Hay muchos factores que pueden influir en nuestras emociones. Nuestras decisiones, las decisiones de los demás y la vida terrenal en general pueden afectarnos.
¿Por qué importa eso? Comprender qué influye en nuestros sentimientos puede ayudarnos a entender mejor cómo afrontarlos. También puede ayudarnos a ser más compasivos con aquellos que luchan con sentimientos negativos intensos.
Echemos un vistazo a los factores biológicos, psicológicos y espirituales que forman parte de nuestro mundo emocional.
Biológicos: Factores físicos de nuestro cuerpo
- La genética
- La enfermedad o lesión
- La dieta y la nutrición
- El nivel de actividad física
- Las drogas o medicamentos
- Las variaciones climáticas estacionales
- Los cambios químicos u hormonales
Psicológicos: Acontecimientos de la vida
- Las transiciones en la vida
- Los cambios en rutinas o tradiciones
- La muerte o pérdida
Psicológicos: Interacciones sociales con los demás
- El abuso o maltrato
- Los conflictos
- La soledad y el aislamiento
- Las presiones sociales
- La traición o confianza destruida
Espirituales: Relacionados con la fe
- Las consecuencias de nuestros propios pecados
- Las repercusiones de los pecados de los demás
- La tristeza por vivir en un mundo atribulado
Notarán que algunas de estas son cosas sobre las que tienes más control, mientras que otras están totalmente fuera de tu control. Pero de cualquier manera, ya sea que puedas controlar los acontecimientos iniciales o no, puedes aprender a acercarte más a Dios. Él puede ayudarte a fomentar y encontrar la paz interior, sin importar cuán alocada se vuelva la vida.
Hablaremos más sobre cómo afrontar las emociones difíciles en futuras publicaciones, ¡así que presta atención!
Nota: Esta es parte de una serie continua sobre resiliencia emocional, adaptada de este manual.