Salmo 141
David suplica a Jehová que dé oídos a sus oraciones — La reprensión del justo es un acto de bondad.
Salmo de David.
1 Jehová, a ti he clamado; apresúrate a mí;da oídos a mi voz cuando te invoco.
2 Sea puesta mi oración delante de ti como el incienso,el alzar de mis manos como la ofrenda de la tarde.
3 Pon guarda a mi boca, oh Jehová;guarda la puerta de mis labios.
4 No dejes que se incline mi corazón a cosa mala,a hacer obras malascon los que obran iniquidad;y no coma yo de sus manjares.
5 Que el justo me castigue, será un favor,y que me reprenda, será un excelente bálsamoque no rechazará mi cabeza,porque aún mi oración será contra sus maldades.
6 Cuando sean arrojados sus jueces en lugares peñascosos,oirán mis palabras, que son agradables.
7 Como quien ara y rompe la tierra,son esparcidos nuestros huesos a la boca del Seol.
8 Por tanto, oh Jehová, Señor, a ti miran mis ojos;en ti he confiado; no desampares mi alma.
9 Guárdame de las trampas que me han tendido,y de los señuelos de los que hacen iniquidad.
10 Caigan los malvados a una en sus redes,mientras yo paso adelante.