Obispado
Segmento 1: Padres


Segmento 1: Padres

Apoyo a Niños y Jóvenes: Una transmisión para padres y líderes

Introducción

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Mujer: Este programa ha llegado en el momento apropiado junto con el programa Ven, sígueme de la Iglesia. El Señor sabe bien cuál es el programa perfecto para la familia y cómo ayudar a nuestros hijos a ahondar en el Evangelio.

Hombre: Así que este programa es una iniciativa de la Iglesia en la que a nuestros hijos se les debe enseñar primero aquí, en nuestro hogar, y luego sigue lo que aprenden en la Iglesia. De modo que en verdad es un programa centrado en el hogar y apoyado por la Iglesia.

Mujer: Me he estado preguntando cómo ayudar a mis hijos a edificar sus testimonios, y he sentido que esto es una respuesta.

Hombre: Una de las cosas que nos gusta hacer como familia es poder sentarnos y hablar acerca de las cosas que deberíamos mejorar y cambiar.

Mujer: Cada uno tiene sus atributos, cada uno tiene su propia manera de dar. Lo que me gusta es que puedes unificar el hogar con la Iglesia y con Seminario.

Mujer: Los jóvenes y los niños necesitan mucho apoyo de los padres. Debemos enseñar la importancia de ello y alentarlo.

Hombre: Cuando los jóvenes comiencen a ver la confianza que los líderes tienen en ellos, estarán dispuestos a hacer más y podrán ver que el Padre Celestial los ama y cuida de ellos.

Mujer: ¿Están aprendiendo a preguntar? ¿Saben cómo les habla el Espíritu? Esperamos que progrese constantemente al edificar una experiencia sobre la otra. Se trata del modelo de los cielos. Este es el modelo celestial de aprendizaje y su propósito es ayudarles a descubrir cómo funciona.

Mujer: Es decir, queremos que sus hijos desarrollen sus talentos e intenten nuevas cosas para saber cuáles son dichos talentos. También queremos que sean capaces de escuchar la guía del Espíritu Santo.

Hombre: Así es como aprendemos sobre nosotros mismos y cómo podemos aprender acerca de nuestra identidad divina o quiénes somos realmente, es escuchando y actuando de acuerdo con lo que el Espíritu Santo comunica a nuestra mente.

Presidente Russell M. Nelson: Ahora algunas palabras para los padres: la función de ustedes es esencial. Por favor, cultiven lazos fuertes con sus niños y sus jóvenes. Los líderes de la Iglesia pueden ayudar, pero ellos son sus hijos. Nadie puede tener mayor influencia en el éxito de ellos que ustedes. Denles amor, aliento, consejo.

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Presidenta Jean B. Bingham: Padres, como vieron en este video, ustedes son cruciales para ayudar a sus hijos y jóvenes a edificar la fe en Jesucristo y llegar a ser más como Él. Como madre y abuela, estoy agradecida de que el Señor haya inspirado programas centrados en el hogar, tal como Niños y Jóvenes, justo cuando los necesitábamos.

Presidente Mark L. Pace: Estoy de acuerdo, presidenta Bingham. A medida que las cosas comiencen a volver a la normalidad en algunas partes del mundo, esperamos que sus esfuerzos centrados en el hogar continúen. Las experiencias de sus hijos con el Evangelio en su hogar los prepararán para el futuro mejor que cualquier otra cosa.

Presidenta Bingham: Hoy queremos compartir algunas ideas y recursos que pueden ayudarles a apoyar a sus hijos al seguir a Jesucristo. Por supuesto, son tan solo sugerencias. Ustedes conocen mejor a sus hijos y juntos, ustedes y ellos, pueden recibir revelación sobre lo que ellos necesiten más.

La obra de ayudar a sus hijos a seguir al Salvador forma parte de cada aspecto de la vida. El programa Niños y Jóvenes nos ayuda a centrarnos en algunas áreas clave donde podemos brindar apoyo: el aprendizaje del Evangelio, el servicio y las actividades, y el desarrollo personal. Dedicaremos un poco de tiempo a hablar de cada una de ellas.

Aprendizaje del Evangelio

Presidente Pace: Comencemos con el aprendizaje del Evangelio. Creo que este último año y medio nos ha mostrado cuán poderoso puede ser el aprendizaje del Evangelio centrado en el hogar y qué difícil puede resultar a veces. Aquí les damos algunas ideas para lograrlo.

Presidenta Bingham: Sigan reuniendo a su familia para estudiar el Evangelio con regularidad. Las Escrituras deben ser el recurso principal. Ven, sígueme puede ayudarles a sacar el máximo provecho de su estudio de las Escrituras, y otros recursos como las revistas de la Iglesia, la aplicación Vivir el Evangelio y la aplicación El Evangelio para niños (disponible en inglés, español y portugués) también pueden ayudar. Muchos de ustedes ya estudian el Evangelio como familia, ¡sigan haciéndolo! Aunque parezca que nadie escucha o nuestros hijos se quejen o discutan, y el ambiente sea más de una zona de guerra que un lugar de paz y aprendizaje, ¡sigan adelante! Sus hijos están escuchando y observando, y la paz y las bendiciones llegarán. Lo más importante es que sigan intentándolo.

