Tu sendero al templo
Para los niños
¿Sabes cuál es el templo más cercano de donde vives? Haz un dibujo de ese templo y cuélgalo donde puedas verlo todos los días.
El templo es la Casa del Señor; es un lugar donde se nos enseña sobre nuestro Padre Celestial, donde hacemos convenios (o promesas) con Él, y recibimos grandes bendiciones. En el templo llevamos a cabo una obra importante para nosotros mismos y por los familiares que han muerto. Entre la obra que se efectúa en el templo se encuentran los bautismos por los muertos, las investiduras y los sellamientos, que se conocen como ordenanzas del templo.
Lo que se hace adentro del templo
Bautismos por los muertos
Cuando cumplas ocho años de edad puedes bautizarte y ser confirmado miembro de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días. Muchos de tus antepasados han muerto sin haber sido bautizados y confirmados. A pesar de que estén muertos, su espíritu aún sigue viviendo en el mundo de los espíritus, donde se les enseña el evangelio de Jesucristo.
Cuando cumples doce años puedes ir al templo y ayudar a esas personas al ser bautizado y confirmado a favor de ellas. Entonces ellas pueden decidir si desean aceptar o no el bautismo y la confirmación. Cuando te bautices por los muertos te vestirás totalmente de blanco, así como lo haces en tu propio bautismo.
Pide a tus padres que te ayuden a hacer una lista de los familiares que hayan muerto sin haber sido bautizados en La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días. Infórmate si alguien ha ido al templo a bautizarse por ellos.
La investidura
Una de las bendiciones más grandiosas del templo es la investidura. Investidura significa “don”. Cuando recibas tu investidura, llegarás a saber más acerca del plan de salvación y harás convenios. Los convenios son promesas que hacemos con nuestro Padre Celestial. Al guardar esos convenios, te preparas para vivir algún día con nuestro Padre Celestial y con Jesucristo.
Adentro del templo hay un cuarto hermoso y tranquilo que se conoce como el salón celestial. En ese lugar nos sentimos cerca del Padre Celestial y de Jesucristo, y se nos da una pequeña idea de lo que será vivir con Ellos en el reino celestial.
Sellamientos por el tiempo y la eternidad
Cuando un hombre y una mujer se casan en el templo, se arrodillan ante un altar y son sellados por tiempo y por toda la eternidad. Eso significa que ellos y sus hijos pueden estar unidos como una familia eterna. Planea casarte algún día en el templo, ya que es la bendición más grande del templo.
La recomendación para el templo
El templo es un lugar santo. Los obispos y los presidentes de rama se aseguran de que las personas que entren en el templo estén preparadas y sean dignas. Antes de que vayas al templo, tendrás una entrevista especial con tu obispo o presidente de rama. Él te preguntará si tienes un testimonio de la Iglesia, si guardas los mandamientos, si apoyas a los líderes de la Iglesia, si obedeces la Palabra de Sabiduría, si pagas diezmos y si eres honrado en todo lo que haces y dices. Él te ayudará a saber lo que debes hacer para ser digno de entrar en el templo.
Prepárate ahora para entrar en el templo
Nuestro Padre Celestial da muchas bendiciones a aquellos que viven rectamente y asisten al templo. Es importante que te prepares para entrar en el templo mientras seas pequeño.
Nuestro Padre Celestial te ama y desea que recibas las bendiciones del templo. Él te bendecirá por llevar a cabo tus ordenanzas personales del templo y las de otras personas. Aunque tal vez no puedas entrar en el templo por ahora, si hay un templo cerca de donde vives, puedes visitar sus jardines y sentir el espíritu que allí se encuentra. También puedes tener una lámina del templo en tu hogar para que te recuerde su importancia. Vive con rectitud para que seas digno de entrar en la Casa del Señor.