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¿Cómo puedo aprender a ser más paciente?


¿Cómo puedo aprender a ser más paciente?

La paciencia es la capacidad para perseverar la demora, los problemas, la oposición o el sufrimiento sin estar enojado, frustrado o ansioso. Podemos desarrollar paciencia al procurar hacer la voluntad de Dios y aceptar cuándo decide que ocurran las cosas, confiando en que Él cumplirá todas las promesas que nos ha hecho. Al aprender a ser pacientes en las cosas pequeñas, nos preparamos para afrontar las pruebas más grandes con paciencia.

Prepararse espiritualmente

¿Qué experiencias le han enseñado acerca de la paciencia (incluya las pruebas más difíciles y también las menos difíciles)? ¿Qué le ha ayudado a cultivar paciencia? ¿Cómo ha bendecido su vida la paciencia?

¿Qué influencias afrontan los jóvenes en la sociedad de hoy en día que pueden llevarlos a llegar a ser impacientes? ¿Qué necesitan entender ellos sobre el atributo de la paciencia? ¿Cómo les ayudará en su futuro?

Estudie con espíritu de oración los siguientes pasajes de las Escrituras y recursos. ¿Qué se ha sentido inspirado a compartir con los jóvenes?

Job 1; 19:25–26 (El ejemplo de Job)

Salmos 37:7–9; Lucas 21:19; Hebreos 10:35–36; Mosíah 23:21–22; Alma 26:27; D. y C. 24:8 (Aquellos que son pacientes reciben bendiciones)

Romanos 5:3; Santiago 1:3 (Las tribulaciones fortalecen la paciencia)

Dieter F. Uchtdorf, “Continuemos con paciencia”, Liahona, mayo de 2010, págs. 56–59; véase también el video “Continuemos con paciencia”.

Robert C. Oaks, “El poder de la paciencia”, Liahona, noviembre de 2006, págs. 15–17.

Enseñar a la manera del Salvador

El Salvador hacía preguntas que causaban que las personas se pusieran a pensar y a reflexionar profundamente. Se interesó sinceramente por escuchar sus respuestas y se regocijó en sus expresiones de fe. Les dio oportunidades de hacer sus propias preguntas y escuchó sus experiencias. ¿Qué preguntas puede formular que ayudarán a los jóvenes a sentir profundamente? ¿Cómo puede demostrar que usted está interesado en sus respuestas durante la lección?

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Video: “Prepárese para enseñar”

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Permita que los jóvenes dirijan

Un miembro de la presidencia del cuórum (o un ayudante del obispo en el cuórum de presbíteros) dirige la reunión. Él dirige a los demás jóvenes para que deliberen en consejo en cuanto a los asuntos del cuórum, les enseña sus deberes del sacerdocio (usando las Escrituras y el librito Mi Deber a Dios), los alienta a compartir las experiencias que han tenido al cumplir con su deber a Dios e invita al asesor o a otro miembro del cuórum a enseñar una lección del Evangelio. Puede prepararse llenando una Agenda de la reunión de cuórum durante una reunión de presidencia.

Comience la experiencia de aprendizaje

Elija alguna de las ideas siguientes, o utilice las suyas, para repasar la lección de la semana anterior y presentar la de esta semana:

  • Pida a cada joven que escriba una frase en la pizarra que resuma lo que aprendió en la lección de la semana pasada.

  • Escriba el título de esta lección en la pizarra y lea el párrafo al comienzo de esta reseña. Invite a los jóvenes a compartir posibles situaciones en sus vidas en las que van a necesitar paciencia (como la educación, el matrimonio o el empleo). Muestre varios objetos que representen momentos de su vida en los que tuvo que demostrar paciencia (por ejemplo: un certificado de graduación de la universidad, un anillo de bodas o una placa misional). Pídales que adivinen qué tienen que ver esos objetos con la paciencia y luego comparta las experiencias que tuvo.

Aprender juntos

Cada una de las actividades siguientes ayudará a los miembros del cuórum a comprender la importancia de la paciencia. Siguiendo la inspiración del Espíritu, seleccione una o más que resulten mejor para el cuórum:

  • Escriba en la pizarra los siguientes títulos: “Paciencia” e “Impaciencia”. Entregue a cada joven uno de los pasajes de las Escrituras de esta reseña acerca de la paciencia. Invite a los jóvenes a leer por turno, en voz alta, los pasajes de las Escrituras, a analizar lo que enseñan y a escribir en la pizarra las bendiciones sobre la paciencia o las consecuencias de la impaciencia. ¿Qué bendiciones y consecuencias adicionales pueden agregar a sus listas? Invite a cada joven a escribir en un papel una situación para la que se requeriría paciencia (aliéntelo a incluir no sólo los grandes problemas sino también enojos o inconvenientes de todos los días). Pídales que intercambien papeles con otro joven, que escriban una respuesta que muestre paciencia y luego compartan con el cuórum lo que han escrito.

