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Lección 77: Doctrina y Convenios 64:1–17: “Os es requerido perdonar”


“Lección 77: Doctrina y Convenios 64:1–17: ‘Os es requerido perdonar’”, Doctrina y Convenios: Manual del maestro de Seminario, 2025

“Doctrina y Convenios 64:1–17”, Doctrina y Convenios: Manual del maestro de Seminario

Lección 77: Doctrina y Convenios 64–66

Doctrina y Convenios 64:1–17

“Os es requerido perdonar”

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dos familiares abrazándose

Durante un viaje de Misuri a Ohio, José Smith y otros experimentaron contención y malos sentimientos entre ellos. En Doctrina y Convenios 64, Jesucristo les enseñó en cuanto a la necesidad de perdonar. Esta lección puede ayudar a los alumnos a seguir el ejemplo de Jesucristo y llegar a perdonar más.

Algunas posibles actividades de aprendizaje

Reflexionar sobre el perdón

Invite a los alumnos a compartir un relato sobre el perdón. O bien, usted podría compartir un relato sobre el perdón, como “El perdón aligeró mi carga” (8:24), que se encuentra en LaIglesiadeJesucristo.org. Invite a los alumnos a responder las preguntas siguientes en sus diarios de estudio.

  • ¿Te consideras una persona que perdona? ¿Por qué sí o por qué no?

  • ¿Por qué piensas que el Padre Celestial y Jesucristo desean que perdones a los demás?

  • ¿Hay alguien a quién debes perdonar?

Invite a los alumnos a buscar revelación personal para saber a quién podrían necesitar perdonar y qué pueden hacer para conceder el perdón.

Jesucristo perdona

Considere invitar a un alumno a leer el contexto siguiente de Doctrina y Convenios 64.

En agosto de 1831, después de dedicar Sion en Misuri, José Smith, Oliver Cowdery, Isaac Morley, Ezra Booth y otras personas regresaron a casa en Ohio. El calor extremo, las condiciones de viaje peligrosas y los desacuerdos con los líderes llevaron al grupo a criticarse y pelearse entre sí. Después de llegar a casa, aún persistía la tensión entre ellos (véase Santos: La historia de la Iglesia de Jesucristo en los últimos días, tomo I, El estandarte de la verdad, 1815–1846, 2018, págs. 136–137, 139–140). En respuesta a su experiencia, el Señor dio la revelación que actualmente se conoce como Doctrina y Convenios 64.

Lee Doctrina y Convenios 64:1–7 y busca cómo respondió Jesucristo a los que habían pecado.

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el Salvador

Considere mostrar una ilustración del Salvador. Pida a los alumnos que reflexionen sobre las preguntas siguientes. Luego, invítelos a compartir sus respuestas con la clase o con un compañero.

  • ¿Qué atributos de Jesucristo encuentras en esos versículos?

  • ¿Por cuál de esos atributos te sientes más agradecido? ¿Por qué?

Nos es requerido perdonar

Lee Doctrina y Convenios 64:9–11 y busca cómo Jesucristo nos invita a seguir Su ejemplo.

Doctrina y Convenios 64:9–11 es un pasaje del Dominio de la doctrina. Podría invitar a los alumnos a marcar los pasajes del Dominio de la doctrina de una forma particular para que puedan encontrarlos con facilidad.

  • ¿Qué te llama la atención acerca de lo que el Salvador enseñó a José y a los demás?

    Ayude a los alumnos a descubrir la verdad siguiente: Jesucristo requiere que perdonemos a todas las personas. Podría escribir esta verdad en la pizarra. También puede invitar a los alumnos a escribirla en sus ejemplares de las Escrituras.

    Dedique tiempo suficiente a ayudar a los alumnos a entender los versículos 9–11. Algunas de las preguntas siguientes pueden ayudar.

  • ¿Por qué crees que Jesucristo requiere que perdonemos a todas las personas?

  • ¿Por qué crees que tenemos “el mayor pecado” (versículo 9) cuando decidimos no perdonar a los demás?

  • ¿De qué forma crees que decir en nuestro corazón “juzgue Dios entre tú y yo” (versículo 11) puede ayudarnos a perdonar a los demás?

  • ¿Qué atributos cristianos te ayudarán a desarrollar el perdón hacia los demás?

Aprender a perdonar a los demás

Considere dar tiempo a los alumnos para hacer preguntas o compartir desafíos relacionados con el perdón. Los alumnos podrían responder las preguntas siguientes en la pizarra mediante una encuesta anónima o en hojas de papel que se puedan compartir con la clase.

  • ¿Qué preguntas podrían tener las personas al procurar perdonar a los demás?

  • ¿Qué desafíos podrían enfrentar las personas al tratar de seguir el ejemplo del Salvador de perdonar?

Los alumnos podrían hacer preguntas como las siguientes: “¿Cómo puede ayudarme el Salvador a perdonar a los demás?” o “¿Perdonar a los demás significa que me tienen que volver a hacer daño?”.

