“9 – 15 marzo. Jacob 1–4: ‘Reconciliaos con [Dios] por medio de la expiación de Cristo’”, Ven, sígueme — Para uso individual y familiar Libro de Mormón 2020 (2020)
“9 – 15 marzo. Jacob 1–4”, Ven, sígueme — Para uso individual y familiar 2020
9 – 15 marzo
Jacob 1–4
Reconciliaos con [Dios] por medio de la expiación de Cristo
Cuando registra sus impresiones espirituales, usted demuestra que desea que el Espíritu Santo le enseñe. A medida que lea Jacob 1–4, podría ir escribiendo sus reflexiones.
Anote sus impresiones
Los nefitas veían a Nefi como su “gran protector” (Jacob 1:10). Él los había defendido de los ataques de sus enemigos, y les había advertido acerca de los peligros espirituales. Tras la muerte de Nefi, la tarea de dirigir espiritualmente al pueblo nefita recayó en Jacob, a quien Nefi había consagrado para ser sacerdote y maestro del pueblo (véase Jacob 1:18). Por inspiración, Jacob percibió que debía ser muy “audaz” al enseñar a su pueblo, porque ellos comenzaban a “obrar en el pecado” (Jacob 2:7, 5). Esos pecados eran muy similares a los que confrontan las personas de la actualidad: el amor por las riquezas y la inmoralidad sexual. Y aun cuando Jacob tenía que condenar esa iniquidad, en su corazón sentía compasión hacia las víctimas, cuyos corazones habían sido “traspasados de profundas heridas” (Jacob 2:35). Jacob testificó que la sanación para ambos grupos, tanto para los pecadores como para los heridos espiritualmente, vendría del Salvador Jesucristo. El mensaje de Jacob, tal como fue el mensaje de Nefi antes que él, era un llamado a “[reconciliarse] con [Dios] por medio de la expiación de Cristo” (Jacob 4:11).
Ideas para el estudio personal de las Escrituras
El Señor desea que yo magnifique mi llamamiento.
Para Jacob, enseñar la palabra de Dios era más que una asignación que había recibido de su hermano: era un “mandato del Señor”; por lo que él trabajaba diligentemente para “magnificar [su] oficio” (Jacob 1:17, 19). El presidente Gordon B. Hinckley enseñó que magnificamos nuestros llamamientos “cuando servimos con diligencia, cuando enseñamos con fe y testimonio; cuando inspiramos, fortalecemos y cuando edificamos convicciones de rectitud en aquellos cuyas vidas podemos bendecir” (véase “Magnifiquemos nuestro llamamiento” Liahona, julio de1989, pág. 58). Piense en sus propios “[mandatos] del Señor” mientras lee Jacob 1:6–8, 15–19 y 2:1–11. ¿Por qué sirvió Jacob con tanta fidelidad? ¿Qué le inspira su ejemplo a hacer para magnificar sus llamamientos de la Iglesia y sus responsabilidades en casa?
Véase también “Elévense a la altura de su llamamiento” (video, churchofjesuschrist.org).
El Señor se deleita en la castidad.
El pecado tiene consecuencias para las personas y las sociedades. Al referirse al pecado sexual, Jacob advirtió de dos tipos de consecuencias. Cuando lea Jacob 2:31–35 y 3:10, determine las maneras en que la inmoralidad estaba afectando a los nefitas como pueblo y en forma personal. ¿De qué forma son similares estas consecuencias a las que ve que produce la inmoralidad en el mundo actualmente? ¿Qué nota en las palabras de Jacob que podría servirle para enseñar la importancia de la castidad a un ser querido? ¿De qué manera ha sido bendecido(a) por esforzarse por ser casto(a)?
Observe que Jacob también habló sobre el tema de tener más de una esposa. ¿Qué encuentra en Jacob 2:23–30 que le ayuda a entender por qué, en limitadas situaciones, el Señor ha mandado a Su pueblo a practicar el matrimonio plural? ¿Cómo se siente Dios en cuanto a los que lo practican sin Su autorización?
