Muchos versículos de Deuteronomio nos animan a recordar al Señor. Y (consejo profesional) la repetición en las Escrituras a menudo significa que se trata de algo importante.
¡Estas son algunas maneras divertidas en que puedes recordar al Señor cada día!
- Escribe en un diario de gratitud. El presidente Eyring contó una vez que él escribió sobre cómo había visto la mano del Señor en su vida cada día1. ¡Tú podrías hacer lo mismo! Si hacerlo todos los días te parece abrumador, trata de hacerlo como parte de tu rutina del día de reposo.
- Elabora una roca de oración. Decora una pequeña “roca de oración” para tu habitación. Por la noche, ponla en el suelo junto a la cama para recordarte de orar al despertar. Luego colócala en la almohada para recordarte de orar antes de acostarte.
- Utiliza decoración centrada en Cristo. Coloca citas edificantes, láminas o pasajes de las Escrituras en algún lugar donde los puedas ver todos los días.
- Agrega un recordatorio en tu teléfono, si tienes uno. Podrías configurar recordatorios para leer las Escrituras, orar, escuchar un discurso de la conferencia, ¡cualquier cosa que desees!
- Comparte con los demás. La próxima vez que encuentres una cita excelente o tengas una idea interesante, ¡compártelo con un amigo! Pueden ayudarse mutuamente a recordar al Señor.
¿Qué otras ideas se te ocurren?
Búsqueda de pasajes de las Escrituras
¿Cuántos pasajes de las Escrituras puedes encontrar en cuanto a recordar al Señor? ¡Podrías empezar con Deuteronomio 4!
Notas
1. De “Oh recordad, recordad”, Conferencia General de octubre de 2007.