Recursos Cómo pagar mis estudios Elijan roles y representen lo siguiente. MEKALA: ¡Vaya! Esta semana aprendí mucho sobre las diferentes instituciones académicas. CONSUELO: Deberían haberla visto. Habló directamente con todas esas personas. ¡Logró mucho! ROBERT: ¿Tienes una decisión final? MEKALA: No, pero me he quedado con dos opciones. CONSUELO: Yo tengo tres opciones buenas. KWAME: Qué bueno. Yo estoy en un callejón sin salida. ROBERT: ¿A qué te refieres? KWAME: Me siento muy confuso, o tal vez asustado. Nadie de mi familia ha estudiado más que lo básico. Hablé con cinco instituciones académicas y me sentí abrumado. Los requisitos parecían complicados y los gastos… ¡jamás tendré tanto dinero! ROBERT: Pero, ¿no fue así como se sintió al comenzar su misión? KWAME: Bueno… pensándolo bien, sí. Así fue. CONSUELO: Pero tuvo mucho éxito. KWAME: Me tomó un tiempo, pero trabajé mucho y fui bendecido. Logré desarrollar las habilidades necesarias. MEKALA: Yo también estoy un poco asustada. La parte económica parece imposible. Hablé con una hermana de mi barrio que hizo todo lo que pudo y luego consiguió un préstamo para pagar el resto. Un préstamo del FPE. Tal vez si seguimos ayudándonos, todo funcionará. ROBERT: Un hermano de mi barrio pagó el primer año y luego obtuvo una beca para el segundo. CONSUELO: Mi esposo y yo estamos viendo cómo ahorrar un poco, y tenemos un tío que podría ayudarnos. KWAME: Bueno, no tengo tíos ricos; pero hemos llegado hasta aquí y no puedo dejar de soñar. Puede que tenga razón, Mekala. Lo pensaré un par de semanas más. Necesitaré que me sigan apoyando. Volver a la página 45