Preguntas y respuestas
“Algunos de mis amigos piensan que asistir a la Iglesia es una pérdida de tiempo. ¿Cómo puedo ayudarles a darse cuenta de que puede ser una gran bendición?”
Una comparación podría ayudar a tus amigos. Podrías explicarles que así como el cuerpo necesita comer, beber y dormir, y la mente necesita aprender, el espíritu también necesita nutrirse. Asistir a la Iglesia te ayuda a nutrir tu espíritu, y eso lo logras al aprender el Evangelio y al participar de la Santa Cena, renovando así las promesas sagradas que le has hecho al Padre Celestial. Esa reflexión y renovación del compromiso te ayudan a recibir la bendición prometida de “que siempre [puedas] tener su Espíritu [contigo]” (D. y C. 20:77). Tener Su espíritu contigo fortalece tu fe y te ayuda a llegar a ser más como Cristo.
También puedes hablar con tus amigos acerca de otras bendiciones que recibes. Podrías hablarles de la paz que sientes en la Iglesia, compartir algo útil que hayas aprendido en las reuniones, hablarles de una ocasión en la que tuviste que prestar servicio, o testificar de que ir a la capilla te ayuda a hacer que el día de reposo sea una delicia (véase Isaías 58:13–14).
Tal vez la manera más poderosa de ayudar a tus amigos sea invitarlos a ir y ver por sí mismos. Cuando asistan contigo a la reunión sacramental y a las demás reuniones, podrán sentir el poder del Espíritu Santo, aprender el Evangelio y ver sus bendiciones en la vida de los miembros.
Deja que el Espíritu te guíe
Podrías compartir tu testimonio acerca de ir a las reuniones y explicarles lo bien que te hace sentir y las cosas especiales que aprendes allí. Cuando compartas tu testimonio, el Espíritu te ayudará a saber qué decir y tus amigos sabrán que lo que estás diciendo es verdad. Cuanto más sepan, más interés podrían tener. Incluso puedes invitarlos a ir a las reuniones contigo.
Mikelle M., 13 años, Utah, EE. UU.
Invítalos a la Iglesia
Es difícil tener amigos que piensan que ir a la Iglesia es una pérdida de tiempo, aunque podemos sentirnos felices por ellos al ayudarles a saber lo que nuestro Padre Celestial les tiene reservado. Podemos ayudarles invitándolos a ir a la Iglesia para que sientan el gozo de estar en un centro de reuniones dedicado y al tener fe en que pueden sentir amor por el Padre Celestial y ser conscientes de las bendiciones que se reciben al asistir a las reuniones.
Óscar Y., 19 años, Monagas, Venezuela
Céntrate en la Santa Cena
Asistir a la Iglesia es importante porque es el lugar donde podemos renovar nuestro convenio bautismal, y todos los demás convenios por medio de la Santa Cena. El Señor nos promete que Su Espíritu estará siempre con nosotros si participamos dignamente de la Santa Cena y cumplimos con nuestra parte del convenio. La protección, dirección y el consuelo que recibimos del Espíritu son esenciales para la vida cotidiana. Esas bendiciones exclusivas no se pueden recibir de ninguna otra manera excepto al ir a la Iglesia y participar de la Santa Cena.
Diana R., 16 años, Oregón, EE. UU.
Sé valiente
Puedes ayudarles a entender al simplemente hablarles, invitarlos, darles Escrituras o incluso invitar a los misioneros a que vayan a la casa de ellos. No seas tímido. Sé feliz, pues tal vez se unan a la Iglesia.
David H., 12 años, Nuevo México, EE. UU.
Haz tu parte
Ir a la Iglesia no es una pérdida de tiempo si participas activamente y procuras aprender y entender lo que se dice o enseña. Puedes sentir el Espíritu y a veces conoces a personas nuevas.
Ethan H., 15 años, Utah, EE. UU.
Deja que tu luz alumbre
Los miembros de la Iglesia brillamos con lo que hemos aprendido en el evangelio de Jesucristo. Dar un buen ejemplo y mostrarles a tus amigos que eres feliz con las bendiciones que has recibido al asistir a las reuniones tal vez les enseñe el valor que tiene el ir a la Iglesia.
Johanna R., 20 años, Surigao del Sur, Filipinas
Mantén la perspectiva eterna
Al saber que la Iglesia es el Reino de Dios en la tierra, vamos a las reuniones cada domingo para dar un paso hacia la perfección y el reino celestial. Al asistir a la Iglesia cada domingo nos acercamos al Padre Celestial cuando renovamos nuestros convenios (al tomar la Santa Cena) y nos autoevaluamos para ver cómo estamos espiritualmente.
Esther M., 17 años, Provincia Kasai-Oriental, República Democrática de Congo
Un día de delicia
“Los barrios y las ramas de la Iglesia proporcionan una reunión semanal de descanso y renovación, un tiempo y un lugar para dejar al mundo de lado: el día de reposo. Es un día para que ‘se deleiten en Jehová’ [Isaías 58:14], para experimentar la sanación espiritual que proviene de la Santa Cena y para recibir la promesa renovada de tener Su Espíritu con nosotros”.
Élder D. Todd Christofferson, del Cuórum de los Doce Apóstoles, “El porqué de la Iglesia”, Liahona, noviembre de 2015, pág. 109.
Siguiente pregunta
“¿Cómo se logra tener tiempo para las actividades semanales de los jóvenes, la noche de hogar y el estudio familiar y personal de las Escrituras cuando la escuela y los deberes toman tanto de mi tiempo?”
Envía tu respuesta y, si lo deseas, una fotografía de alta resolución antes del 1 de marzo de 2016 a liahona.lds.org, por correo electrónico a liahona@ldschurch.org, o por correo postal (busca la dirección en la página 3).
La carta o el correo electrónico debe venir acompañado de la siguiente información y autorización: (1) nombre completo, (2) fecha de nacimiento, (3) barrio o rama, (4) estaca o distrito, (5) tu autorización por escrito y, si tienes menos de 18 años, la autorización por escrito de tus padres (es admisible por correo electrónico) para publicar tu respuesta y fotografía.
Es posible que las respuestas se modifiquen para abreviarlas o darles más claridad.