Leer las Escrituras a diario con mis propios hijos no siempre era fácil, y a veces nos preguntábamos si valía la pena. Pero, años después, fue evidente que marcaba la diferencia. A una de nuestras hijas se le pidió que hablara en la conferencia de estaca, justo antes de partir a su misión. Nos sorprendió bastante, pero nos sentimos agradecidos de oírla decir: “Aprendí el Evangelio en nuestro estudio diario de las Escrituras en familia. Puede que a veces haya actuado con poco entusiasmo, pero esos breves momentos de lectura y análisis me enseñaron principios del Evangelio que me dieron el fundamento para tomar decisiones rectas, las cuales me han llevado a donde estoy hoy en día”.

Presidente Pace: Además, el aprendizaje del Evangelio no siempre tiene que ser una lección formal y con personas sentadas escuchando. La vida cotidiana brinda muchas oportunidades para tener momentos de enseñanza informales. Ya sea en momentos de desilusión o frente a un acto de bondad, ayuden a sus hijos a aplicar la expiación y el evangelio del Salvador a sus experiencias en el hogar, la escuela y el trabajo, o en otras actividades.

Asimismo, hallarán respuestas a las preguntas de la vida y gran poder al estudiar personalmente la palabra de Dios, sobre todo al leer el Libro de Mormón. Ayúdenles a hacer de esto una prioridad en su vida.

Presidenta Bingham: Por último, apoyen a sus hijos para que puedan asistir a las clases de la Iglesia, incluso a Seminario, y a cumplir con los llamamientos de la Iglesia, ya que algunos tendrán la oportunidad de prestar servicio en una presidencia de clase o de cuórum. Si lo hacen, ayúdenles a estar al tanto de los muchos recursos disponibles para ellos en el sitio web Niños y Jóvenes y en la aplicación Biblioteca del Evangelio.

Servicio y actividades

Presidenta Bingham: Lo siguiente es el servicio y las actividades. A veces, pensamos en el servicio y las actividades como algo que solo se hace en la Iglesia, pero las actividades de mayor impacto a menudo están basadas en la familia. No esperen a que su barrio planifique algo; ustedes saben lo que bendecirá a sus hijos y los acercará más al Salvador.

Presidente Pace: Además, las actividades familiares no tienen que ser de gran escala ni muy complicadas; lo importante es que forjen relaciones fuertes entre ellos y con el Salvador. Consideren la posibilidad de hacer participar a sus hijos en el proceso de planificación. Si necesitan ideas, pueden encontrar varias en el sitio web Niños y Jóvenes y, en algunas Áreas, en SirveAhora.org o en la aplicación SirveAhora.

Presidenta Bingham: Esto es un ejemplo de ello. Oímos de un joven al que le faltaba poco para su cumpleaños. En lugar de tener una fiesta de cumpleaños tradicional, quiso invitar a sus amigos a realizar un proyecto de servicio. Sus padres le ayudaron a encontrar el proyecto adecuado en SirveAhora. El día de la fiesta, este joven, sus amigos y su familia lo pasaron muy bien preparando estuches de higiene y ¡comiendo pizza!

El desarrollo personal

Presidente Pace: El aspecto final del programa Niños y Jóvenes es el desarrollo personal. Según Lucas 2:52, los jóvenes y los niños se fijan metas para crecer, tal como lo hizo el Salvador, espiritual, física, social e intelectualmente. Sin embargo, también es importante recordar que el desarrollo personal es mucho más que el simple hecho de que los jóvenes y los niños se pongan metas para cumplir un requisito. Es el proceso por el que ellos buscan revelación y se esfuerzan por llegar a ser más como el Salvador, en todas las facetas de su vida.

Presidenta Bingham: La revelación es la clave de este proceso de crecimiento. El presidente Nelson dijo: “… les prometo que si con sinceridad y constancia realizan la obra espiritual necesaria para desarrollar la habilidad crucial y espiritual de aprender a oír los susurros del Espíritu Santo, tendrán toda la orientación que necesitarán en su vida”1.

Presidente Pace: Los aliento a ustedes, padres, a ayudar a sus hijos a reconocer las maneras únicas en que el Espíritu Santo les habla. La mayoría de las veces, la revelación se recibe por medio de pensamientos inspiradores en la mente y sentimientos de paz en el corazón. Las impresiones que recibimos pueden ser pequeñas, pero es más probable que lleguen cuando nos esforzamos a diario por buscar al Señor mediante la oración y el estudio de las Escrituras.