Invite a los alumnos a seleccionar una pregunta como clase o individualmente. Luego, pídales que busquen las respuestas en las fuentes divinamente señaladas.

Los alumnos podrían encontrar respuestas buscando palabras como “Jesús”, “perdonar”, “Salvador” y “misericordia” en la aplicación Biblioteca del Evangelio o en la Guía para el Estudio de las Escrituras. También podría proporcionar pasajes de las Escrituras, como Mateo 5:7; 18:21–35; y Mosíah 26:30–31, y las declaraciones proféticas que se indican a continuación.

El élder Gerrit W. Gong, del Cuórum de los Doce Apóstoles, enseñó cómo Jesucristo puede ayudarnos a perdonar a los demás:

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Élder Gerrit W. Gong

En ocasiones, nuestra disposición a perdonar a los demás nos habilita, tanto a nosotros como a ellos, a creer que podemos arrepentirnos y ser perdonados. A veces, la disposición a arrepentirnos y la capacidad para perdonar no llegan al mismo tiempo. Nuestro Salvador es nuestro Mediador con Dios, pero también nos ayuda a reconciliarnos con nosotros mismos y con los demás a medida que venimos a Él. Reparar relaciones interpersonales y sanar corazones es difícil, tal vez nos resulte imposible hacerlo solos, sobre todo cuando el dolor y el sufrimiento son intensos. Pero los cielos pueden darnos fortaleza y sabiduría más allá de las nuestras para saber cuándo aferrarnos y cómo soltarnos (Gerrit W. Gong, “Felices y para siempre”, Liahona, noviembre de 2022, pág. 85).

El élder Jeffrey R. Holland, del Cuórum de los Doce Apóstoles, enseñó lo siguiente:

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Élder Jeffrey R. Holland

“Perdonad, y seréis perdonados” [Lucas 6:37], enseñó Cristo en tiempos del Nuevo Testamento; y, en nuestros días: “Yo, el Señor, perdonaré a quien sea mi voluntad perdonar, mas a vosotros os es requerido perdonar a todos los hombres” [Doctrina y Convenios 64:10]. No obstante, es importante que cualquiera de ustedes que viva con verdadera angustia tenga en cuenta lo que no dijo. Él no dijo: “No se les permite sentir dolor verdadero ni pesar real por las devastadoras experiencias que hayan tenido por culpa de otra persona”. Ni tampoco dijo: “A fin de perdonar totalmente tienes que volver a una relación tóxica, o volver a circunstancias destructivas y de maltrato”. No obstante, a pesar de las ofensas más terribles que nos puedan sobrevenir, solo podemos elevarnos por encima de nuestro dolor al poner los pies en la senda de la sanación real. Tal senda es la senda del perdón que anduvo Jesús de Nazaret, quien nos invita a cada uno de nosotros: “Ven, sígueme” [Lucas 18:22] (Jeffrey R. Holland, “El ministerio de la reconciliación”, Liahona, noviembre de 2018, págs. 78–79).

Usted podría invitar a los alumnos a compartir las respuestas que encuentren o las impresiones que sientan acerca del perdón. También podrían dar ejemplos de cómo se les ha bendecido al seguir el ejemplo del Salvador de perdonar a los demás. Recuerde a los alumnos que no relaten experiencias ni aporten detalles que sean muy personales.

  • ¿Qué medidas específicas podemos tomar que nos ayuden a perdonar a los demás?

Entre las respuestas que los alumnos podrían compartir se incluyen las siguientes:

  • Estudiar los relatos del Salvador y de otras personas que conceden el perdón

  • Reflexionar sobre cómo nuestra vida sería diferente si concediéramos el perdón

  • Ofrecer una oración sincera en la que entregamos nuestra carga a Dios y pedimos su ayuda para perdonar a los demás

  • Reconocer que, por medio de Jesucristo, nuestro corazón puede cambiar con el tiempo para que finalmente podamos perdonar a los demás

Aplicación personal

Anteriormente en la lección, usted invitó a los alumnos a pensar en alguien a quien deban perdonar. Invítelos a reflexionar sobre esa situación y a buscar inspiración mientras responden las preguntas siguientes.

Reflexiona sobre las preguntas siguientes y considera escribir tus ideas y sentimientos en tu diario de estudio.

  • ¿Qué puedes hacer para confiar en el Salvador a fin de perdonar?

  • ¿Qué esfuerzos harás para seguir el ejemplo de Jesucristo y llegar a perdonar más?

Memorizar

Podría ayudar a los alumnos a memorizar la referencia y la frase clave del Dominio de la doctrina durante esta lección y repasarlas en lecciones futuras. La frase clave de las Escrituras es “A vosotros os es requerido perdonar a todos los hombres”. En el apéndice que se encuentra bajo el título “Actividades de repaso del Dominio de la doctrina”, hay ideas para las actividades de memorización.

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