Seminario
Juan 1:1–16


Juan 1:1–16

“[E]l Verbo fue hecho carne”

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One oil on wood panel painting of the creation of the earth and the heavens. a large red orb is at left with Christ in white robes at left. His robes and hair are billowing around him as though in a great wind. He is barefoot and has both hands stretched out toward the orb.

El apóstol Juan escribió su Evangelio para ayudarnos a creer que Jesús es el Cristo (véase Juan 20:30–31). Juan enseñó que Jesucristo dejó Su hogar celestial para vivir en la tierra y convertirse en nuestro Redentor. El objetivo de esta lección es ayudarte a entender quién era Jesucristo antes de Su nacimiento terrenal y apreciar en mayor profundidad el amor que demostró cuando cumplió Su misión en la tierra.

¿Cuánto vale?

  • ¿Cuánto crees que vale este balón?

  • ¿Qué pasaría si se hubiera usado en un juego de campeonato mundial o si estuviera firmado por un jugador famoso?

Conocer la historia de un objeto puede aumentar nuestra comprensión de su valor. Esto también puede ser cierto en cuanto a las personas.

  • ¿Cómo podría ayudarte a comprender el valor de la vida y la misión de Jesucristo en la tierra el entender quién era Él antes de Su nacimiento?

El Evangelio de Juan puede ayudarnos a entender quién era en realidad Jesús de Nazaret y por qué deberíamos procurar aprender de Sus palabras y ejemplo. Juan escribió para fortalecer tu creencia de que Jesús es el Cristo, el Mesías prometido (véase Juan 20:30–31). El Evangelio de Juan comienza describiendo la gloria y el poder de Jesucristo incluso antes de que viniera a la tierra.

Jesucristo en la vida preterrenal

Copia el siguiente cuadro en tu diario de estudio:

Jesucristo en la vida preterrenal

La vida de Jesús en la tierra

Según tu conocimiento actual de Jesucristo, escribe en la columna izquierda palabras y frases que describan quién era Jesucristo, cómo era y qué hacía antes de Su nacimiento.

Lee los siguientes pasajes de las Escrituras y la declaración del élder Robert E. Wells, de los Setenta, y registra descripciones adicionales de Jesucristo en la misma columna. (La frase “en el principio”, tal como se usa en estos pasajes, se refiere a la existencia preterrenal).

Traducción de José Smith, Juan 1:1–5 (en el apéndice de la Traducción de José Smith o en la aplicación Biblioteca del Evangelio)

Doctrina y Convenios 93:21

Abraham 3:22–24

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Portrait of Elder Robert E. Wells. He received emeritus status on 4 October 1997

… Jesús fue también escogido y enviado por el Padre para organizar y crear esta tierra, nuestro sistema solar, nuestra galaxia y aun mundos sin número.

Jesucristo fue y es el Jehová del Antiguo Testamento, el Dios de Adán y de Noé, el Dios de Abraham, Isaac y Jacob. Jehová se manifestó y habló a los antiguos profetas, y al hacerlo, habló en el nombre de Su Padre y dijo lo que Su Padre habría dicho. El Jehová del Antiguo Testamento es el Jesucristo del Nuevo Testamento que vino al mundo como un Ser mortal.

(Robert E. Wells, “Nuestro mensaje al mundo”, Liahona, enero de 1996, pág. 73).

Repasa la lista que hiciste en el lado izquierdo de la página de tu diario y escribe un resumen de una oración sobre quién era Jesucristo en la vida preterrenal.

La vida de Jesús en la tierra

Observa la siguiente imagen. En la columna derecha de la tabla, escribe algunas descripciones de las humildes circunstancias que rodearon el nacimiento del Salvador.

Quizás también desees ver “La Natividad”, desde el minuto 2:30 hasta el 5:31. Este video está disponible en LaIglesiadeJesucristo.org.

Uno de los significados de la palabra condescender es “descender entre”. Por lo tanto, el hecho de que el Salvador descendiera a vivir en la tierra entre nosotros a veces se describe como “la condescendencia de Dios” ( 1 Nefi 11:26). Jesucristo dejó Su trono celestial de manera voluntaria y vino a un mundo caído donde experimentaría grandes pruebas y sufrimiento.

Lee los siguientes pasajes de las Escrituras en busca de las dificultades que el Salvador padeció en la tierra y la razón por la cual las experimentó. Añade estas descripciones a la derecha de la página de tu diario de estudio.

Juan 1:10–11

1 Nefi 11:26, 32–33

1 Nefi 19:7–10

Doctrina y Convenios 88:6

Repasa la lista que hiciste en la columna derecha y escribe un resumen de una oración sobre lo que Jesucristo padeció en la tierra.