Puedo reconciliarme con Dios por medio de la expiación de Jesucristo.
Jacob exhortó a su pueblo a reconciliarse “con [Dios] por medio de la expiación de Cristo” (Jacob 4:11). ¿Qué cree que significa esto? ¿Le ayudaría si consulta la palabra reconciliar en un diccionario? Quizás en este capítulo encuentre palabras o frases que indiquen cómo puede venir a Cristo de tal modo que se reconcilie con Dios. Por ejemplo, Jacob enseñó que la ley de Moisés fue dada para orientar al pueblo hacia Jesucristo (véase Jacob 4:5). ¿Qué ha proporcionado Dios para dirigirlo hacia Cristo? ¿Cómo se vale usted de esas cosas para acercarse más a Dios?
Véase también 2 Nefi 10:24.
Podré evitar la ceguera espiritual si me centro en el Salvador.
Cuando Jacob procuró que su pueblo se volviera más plenamente al Señor, él les advirtió que no fueran ciegos espiritualmente y no despreciaran las “palabras de claridad” del Evangelio (véase Jacob 4:13–14). El élder Quentin L. Cook advirtió contra problemas similares en nuestros días: “Hoy día existe la tendencia en algunos de nosotros de ‘traspasar lo señalado’ en vez de mantener un testimonio de los principios básicos del Evangelio. Hacemos esto cuando sustituimos las verdades del Evangelio con las filosofías de los hombres, cuando nos volvemos fanáticos… o ponemos las reglas por encima de la doctrina. El evitar esos comportamientos nos ayudará a evitar la ceguera y los tropiezos teológicos que describe Jacob” (“Traspasar lo señalado”, Liahona, marzo de 2003, pág. 22).
De acuerdo con Jacob 4:8–18, ¿qué podemos hacer para centrarnos en el Salvador y evitar la ceguera espiritual?
Ideas para el estudio familiar de las Escrituras y la Noche de Hogar
Al leer las Escrituras con su familia, el Espíritu le ayudará a saber qué principios debe enfatizar y analizar a fin de cubrir las necesidades de su familia. A continuación se presentan algunas ideas:
Jacob 1:6–8, 15–19; 2:1–11; 4:18
¿Qué palabras y frases en estos versículos expresan el amor que sentía Jacob por las personas a las que dirigía? ¿Qué han hecho nuestros líderes de la Iglesia para que podamos sentir su “deseo y afán… por el bien de [nuestras] almas”? (Jacob 2:3). Quizás los miembros de la familia pudieran hablar sobre las maneras en que podemos sostener a nuestros líderes. Podrían planificar hacer algunas cosas como familia a favor de los líderes locales de la Iglesia, tales como escribirles notas de agradecimiento por su servicio, o bien recordarles a ellos y a sus familias en sus oraciones.
Jacob 2:8
¿Cómo sana la palabra de Dios al “alma herida”?
Jacob 2:12–21
¿Qué enseñan estos versículos en cuanto a cómo debemos considerar las riquezas materiales? ¿Qué hacemos para tender una mano a quienes necesiten nuestra ayuda?
Jacob 3:1–2
¿Qué significa ser “puros de corazón” y “confiad en Dios con mentes firmes”?
Jacob 4:4–11
Una manera de ayudar a su familia a entender el significado de ser “inquebrantables” en su fe, podría ser buscar un árbol grande que haya en las inmediaciones y pedirle a los integrantes de la familia que sacudan las ramas. Luego, permítales que sacudan el tronco. ¿Por qué es más difícil sacudir el tronco? ¿Qué aprendemos de las enseñanzas de Jacob acerca de cómo desarrollar una fe que sea “inquebrantable”?
Para consultar más ideas para enseñar a los niños, vea la reseña de esta semana en Ven, sígueme — Para la Primaria.