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Vivir el Evangelio

Cleiton no solo regresó a la Iglesia

02/25/22 | 1 min de lectura
¡Llevó consigo a muchas otras personas!

¿Estás listo para una historia real increíble?

El élder Gary E. Stevenson la compartió en su último discurso de la conferencia general. Habló de un joven de diecisiete años llamado Cleiton que vivía en Cabo Verde, África. La familia de Cleiton había dejado de ir a la Iglesia, pero un día él fue a Seminario de todos modos. Su maestro y sus compañeros de clase le dieron la bienvenida y lo ayudaron a sentirse amado e incluido.

También invitaron a Cleiton a otras actividades del barrio. ¡Muy pronto estaba asistiendo a la Iglesia de nuevo todos los domingos! Tenía un nuevo amor por el evangelio de Cristo, y quería compartirlo.

De modo que Cleiton invitó a su mamá y a su hermano mayor a regresar a la Iglesia, y así lo hicieron. Entonces Cleiton invitó a otros amigos a venir y luego se acercó a los que hacía tiempo que no habían ido a la Iglesia, alentándolos a regresar.

¡Muy pronto, el barrio de Cleiton tenía treinta y cinco jóvenes activos! Eso fue, en gran medida, porque decidió compartir su testimonio nuevamente reavivado con los demás.

Es un hecho: el Padre Celestial te ha dado a ti el poder para marcar la diferencia. Él cuenta contigo para hacer cosas asombrosas porque Él sabe que puedes hacerlas. Y recuerda: las cosas asombrosas no tienen que ser grandes. Las invitaciones pequeñas y sencillas cambiaron la vida de Cleiton, y algo así puede cambiar tanto tu vida como la vida de otras personas a tu alrededor.

¡Así que confía en el Señor y sigue adelante! Puedes hacerlo.

Iré y haré

Con espíritu de oración, piensa en una persona que podría estar lista para aprender más acerca del evangelio de Jesucristo. ¿Qué podrías invitarlos a hacer contigo?

Nota: De “Simplemente hermoso; hermosamente simple”, de la Conferencia General de octubre de 2021.

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