” (página 83), se dan sugerencias de cómo continuar progresando. Repásalas con uno de tus padres, una líder u otro adulto. Puedes elegir ganarte el colgante de la Abejita de Honor, para que lo coloques en tu cadena junto con tu medallón, o puedes comenzar todo el programa de nuevo. También se te insta a que ayudes a otra mujer joven con su Progreso Personal. Al continuar progresando estarás en el sendero que conduce al templo y estarás desarrollando cualidades que te ayudarán durante toda la vida.