Marcos 2:23–3:6
“En los días de reposo hacer el bien”
El Salvador era criticado con frecuencia por los fariseos y otros líderes judíos debido a la forma en que observaba el día de reposo. Las respuestas de Jesús a estos líderes religiosos te ayudarán a comprender mejor el propósito del día de reposo y cómo invitar más plenamente las bendiciones del Señor a tu vida.
El propósito del día de reposo
Imagina los dos siguientes casos hipotéticos. En uno de los casos, alguien te dice que el día de reposo tiene muchas restricciones sobre qué hacer y qué no hacer, y que, si no los sigues todos, estás quebrantando los mandamientos de Dios. En el otro caso, alguien te dice que el domingo no es diferente a ningún otro día y que deberías hacer lo que quieras los domingos.
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¿Qué tan cómodo te sientes como para responder a estos casos hipotéticos?
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¿Qué preguntas tienes en cuanto al día de reposo?
A medida que estudias cómo el Salvador santificaba el día de reposo, busca respuestas a tus preguntas. Busca la guía del Padre Celestial para que te ayude.
La ley de Moisés enseñaba que el pueblo de Israel no debía trabajar en el día de reposo (véase Éxodo 31:14–15). Los escribas y fariseos añadieron sus propias interpretaciones a la ley de Moisés, lo que cambió la intención original de esta.
Lee los siguientes versículos y marca frases que muestren cómo Jesús ve el día de reposo.
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Marcos 2:23–28 : Los fariseos cuestionaban si era correcto recoger y comer granos en el día de reposo.
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Marcos 3:1–6 : Los fariseos cuestionaban si era correcto sanar a alguien en el día de reposo.
El presidente Russell M. Nelson proporcionó las siguientes reflexiones sobre los propósitos del día de reposo:
¿A qué se refería el Salvador cuando dijo que “[e]l día de reposo fue hecho por causa del hombre, y no el hombre por causa del día de reposo?” [ Marcos 2:27 ]. Creo que Él deseaba que entendiésemos que el día de reposo era Su regalo para nosotros, el cual nos garantiza un descanso real de los rigores de la vida diaria y supone una oportunidad de renovación física y espiritual. Dios nos dio este día especial no para divertirnos ni para realizar trabajos cotidianos, sino para descansar de nuestras obligaciones con desahogo físico y espiritual.
(Véase Russell M. Nelson, “El día de reposo es una delicia”, Liahona, mayo de 2015, pág. 129)
1. Teniendo presente lo que el Salvador y el presidente Nelson enseñaron sobre el día de reposo, responde las siguientes preguntas en tu diario de estudio.
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¿Qué aprendiste sobre los propósitos del Señor para el día de reposo?
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¿Qué podemos aprender sobre el Salvador a partir de Sus acciones y comportamiento en el día de reposo?
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¿De qué manera crees que el mandamiento de Dios de santificar el día de reposo demuestra Su amor por nosotros?
¿Cómo puedes honrar el día de reposo?
Comprender los propósitos del día de reposo y las bendiciones que Dios tiene para ti puede motivarte a santificar el día de reposo. Al aprender cómo honrar mejor el día de reposo, aprendes a invitar la sanación y el alivio del Salvador más plenamente en tu vida.
Estudia las siguientes fuentes para aprender más sobre el día de reposo y las bendiciones que podemos recibir al honrarlo.
El presidente Russell M. Nelson enseñó lo siguiente sobre mostrarle nuestro amor a Dios en el día de reposo:
… En mi juventud estudiaba las listas que otras personas habían recopilado de lo que se podía y lo que no se podía hacer en el día de reposo. No fue sino hasta más adelante que aprendí de las Escrituras que mi conducta y mi actitud en el día de reposo constituían una señal entre mi Padre Celestial y yo [véanse Éxodo 31:13 ; Ezequiel 20:12, 20 ]. Con ese entendimiento, ya no necesité más listas de lo que se podía y no se podía hacer. Cuando tenía que tomar una decisión en cuanto a si una actividad era o no era apropiada para el día de reposo, simplemente me preguntaba a mí mismo: “¿Qué señal quiero darle a Dios?”. Esa pregunta hizo que mis opciones respecto al día de reposo fueran bien claras.
(Russell M. Nelson, “El día de reposo es una delicia”, Liahona, mayo de 2015, pág. 130)
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¿Qué aprendiste sobre el propósito y las bendiciones del día de reposo?
Mira el video “Comparte cómo es tu día de reposo” (0:53), que presenta varias maneras de “hacer el bien” en el día de reposo.
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¿Cuáles son algunas de tus formas favoritas para acercarte a Jesucristo los domingos?
Responde la pregunta a o la b y la pregunta c.
a. ¿De qué manera lo que aprendiste en esta lección te ayudó a responder tus preguntas sobre el día de reposo?
b. Si no encontraste respuestas a tus preguntas, ¿qué podrías hacer para continuar buscándolas?
c. ¿Qué impresiones has recibido sobre lo que podrías hacer para disfrutar más plenamente de las bendiciones de honrar el día de reposo?
Opcional: ¿Quieres aprender más?
¿Por qué los fariseos criticaban a los discípulos por “arrancar[le] las espigas [a la mies]” en el día de reposo?
La ley de Moisés permitía que una persona recogiera un poco de grano con la mano mientras no abusara de ese privilegio y utilizara una hoz para cosechar (véase Deuteronomio 23:25). Sin embargo, la ley oral de los fariseos iba más allá que la ley de Moisés y establecía que recoger grano con la mano en el día de reposo estaba prohibido.
¿Cómo puede la gratitud bendecir tu experiencia con la Santa Cena y con el día de reposo?
En el video “Gratitud en el día de reposo” (3:38), el presidente Henry B. Eyring invita a las personas a permitir que el poder de la gratitud forme parte de su experiencia en el día de reposo. Este video está disponible en LaIglesiadeJesucristo.org.
¿Qué más puedo hacer para invitar las bendiciones del día de reposo?
El presidente Russell M. Nelson compartió varias reflexiones sobre formas efectivas para invitar al espíritu del día de reposo en su discurso “El día de reposo es una delicia” (Liahona, mayo de 2015, págs. 129–132).El video “Hagan del día de reposo una delicia al encontrar nombres de sus antepasados” (2:57) ilustra cómo tomarte un tiempo el domingo para hacer la obra de Historia Familiar puede tener un gran impacto en tu día y en tu vida. Este video está disponible en LaIglesiadeJesucristo.org.