¿Qué convenios hice en el bautismo?
Cuando nos bautizamos, hicimos un convenio con Dios. Prometimos tomar sobre nosotros el nombre de Jesucristo, recordarle siempre, guardar Sus mandamientos y servirle hasta el fin. Renovamos ese convenio cada vez que tomamos la Santa Cena.
Prepararse espiritualmente
¿Qué pasajes de las Escrituras y otros recursos ayudarán a las jóvenes a recordar y guardar sus convenios bautismales?
Juan 3:5; 2 Nefi 31:4–13, 17 (El bautismo es necesario para la salvación eterna)
Mosíah 18:8–10; D. y C. 20:37 (Los compromisos que hacemos cuando nos bautizamos)
Hugo Montoya, “Seremos probados y tentados, pero recibiremos ayuda”, Liahona, noviembre de 2015, págs. 53–55.
Robert D. Hales, “El convenio del bautismo: Estar en el reino y ser del reino”, Liahona, enero de 2001, págs. 6–9.
Carole M. Stephens, “Tenemos gran motivo para regocijarnos”, Liahona, noviembre de 2013.
“Tu convenio bautismal”, “Las prometidas bendiciones del bautismo”, Leales a la Fe, págs. 28–30.
Videos: “La misma camiseta”, “Oportunidades para hacer el bien”
Compartir experiencias
Al comienzo de cada clase, invite a las jóvenes a compartir, enseñar y testificar acerca de las experiencias que hayan tenido al aplicar lo que aprendieron en la lección de la semana anterior. Esto alentará su conversión personal y les ayudará a darse cuenta de la importancia que tiene el Evangelio en la vida cotidiana.
Presentar la doctrina
Elija alguna de las ideas siguientes, o utilice las suyas, para presentar la lección de esta semana:
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Pida a las jóvenes que imaginen que están ayudando a su hermano o hermana menor a prepararse para bautizarse. ¿Cómo le ayudarían a entender las promesas que hacemos cuando nos bautizamos? (véase Leales a la Fe,págs. 28–31).
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Muestre una imagen de un bautismo (como las del Libro de obras de arte del Evangelio, 103–104). Comparta recuerdos del día en que se bautizó, incluso los recuerdos de cómo se sintió. Invite a las jovencitas a compartir lo que sintieron al bautizarse. Pregúnteles qué convenios hicieron ese día. Invítelas a anotar sus respuestas en la pizarra e ir completando la lista a medida que transcurre la lección y aprenden más acerca de sus convenios bautismales.
Aprender juntas
Cada una de las actividades siguientes ayudará a las jóvenes a comprender los convenios que hicieron durante el bautismo. Siguiendo la inspiración del Espíritu, seleccione una o más actividades que resulten mejor para su clase:
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Pida a las mujeres jóvenes que lean Mosíah 18:8–10. ¿Qué aprenden en cuanto a la forma en que prometemos tratar a los demás cuando nos bautizamos? Para ayudar a las mujeres jóvenes a aprender la forma en que levantamos las cargas de uno al otro, divida la clase en grupos y asigne a cada grupo que estudie una sección del discurso del élder Hugo Montoya “Seremos probados y tentados, pero recibiremos ayuda”. Pida a cada grupo que comparta con la clase lo que aprendió. Cada grupo podría hacer un póster de lo que hayan aprendido, compartir experiencias personales si corresponde o contar relatos de las Escrituras que ayuden a enseñar ese mismo principio.
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Divida la clase en tres grupos y asigne a cada uno de ellos que lea una de las tres secciones de “Tu convenio bautismal” en Leales a la Fe. Invite a cada grupo a planificar una forma creativa de enseñar lo que aprendieron (por ejemplo, mediante una obra de arte, una poesía o un juego). Concédales tiempo para que se enseñen las unas a las otras. ¿Por qué piensan las jóvenes que es importante que guarden esos convenios?
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Invite a algunas de las jovencitas a leer Mosíah 18 y a las demás a leer D. y C. 20:79. Pídales que busquen los compromisos que hacemos cuando nos bautizamos. Entregue a cada jovencita un papel y pídale que anote una decisión difícil que los jóvenes estén afrontando; después, invítelas a que coloquen el papel en un recipiente. Invite a las jóvenes a que saquen un papel del recipiente de cada vez, que lean lo que está escrito allí y que compartan algunas ideas de cómo podrían recordar y guardar sus convenios bautismales al afrontar esos desafíos.
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Muestre una imagen del bautismo del Salvador (véase Libro de obras de arte del Evangelio, 35) y pida a cada miembro de la clase que lea 2 Nefi 31:4–10. Invite a las jóvenes a que compartan ejemplos de las Escrituras que muestran cómo Jesucristo guardó Su convenio con el Padre (para tener más ideas, podrían ver las ilustraciones del Libro de obras de arte del Evangelio, 36–48). Pídales que compartan experiencias en las que hayan intentado seguir el ejemplo del Salvador.
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Invite a las jóvenes a leer tres párrafos del discurso del élder Robert D. Hales “El convenio del bautismo: Estar en el reino y ser del reino”, comenzando con “Al bautizarnos, hacemos un convenio con nuestro Padre Celestial”. Pídales que busquen los convenios que hacemos cuando nos bautizamos e invítelas a escribir lo que encuentren en la pizarra. ¿Cómo debería cambiar nuestra vida el bautizarnos? ¿Cómo ha cambiado la vida de las jovencitas?
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Invite a las jóvenes a leer “Tu convenio bautismal” en Leales a la Fe y determinar las promesas que hicimos cuando nos bautizamos. Invite a las jóvenes a ver uno de los videos que se sugieren en esta reseña o a leer el relato que hay al comienzo del discurso de Carole M. Stephens “Tenemos gran motivo para regocijarnos”. Pídales que busquen ejemplos de personas que honran sus convenios bautismales. Ofrezca a las jóvenes tiempo para compartir lo que aprendan. ¿Qué sienten que pueden hacer para guardar sus convenios bautismales más plenamente en todo momento y en todo lugar?
Pida a las jóvenes que compartan lo que aprendieron hoy. ¿Entienden mejor sus convenios bautismales? ¿Qué sentimientos o impresiones tienen? ¿Desean hacer otras preguntas? ¿Resultaría útil dedicarle más tiempo a esta doctrina?
Vivir lo que se aprende
Pida a las jóvenes que piensen cómo pondrán en práctica lo que han aprendido hoy. Por ejemplo, podrían:
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Con espíritu de oración, examinar sus vidas a fin de determinar si hay algo que tienen que dejar de hacer o empezar a hacer a fin de ser más fieles a sus convenios bautismales. Podrían comprometerse a actuar en consecuencia.
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Trabajar individualmente o como clase en la experiencia 4 del valor Fe o en la experiencia 4 del valor Conocimiento, del Progreso Personal.