Presidenta Bingham: Me he dado cuenta de que las impresiones fuertes no siempre llegan antes de tomar una decisión, sino que a menudo llegan después. A veces, el Señor espera que, primero, actuemos con fe y luego Él confirma nuestra decisión. Animen a sus hijos a actuar y a seguir adelante. La habilidad crucial de escuchar al Espíritu les ayudará a tener confianza en que están llegando a ser lo que el Señor desea que lleguen a ser.

Presidente Pace: Esa confianza solo puede obtenerse si esas son las metas de sus hijos y no las metas de ustedes. Sus hijos necesitarán una mano de guía y apoyo, pero permítanles ejercer su albedrío para mejorar, aprender y crecer de maneras que ellos sientan que son las mejores. Cuando es algo que ellos eligen, estarán más motivados para hacerlo. ¡Luego apóyenlos y anímenlos!

Presidenta Bingham: Veamos un breve video que muestra la forma en que las familias trabajan juntas en el desarrollo personal.

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Hombre: Estamos muy ocupados. Resultaba difícil llegar al punto de decir: “¿Qué se supone que debemos hacer? ¿Cómo lo haremos? ¿Qué debemos hacer?”. Una vez que lo descubrimos y nos dimos cuenta de que era más sencillo de lo que pensábamos, todo mejoró.

Mujer: Siempre que vamos a hacer algo, lo primero es orar y hablar con Dios para ver qué es lo que Él quiere que nosotros que cambiemos verdaderamente como familia.

Mujer: Al preguntar en oración en mi corazón qué podía hacer, recibí esa impresión y vi el tablero de visión en mi cabeza: esto sí funcionará. Tengan una oración en el corazón, busquen y lleven el asunto ante el Señor. Vean qué revelación reciben ustedes y su familia; hay maneras en las que todos podemos hacer este programa. Será algo diferente para cada uno, y está bien, porque todos estamos intentando regresar con Cristo.

Hombre: Nosotros, los padres, tenemos que apoyarlos totalmente. Tal vez este es el mejor momento para que trabaje con ella, para que sea consciente de que lo está haciendo y que no está sola, sino que cuenta con el apoyo total de sus padres.

Mujer: Para mí es importante escuchar y comunicar con frecuencia. El tratar de recordar lo que es importante para ellas y en qué quieren mejorar me ayuda a centrarme en las preguntas que les hago con frecuencia. Y aprendo a escucharlas, a conocerlas y a saber cómo aprenden y crecen, y qué necesitan y las motiva.

Hombre: Esta nueva iniciativa enseña a nuestros hijos a actuar por sí mismos y a avanzar proactivamente hacia lo que es importante para ellos y para el Padre Celestial. Tratamos de que nuestros hijos lleguen a ser más autónomos, más conectados con Él, para que tomen las decisiones correctas en su vida.

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Presidente Pace: Este video tenía algunas ideas excelentes. Presidenta Bingham, ¿qué otras ideas podemos dar a los padres?

Presidenta Bingham: Bueno, podría ser útil que se reunieran con cada uno de sus hijos y analizaran de qué manera quieren crecer y en qué metas desean trabajar. Para algunos, su meta podría ser continuar o mejorar en algo que ya están haciendo. ¡Estupendo! Muchos niños y jóvenes ya trabajan en cosas maravillosas. Solo ayúdenles a reconocer al Señor y hacerlo partícipe de ese proceso de crecimiento.

Presidente Pace: Ahora bien, es posible que sus hijos necesiten un poco de guía para lograr metas específicas y alcanzables. Tal vez tengan que ayudarles a elaborar un plan; es mucho más probable que sus hijos alcancen el éxito si escriben sus metas. Las guías o la aplicación Vivir el Evangelio pueden ayudarles.

Presidenta Bingham: Uno de los padres en el video decía que, en su familia, se hacen seguimiento el uno al otro. Es una manera excelente de apoyar a los hijos en sus metas. Esto les brindará cierta responsabilidad y les ayudará a saber que ustedes están ahí para ayudar.

Algunas familias también se fijan metas en las que pueden trabajar juntos. ¡Qué manera tan divertida de trabajar y crecer juntos como familia!

Conclusión

Presidente Pace: Para concluir, solo queremos expresarles un caluroso agradecimiento a todos ustedes, maravillosos padres; están haciendo una gran labor. Confiamos en que estas ideas serán útiles para ustedes y sus hijos al seguir al Salvador juntos.

Presidenta Bingham: ¡Gracias de nuevo y que el Señor continúe bendiciéndolos!

En el siguiente segmento, la presidenta Camille N. Johnson, Presidenta General de la Primaria, dirigirá un análisis similar para las líderes de la Primaria.

Nota

  1. Russell M. Nelson y Wendy Nelson, “Juventud de Israel” (devocional mundial para los jóvenes, 3 de junio de 2018), suplemento de la revista Liahona, pág. 3, LaIglesiadeJesucristo.org.

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