El Sacerdocio de Melquisedec posee “las llaves de todas las bendiciones espirituales de la iglesia” (Doctrina y Convenios 107:18).
El sacerdocio es el poder y la autoridad de Dios. Se confiere a los miembros varones de la Iglesia que son dignos. Quienes poseen llaves del sacerdocio dirigen la administración de las ordenanzas del Evangelio, la predicación del Evangelio y el gobierno del Reino de Dios en la tierra.
Un cuórum del sacerdocio es un grupo organizado de hermanos. Los objetivos principales de los cuórums son servir a los demás, desarrollar la unidad y la hermandad, e instruir a los miembros en doctrinas, principios y deberes (véase Manual 2: Administración de la Iglesia, 7.1).
El Señor exhortó: “Por tanto, aprenda todo varón su deber, así como a obrar con toda diligencia en el oficio al cual fuere nombrado” (Doctrina y Convenios 107:99). El estudio de las Escrituras y las enseñanzas de los profetas de los últimos días serán de utilidad para que los líderes comprendan y cumplan sus deberes.