Entrevistas

Una entrevista es una reunión que se lleva a cabo entre un líder y otra persona. En una entrevista, el líder hace preguntas, escucha, enseña y da consejo a la otra persona. Las entrevistas proporcionan la oportunidad de compartir información o rendir informes en cuanto a asignaciones o llamamientos de una persona. También brindan la oportunidad de dar instrucciones y consejo. Una entrevista es un momento propicio para que un líder enseñe a los miembros las doctrinas, los principios y las prácticas de la Iglesia, basándose en las Escrituras y en las enseñanzas de los profetas de los últimos días.

El presidente de rama entrevista a los niños que están a punto de cumplir los ocho años de edad para determinar si están preparados para ser bautizados y confirmados miembros de la Iglesia, cuando por lo menos uno de los padres es miembro de la Iglesia y ambos padres dan su consentimiento para el bautismo. (Los líderes misioneros entrevistan a los candidatos para el bautismo de nueve años de edad o mayores y a niños de ocho años cuyos padres no sean miembros para determinar la dignidad del candidato para el bautismo y la confirmación.) El presidente de rama entrevista a los miembros para determinar su dignidad para recibir el sacerdocio, ser avanzados en él o prestar servicio en un llamamiento de la Iglesia. El presidente de rama y el presidente de misión entrevistan a los miembros de la rama para determinar su dignidad para recibir una recomendación para el templo.

Las siguientes sugerencias serán de utilidad para que los líderes realicen entrevistas más útiles y productivas.

1. Escoja un lugar tranquilo donde la entrevista pueda realizarse sin interrupciones.

2. Informe a la persona la razón por la que está siendo entrevistada.

3. Formule preguntas de manera amable y directa.

4. Permita que la persona haga preguntas y exprese sus sentimientos. 5. Escuche lo que la persona diga.

5. Dé consejo, instrucciones y asignaciones de manera clara.

6. Exprese agradecimiento y aliente a la persona, y, según le indique el Espíritu, comparta su testimonio, lea pasajes de las Escrituras y oren juntos. Ayude a la persona a salir de la reunión sintiéndose fortalecida y con un sentimiento de esperanza.

7. Reserve tiempo suficiente para la entrevista para que la persona no se sienta apresurada.

Siempre que sea posible, al entrevistar a una mujer, el presidente de rama debe pedir a un poseedor del sacerdocio que permanezca en un salón de clase contiguo, el vestíbulo o un pasillo.