  • Comparta la historia de la paciencia de un padre del discurso del élder Robert C. Oaks “El poder de la paciencia” e invite a los jóvenes a compartir historias que tengan acerca de la paciencia. Entregue a cada joven una pequeña sección de ese discurso que usted considere que podría serles útil. Invítelos a leer y a resumir esa porción para compartir con el cuórum. ¿Qué aprenden de este discurso que les inspire a confiar en el Señor y en Su determinación del momento oportuno? ¿Cuáles son algunas de las razones que nos hacen sentir impacientes? ¿Cómo podemos superar esa tendencia?

  • Muestre a los jóvenes varios carteles de mensajes mormones de ejemplares recientes de la revista Liahona. Divida al cuórum en grupos pequeños e invítelos a crear su propio mensaje mormón en cuanto al tema de la paciencia. Podrían empezar por encontrar un pasaje de las Escrituras sobre la paciencia (como los que se encuentran en esta reseña) y pensar en una manera creativa de presentarlo en un póster. Pídales que compartan sus carteles con el cuórum y expliquen lo que la paciencia significa para ellos. (Como parte de esta conversación, tal vez desee compartir con el cuórum la definición de la paciencia que se encuentra al comienzo de esta reseña.)

  • Muestre el video “Continuemos con paciencia” e invite a los jóvenes a analizar lo que aprendieron del experimento del malvavisco (merengue, nube, bombón). ¿Cuáles son algunas situaciones en las que se impacientan los jóvenes? Invite a cada joven a leer una sección del discurso del presidente Dieter F. Uchtdorf “Continuar con paciencia” y pídales que resuman para el resto del cuórum lo que hayan aprendido de la sección que leyeron. ¿De qué modo el consejo del presidente Uchtdorf puede ayudar a los jóvenes a ser más pacientes?

  • Invite a un miembro del cuórum a volver a contar el relato de Job (véase Job 1). ¿Por qué piensan los jóvenes que Job fue capaz de enfrentar tan pacientemente sus pruebas? ¿De qué modo le ayudó su fe en el Salvador (Job 19:25–26)? Invite al cuórum a sugerir cosas específicas que pueden hacer para vencer los sentimientos de impaciencia tanto durante grandes adversidades, como las que enfrentó Job, como en las pruebas más pequeñas de todos los días.

  • Como cuórum lean los párrafos del 9 al 17 del discurso del élder Robert D. Hales “Esperamos en el Señor: Hágase tu voluntad” buscando respuestas a la pregunta: “¿Qué quiere decir esperar en el Señor?”. Para obtener ideas adicionales, invite a los jóvenes a buscar los pasajes de las Escrituras que cita el élder Hales y comparta cualquiera de esos pasajes que enseñe acerca de la paciencia. ¿Cómo podrían utilizar los jóvenes las palabras del élder Hales o esos pasajes de las Escrituras para ayudar a alguien que pueda haber perdido la esperanza?

Pida a los jóvenes que compartan lo que hayan aprendido. ¿Comprenden la importancia de la paciencia? ¿Qué sentimientos o impresiones tienen? ¿Desean hacer otras preguntas? ¿Resultaría útil dedicarle más tiempo a esta doctrina?

Sugerencia para la enseñanza

“Puede demostrarles que los está escuchando al mostrarles una expresión de interés. Puede mirar al que está hablando en vez de contemplar los materiales de la lección u otros objetos en el salón de clases. Puede alentar a quien habla de modo que pueda completar su pensamiento sin interrupción. Puede evitar el intervenir en conversaciones prematuras dando consejos o ideas” (La enseñanza: El llamamiento más importante, 2000, pág. 71).

Invítelos a actuar

El joven que dirige concluye la reunión. Él podría:

  • Compartir sus sentimientos acerca de la paciencia e invitar a los miembros del cuórum a demostrar más paciencia con sus familias durante la semana que viene.

  • Invitar a otros miembros del cuórum a mostrar un pasaje de las Escrituras o una cita sobre la paciencia (o el mensaje mormón que crearon) en un lugar donde les recuerde que deben ser pacientes.

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