Ilustración de Noé al salir del arca, por Sam Lawlor.

31 enero – 6 febrero

Génesis 6–11; Moisés 8

“Noé halló gracia ante los ojos de Jehová”

Aprender sobre los animales del arca de Noé y sobre la alta torre de Babel puede ser divertido para los niños; sin embargo, recuerde que el objetivo de esos relatos es enseñar verdades eternas. Considere con espíritu de oración las verdades que Dios desea que los niños aprendan.

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Antes de comenzar a enseñar a los niños los relatos que se encuentran en Génesis 6–11 y Moisés 8, concédales la oportunidad de enseñarse los unos a los otros lo que sepan sobre Noé y el arca o sobre la torre de Babel.

Enseñar la doctrina: Niños pequeños

Génesis 6:14–22; 7–8; Moisés 8:16–30

El seguir al profeta me bendecirá a mí y a mi familia.

Conforme los niños aprendan a seguir al profeta, serán bendecidos y estarán espiritualmente a salvo, tal como la familia de Noé estuvo a salvo del Diluvio.

Posibles actividades

• Con sus propias palabras, relate la historia de Noé y el arca (véase “Noé”, en Relatos del Antiguo Testamento; véase también “Sigue al Profeta”, Canciones para los niños, págs. 58–59, tercera estrofa). Ayude a los niños a dramatizar partes del relato; por ejemplo, podrían hacer de cuenta que utilizan una herramienta para construir el arca o caminar como animales que van entrando a la misma.

• Lea Moisés 8:19–20 a los niños, haciendo hincapié en lo que el Señor le mandó a Noé que hiciera. Ayúdeles a entender que Noé fue un profeta y que su familia estuvo a salvo del Diluvio porque lo siguieron. Pregúnteles si saben quién es nuestro profeta hoy en día. Muestre una imagen de él y ayude a los niños a repetir su nombre.

• Lleve a la clase imágenes u objetos que representen enseñanzas del profeta actual, tales como las Escrituras o una imagen de un templo. Permita que los niños se turnen para seleccionar un artículo y decir lo que sepan sobre él. Explíqueles lo que el artículo representa y aliéntelos a hacer un dibujo de sí mismos obedeciendo lo que el profeta ha enseñado. Exprese su testimonio de las bendiciones que se reciben por seguir al profeta.

Génesis 9:15–16

Dios cumplirá las promesas que nos hace.

Es importante que los niños sepan que Dios cumple Sus promesas, especialmente al prepararse para hacer convenios con Él cuando sean bautizados.

Posibles actividades

• Invite a cada uno de los niños a hacer un dibujo de un arcoíris. Léales Génesis 9:15–16 y pídales que presten atención para detectar las dos variaciones de la palabra acordar. Invítelos a sostener sus arcoíris en alto cuando escuchen la palabra. Explique que los arcoíris son recordatorios de las promesas que Dios nos ha hecho.

• Hable con los niños acerca de algunas de las promesas de Dios; por ejemplo, que podemos regresar al Padre Celestial si seguimos a Jesucristo o que Dios enviará al Espíritu Santo para consolarnos. Testifique que Dios siempre cumple Sus promesas.

• Utilice imágenes para hablar a los niños sobre los convenios que hacemos con Dios, tales como imágenes de un niño siendo bautizado, la Santa Cena y un templo (véase Libro de obras de arte del Evangelio, nros. 104, 108, 120).

Génesis 11:1–9

Seguir a Jesucristo es la única manera de llegar al cielo.

El pueblo de Babel pensó que podría llegar al cielo edificando una torre en vez de viviendo el evangelio de Jesucristo. ¿Cómo puede ayudar a los niños a entender que seguir al Salvador es la única manera de regresar a nuestro Padre Celestial?

Posibles actividades

• Cuente la historia de la torre de Babel con sus propias palabras, o bien, lea el relato que se encuentra en “La Torre de Babel” (en Relatos del Antiguo Testamento). A fin de que los niños le ayuden, ínstelos a que compartan lo que sepan en cuanto el relato.

  

  Ilustración de la torre de Babel, por David Green.

