Manuales y llamamientos
Introducción al Programa para la Unidad Básica


Introducción al Programa para la Unidad Básica

“Creemos en la misma organización que existió en la Iglesia Primitiva” (Artículos de Fe 1:6).

Durante Su ministerio terrenal, el Señor Jesucristo estableció Su Iglesia de manera muy simple entre los creyentes. Hizo que Sus apóstoles organizaran grupos pequeños de miembros que tuviesen un líder del sacerdocio que los presidiera y que velara por su bienestar.

Los primeros miembros de la Iglesia pudieron progresar y prosperar en el Evangelio porque Cristo y Sus apóstoles hicieron lo siguiente:

  1. Mantuvieron el enfoque al enseñar los principios y las doctrinas del Evangelio.

  2. Instaron a los miembros a recibir las ordenanzas y a hacer y guardar los convenios relacionados con éstas.

  3. Enseñaron a los miembros a atender las necesidades espirituales y temporales de los unos a los otros.

  4. Mantuvieron una organización simple.

Los líderes de la Iglesia en el Libro de Mormón practicaron los mismos principios de organización y administración: “Y así salieron Alma, Amulek y también muchos otros que habían sido elegidos para la obra, a predicar la palabra en todo el país. Y se generalizó el establecimiento de la Iglesia por toda la comarca…” (Alma 16:15).

Los mismos principios también se pusieron en práctica durante los primeros años de la restauración de la Iglesia. Los miembros de la Iglesia hoy en día se benefician más si siguen esos mismos principios de organización y administración.

Según lo autorice la Presidencia de Área, el Programa para la Unidad Básica se puede utilizar para establecer y organizar la Iglesia en lugares del mundo donde:

  1. La Iglesia se encuentre en sus etapas iniciales.

  2. Los miembros se encuentren diseminados.

  3. El número de miembros sea pequeño y el liderazgo se esté empezando a desarrollar.

  4. Aún no se hayan organizado barrios ni estacas.

  5. Los miembros tengan necesidades especiales de idioma o de otra índole.

Con la aprobación de la Presidencia de Área, el Programa para la Unidad Básica también se puede utilizar en estacas en las que existan condiciones similares.

A medida que la Iglesia se establece bajo estas condiciones, los miembros se organizan en grupos pequeños llamados ramas.

En esta publicación se proporcionan las pautas para el Programa para la Unidad Básica, así como también en Guía para la familia (31180 002), Guía para la rama (31179 002), Guía para los líderes del sacerdocio y de las organizaciones auxiliares (31178 002), y Guía para la enseñanza (34595 002). Cuando las unidades estén completamente organizadas en estacas y barrios, deben utilizar el Manual de Instrucciones de la Iglesia (35205 y 35209).