Cómo hacer frente a los desafíos: Una guía de autoayuda para fortalecer la resiliencia

una mujer que mira a la distancia

Introducción

La resiliencia puede definirse como la capacidad de resistir el estrés de la vida cotidiana y los acontecimientos que cambian la vida, adaptarse a ellos y recuperarse. Demostramos resiliencia al utilizar activamente habilidades para enfrentar pruebas difíciles. En otras ocasiones demostramos resiliencia al simplemente escoger perseverar. Podemos aprender a desarrollar y fortalecer la resiliencia mejorando nuestras relaciones interpersonales y fortaleciendo nuestra salud física, mental, emocional y espiritual.

Si actualmente está afrontando una crisis o tiene pensamientos suicidas, recurra a alguien en busca de apoyo. Piense en alguien en quien confíe, ya sea un familiar, un amigo, un líder de la Iglesia o una fuente de ayuda profesional. En Estados Unidos, marque 988 o acuda a la línea de ayuda en caso de crisis para encontrar recursos en todo del mundo.

Las frases a continuación tienen por objeto ayudarle a reconocer sus fortalezas y áreas de crecimiento. Al considerar cada frase, sea honesto, compasivo y no se juzgue a sí mismo. Cada frase presenta un rango desde “Casi siempre” hasta “No en este momento”. Dado que la resiliencia fluctúa, piense en qué punto se encuentra en este momento.

Considere seriamente establecer una o dos metas en un “plan para actuar” con un familiar, un amigo, un líder de la Iglesia o una fuente de ayuda profesional de su confianza. Su salud emocional es un asunto importante y compartir su meta lo conecta con los demás y fortalece su determinación personal. La persona con quien la comparta también puede ofrecerle comentarios, sugerencias y apoyo continuo.

Practicar constantemente las rutinas y habilidades de resiliencia al mejorar las relaciones saludables, el bienestar físico, los pensamientos, las conductas y las emociones, le ayudará a fortalecer la capacidad de afrontar los desafíos de la vida.

Relaciones interpersonales

Tengo familiares en los que confío y que me apoyan:

Casi siempre — A menudo — A veces — Rara vez — No en este momento

Tengo amigos de confianza que me apoyan:

Casi siempre — A menudo — A veces — Rara vez — No en este momento

Expreso empatía hacia los demás:

Casi siempre — A menudo — A veces — Rara vez — No en este momento

Dedico tiempo a ayudar a los demás:

Casi siempre — A menudo — A veces — Rara vez — No en este momento

Me comunico efectivamente con los demás:

Casi siempre — A menudo — A veces — Rara vez — No en este momento

Tengo modelos en los que me fijo como ejemplo de relaciones interpersonales saludables:

Casi siempre — A menudo — A veces — Rara vez — No en este momento

Plan para actuar: ¿Qué puedo hacer para mejorar mis habilidades para relacionarme con los demás?

Salud física

Bebo suficiente agua con regularidad:

Casi siempre — A menudo — A veces — Rara vez — No en este momento

Como alimentos nutritivos cada día:

Casi siempre — A menudo — A veces — Rara vez — No en este momento

Mantengo una buena higiene:

Casi siempre — A menudo — A veces — Rara vez — No en este momento

Hago ejercicio con regularidad:

Casi siempre — A menudo — A veces — Rara vez — No en este momento

Plan para actuar: ¿Qué puedo hacer para mejorar mi salud física?

Pensamientos

Controlo efectivamente mis pensamientos:

Casi siempre — A menudo — A veces — Rara vez — No en este momento

Busco información creíble y precisa en fuentes confiables (véase Manual General, 38.8.41):

Casi siempre — A menudo — A veces — Rara vez — No en este momento

Confío en mis creencias espirituales para guiar mi forma de pensar:

Casi siempre — A menudo — A veces — Rara vez — No en este momento

Creo que mi vida tiene propósito y significado:

Casi siempre — A menudo — A veces — Rara vez — No en este momento

Puedo ver la vida de manera realista y optimista:

Casi siempre — A menudo — A veces — Rara vez — No en este momento

Plan para actuar: ¿Qué puedo hacer para mejorar mis pensamientos?

Conductas

Practico habilidades saludables para enfrentar situaciones difíciles de manera regular:

Casi siempre — A menudo — A veces — Rara vez — No en este momento

Me adapto a los cambios y desafíos cuando es necesario:

Casi siempre — A menudo — A veces — Rara vez — No en este momento

Asumo la responsabilidad personal de mis actos y no de los actos de los demás:

Casi siempre — A menudo — A veces — Rara vez — No en este momento

Me esfuerzo por vivir según mis valores y creencias religiosas:

Casi siempre —A menudo — A veces — Rara vez — No en este momento

Soy capaz de enfrentar mis temores cuando es necesario:

Casi siempre —A menudo — A veces — Rara vez — No en este momento

Plan para actuar: ¿Qué puedo hacer para mejorar mis habilidades de control de la conducta?

Emociones

Expreso mis emociones de forma saludable:

Casi siempre — A menudo — A veces — Rara vez — No en este momento

Puedo controlar mis emociones:

Casi siempre — A menudo — A veces — Rara vez — No en este momento

Puedo encontrar humor y gozo en las experiencias de la vida:

Casi siempre — A menudo — A veces — Rara vez — No en este momento

Siento que mi vida tiene significado y propósito:

Casi siempre — A menudo — A veces — Rara vez — No en este momento

Siento esperanza en el futuro:

Casi siempre — A menudo — A veces — Rara vez — No en este momento

Plan para actuar: ¿Qué puedo hacer para mejorar mis habilidades para regular las emociones?

La resiliencia se desarrolla y fortalece a través de pequeñas y simples mejoras. De las secciones del “Plan para actuar” anteriores, ¿en cuáles metas (una o dos) empezaré a trabajar?

Para más información acerca de la resiliencia emocional, véase “Hallar fortaleza en el Señor: Resiliencia emocional.”