“24 de diciembre. ¿Cómo demuestra Jesucristo Su amor por mí? Navidad”, Ven, sígueme — Para cuórums del Sacerdocio Aarónico y clases de las Mujeres Jóvenes: Temas doctrinales 2023, 2022
“24 de diciembre. ¿Cómo demuestra Jesucristo Su amor por mí?”, Ven, sígueme — Para cuórums del Sacerdocio Aarónico y clases de las Mujeres Jóvenes: Temas doctrinales 2023
24 de diciembre
¿Cómo demuestra Jesucristo Su amor por mí?
Navidad
Deliberar en consejo
Dirigido por un miembro de la presidencia de clase o de cuórum; 10–20 minutos aproximadamente
Al principio de la reunión, repitan juntos el Lema de las Mujeres Jóvenes o el Lema de los cuórums del Sacerdocio Aarónico. Después, dirijan un análisis sobre la obra de salvación y exaltación utilizando una o más de las preguntas que figuran a continuación o sus propias preguntas (véase Manual General, 10.2, 11.2). Planifiquen maneras de actuar de conformidad con lo que hayan analizado.
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Vivir el Evangelio. ¿De qué manera estamos hallando gozo al seguir a Jesucristo?
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Cuidar de los necesitados. ¿Qué personas de nuestro barrio o comunidad necesitan nuestra ayuda? ¿Cómo podemos ayudar a esas personas?
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Invitar a todos a recibir el Evangelio. ¿Cómo podemos ayudarnos mutuamente a prepararnos para el servicio misional?
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Unir a las familias por la eternidad. ¿Cómo podemos contribuir a los esfuerzos de nuestro barrio por llevar a cabo la obra del templo y de historia familiar?
Según sea apropiado, hagan lo siguiente al terminar la lección:
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Testificar de los principios que se enseñaron.
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Recordar a los miembros de la clase o del cuórum en cuanto a los planes y las invitaciones que se hicieron durante la reunión.
Enseñar la doctrina
Dirigido por un líder adulto o un joven; 25–35 minutos aproximadamente
Prepárate espiritualmente
Antes de nacer, a Jesucristo se lo conocía como el Gran Jehová. Él era el “Amado y […] Escogido [del Padre] desde el principio” (Moisés 4:2), lleno de gloria, de gracia y de verdad (véanse Juan 17:5; Doctrina y Convenios 93:11). Sin embargo, cuando nació, María “lo acostó en un pesebre, porque no había lugar para ellos en el mesón” (Lucas 2:7). ¿Por qué estuvo dispuesto Jesucristo a aceptar Su función como Salvador a pesar de que significara venir a la tierra en las circunstancias más humildes? La respuesta sencilla es que Él nos ama. Cuando Nefi vio el nacimiento del Salvador en una visión, testificó del “amor de Dios que se derrama ampliamente en el corazón de los hijos de los hombres; por lo tanto, es más deseable que todas las cosas” (1 Nefi 11:22).
La Navidad es una época especial para reflexionar sobre cómo el nacimiento del Salvador y Su sacrificio expiatorio demuestran Su amor por ti. Al prepararte para ayudar a los jóvenes a quienes enseñas a sentir el amor del Salvador, podrías repasar Lucas 4:16–21; Juan 3:16–17; 3 Nefi 27:13–16; y el mensaje del élder D. Todd Christofferson titulado “El amor de Dios” (Liahona, noviembre de 2021, págs. 16–19).
Aprender juntos
A medida que tu clase o cuórum se acerca al final de su estudio del Nuevo Testamento este año, podrías pedir a los jóvenes que mencionen algunos relatos favoritos del Nuevo Testamento en los que el Salvador haya mostrado Su amor por las personas de Su entorno; incluso podrían leer juntos algunos de esos relatos. ¿Qué nos enseñan esos relatos sobre el amor que el Salvador siente por nosotros? Para ayudarlos a analizar en mayor profundidad el amor del Salvador, utiliza actividades como las siguientes.
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Invita a los miembros de tu clase o cuórum a pensar en el amor que el Padre Celestial y Jesucristo sienten por nosotros como si fuera un hermoso ramo de flores (véase Russell M. Nelson, “Amor divino”, Liahona, febrero de 2003, pág. 16). Considera la posibilidad de dar a cada persona una flor recortada en papel y pedirle que lea uno de los pasajes de las Escrituras que se encuentran en “Recursos de apoyo”. Pídeles que escriban en sus flores lo que aprendan acerca del amor que el Padre Celestial y Jesús sienten por nosotros. Mientras hablan sobre lo que aprendieron, podrían juntar sus flores para crear un ramo. ¿Cómo podemos reconocer mejor las maneras en que el Padre Celestial y Jesús demuestran Su amor por nosotros?
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Varios himnos describen maneras en las que el Salvador demuestra Su amor por nosotros (véase, por ejemplo, “Yo sé que vive mi Señor”, Himnos, nro. 73). Los miembros de la clase o del cuórum podrían seleccionar un himno y relatar experiencias en las que hayan sentido el amor del Salvador de maneras similares a las que se describen en el himno. ¿De qué otras maneras ha demostrado el Salvador Su amor por nosotros? Como seguidores de Cristo, ¿cómo podemos ayudar a los demás a sentir Su amor?
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Hay muchas ideas falsas en el mundo sobre el amor que Dios siente por nosotros. Por ejemplo, hay quien podría pensar que, cuando las personas son ricas o prósperas, eso significa que Dios las ama más que a las demás. Otros podrían sentir que, si Dios realmente nos amara, Él nos aceptaría como somos y no nos pediría que cambiáramos. ¿Qué mensajes falsos sobre el amor de Dios hemos escuchado? Para ayudar a contrarrestar esos mensajes falsos, podrías pedir a los jóvenes que repasen el mensaje del élder D. Todd Christofferson titulado “El amor de Dios” o el mensaje del presidente Dallin H. Oaks titulado “El amor y la ley” (Liahona, noviembre de 2009, págs. 26–29). ¿Qué verdades encontramos en estos mensajes que nos ayudan a entender el amor que Dios siente por nosotros?
Actuar con fe
Insta a los miembros de la clase o del cuórum a que mediten y anoten lo que harán para actuar de conformidad con las impresiones que hayan recibido el día de hoy. Si lo desean, podrían compartir sus ideas. Invítalos a pensar sobre la forma en que actuar de acuerdo con sus impresiones fortalecerá su relación con el Padre Celestial y con Jesucristo.
Recursos de apoyo
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Juan 3:16–17; 15:9–13; Romanos 8:35–39; Hebreos 12:5–6, 9–11; 1 Nefi 11:21–23; Alma 7:11–12; 3 Nefi 11:13–17; Moroni 7:45–48.
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Michael John U. Teh, “Nuestro Salvador personal”, Liahona, mayo de 2021, págs. 99–101.
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Taniela B. Wakolo, “Dios ama a Sus hijos”, Liahona, mayo de 2021, págs. 94–96.