• Permita que los niños construyan una torre con bloques u otros objetos; luego muéstreles una imagen del Salvador y pregúnteles cuál es la manera de regresar al Padre Celestial: ¿construyendo una torre o siguiendo a Jesucristo? Invite a los niños a que mencionen lo que pueden hacer para seguir al Salvador.

Enseñar la doctrina: Niños mayores

Génesis 6:14–22; 7–8; Moisés 8:16–30

El seguir al profeta me bendecirá a mí y a mi familia.

Los niños están creciendo en un mundo inicuo, similar en algunos sentidos al mundo en la época de Noé. La experiencia de Noé puede infundirles la confianza de que pueden encontrar seguridad espiritual al seguir al profeta.

Posibles actividades

• Ayude a los niños a elegir versículos de Génesis 6:14–22; 7–8 que pudieran representar en un dibujo y utilice sus dibujos para enseñarles la historia de Noé. Pídales que compartan lo que aprendan del relato.

• Muestre una imagen de Noé (véase Libro de obras de arte del Evangelio, nros. 7–8) y una del profeta actual. Ayude a los niños a buscar en Moisés 8:16, 19–20, 23–24 cosas que Noé enseñó que nuestros líderes de la Iglesia todavía enseñan en la actualidad. ¿En qué forma somos bendecidos cuando obedecemos esas enseñanzas?

• Comparta algo que el profeta actual haya enseñado recientemente. Pida a los niños que escriban en tiras de papel algo que el profeta haya enseñado y luego ayúdeles a disponer las tiras en forma de arca. ¿En qué sentido son esas enseñanzas como el arca que Noé construyó?

Génesis 9:15–17

Necesitamos recordar nuestros convenios.

Cuando somos bautizados, hacemos convenios con Dios de obedecer Sus mandamientos. En Génesis 9:15–17, el arcoíris es señalado como un recordatorio del convenio de Dios. Esos versículos pueden inspirar a los niños a buscar maneras de recordar sus convenios con Dios.

Posibles actividades

• Muestre a los niños algo que usted tenga que le recuerde algo importante de su vida, tal como un anillo de matrimonio, una fotografía o un diario. Permita que los niños compartan sus propios ejemplos. Lean juntos Génesis 9:15–17 (véase también Traducción de José Smith, Génesis 9:21–25 [en el apéndice de la Biblia]). ¿Qué desea el Padre Celestial que pensemos cuando vemos un arcoíris?

• Recuerde a los niños los convenios que hicieron cuando fueron bautizados y que renuevan cada vez que toman la Santa Cena (véanse Mosíah 18:8–10; Doctrina y Convenios 20:77, 79). Pídales que dibujen o elaboren algo que les recuerde sus convenios.

Génesis 11:1–9

Seguir a Jesucristo es la única manera de llegar al cielo.

Si bien las personas en la actualidad quizá no intenten construir torres para llegar al cielo, muchos procuran hallar paz y felicidad siguiendo caminos que no son el que Jesucristo ha establecido. ¿De qué manera podría utilizar la historia de la torre de Babel para enseñar ese principio?

Posibles actividades

• Pida a los niños que compartan lo que saben sobre el relato de la torre de Babel (véase Génesis 11:1–9). Según Helamán 6:28, ¿por qué edificó la torre el pueblo de Babel? ¿Por qué edificar esa torre era la manera incorrecta de llegar al cielo? ¿Qué consejo le daríamos al pueblo de Babel?

• Invite a los niños a buscar en 2 Nefi 31:20–21 y en Helamán 3:28 la manera correcta de llegar al cielo. Exprese su testimonio del Salvador Jesucristo.

Alentar el aprendizaje en el hogar

Invite a los niños a pensar en formas mediante las cuales enseñarán a su familia sobre las historias que aprendieron en la Primaria. Por ejemplo, podrían usar los dibujos que hayan hecho o la hoja de actividades de esta semana.

Cómo mejorar nuestra enseñanza

Procure comprender a los niños a quienes enseña. Mientras les enseñe, ponga atención particular a sus preguntas, sus comentarios y a los relatos o principios que parezcan ser especialmente significativos para ellos. El saber esto contribuirá a que se centre en sus necesidades