Toma un minuto para comparar lo que Jesús abandonó con lo que padeció en la tierra de manera voluntaria.

Responde al menos dos de las siguientes preguntas en tu diario de estudio:

1.

  • ¿Qué has aprendido o sentido acerca del Padre Celestial y Jesucristo mientras estudiabas estos pasajes de las Escrituras?

  • ¿Por qué crees que Jesucristo estaría dispuesto a descender “debajo de todo” ( Doctrina y Convenios 88:6)?

  • ¿De qué manera la comprensión de la condescendencia de Jesucristo influye en tus sentimientos hacia Él?

Opcional: ¿quieres aprender más?

¿Qué tiene de excepcional el Evangelio de Juan?

Alrededor del noventa y dos por ciento del material del Evangelio de Juan no se encuentra en los otros relatos de los Evangelios. Probablemente, eso se deba a que Juan escribía para miembros de la Iglesia que ya tenían una comprensión de Jesucristo: una audiencia que era, sin duda, diferente de las de Mateo, Marcos y Lucas. El Evangelio de Juan es rico en doctrina, y algunos de sus temas principales son la divinidad de Jesús como el Hijo de Dios, la expiación de Cristo, la vida eterna, el Espíritu Santo, la necesidad de nacer de nuevo, la importancia de amar a los demás y la importancia de creer en el Salvador. Una de las principales contribuciones de Juan es que incluye las enseñanzas del Salvador a Sus discípulos en las horas previas a Su arresto, entre ellas, la gran oración intercesora.

1 Nefi 11:26.

¿Se hace referencia tanto al Padre Celestial como a Jesucristo con la palabra “Dios” en las Escrituras?

La Trinidad se compone de tres seres distintos: Dios, el Eterno Padre; Su Hijo Jesucristo; y el Espíritu Santo.

El Dios conocido como Jehová es el Hijo, Jesucristo ( Isaías 12:2 ; 43:11 ; 49:26 ; 1 Corintios 10:1–4 ; 1 Timoteo 1:1 ; Apocalipsis 1:8 ; 2 Nefi 22:2). Jesús actúa bajo la dirección del Padre y está en completa armonía con Él. Todos los seres humanos son Sus hermanos y hermanas, dado que Él es el mayor de los hijos procreados como espíritus por Elohim. Algunas referencias de las Escrituras se refieren a Él con la palabra Dios.Por ejemplo, las Escrituras dicen que “creó Dios los cielos y la tierra” ( Génesis 1:1), pero en realidad Jesús fue el Creador bajo la dirección de Dios el Padre ( Juan 1:1–3, 10, 14 ; Hebreos 1:1–2).

(Guía para el Estudio de las Escrituras, “ Dios, Trinidad ”, scriptures.ChurchofJesusChrist.org)

Mosíah 15:1 y Juan 20:26–28 registran otros dos ejemplos donde se identifica a Jesús como Dios.

¿De qué maneras específicas optó Jesucristo por condescender?

El obispo Richard C. Edgley, quien fue consejero del Obispado Presidente, enseñó:

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FInal official portrait of Elder Richard C. Edgley of the Presiding Bishopric 2000. Released at the April 2012 general conference.

Él descendió para nacer de una mujer mortal […].

Descendió para ser bautizado por un hombre, aun cuando Él era perfecto y sin pecado.

Descendió para ministrar a los más humildes de los humildes […].

Descendió para sujetarse a la voluntad del Padre, se sometió a ser tentado, sufrir burlas, ser azotado, ser echado fuera y ser repudiado, a pesar de que era todopoderoso.

Él descendió para ser juzgado por el mundo, aun cuando Él era el Juez del mundo.

Descendió para ser levantado en la cruz y muerto por los pecados del mundo, aun cuando ningún hombre podía quitarle la vida.

(Richard C. Edgley, “The Condescension of God”, Ensign, diciembre de 2001, pág. 20).

¿Por qué Jesucristo estuvo dispuesto a descender hasta lo más profundo?

El obispo Richard C. Edgley, quien fue consejero del Obispado Presidente, explicó:

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FInal official portrait of Elder Richard C. Edgley of the Presiding Bishopric 2000. Released at the April 2012 general conference.

Él descendió, no por obligación ni por gloria, sino solo por amor. Su condescendencia para redimirnos mediante la Expiación fue el precio que Él pagó para proporcionarnos la salvación y exaltación.

(Richard C. Edgley, “The Condescension of God”, Ensign, diciembre de 2001, pág. 19).

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