Seminario
2 Corintios 11–12


2 Corintios 11–12

Sobrellevar las pruebas con fe en Cristo

Imagen
A young woman sitting down. A woman (possibly her mother) has her hand on the girl’s shoulder. The girl has a sad expression on her face.

Incluso los discípulos más fieles de Jesucristo padecerán dificultades en su vida. Pablo relató parte del sufrimiento que padeció y cómo pudo hallar gozo en esas experiencias mediante la ayuda del Salvador. Esta lección puede ayudarte a confiar en el Señor a medida que te esfuerzas por sobrellevar fielmente tus propios desafíos.

Orar por los alumnos por sus nombres. Pida ayuda al Padre Celestial para entender las necesidades de cada alumno y cómo satisfacerlas. Luego, preste atención a las impresiones del Espíritu que puedan surgir durante la lección o durante la preparación de la lección como respuesta a esas oraciones.

Preparación del alumno: Invite a los alumnos a estar preparados para expresar por qué piensan que la siguiente declaración no es verdadera: “Si oramos con suficiente fe en Jesucristo, el Padre Celestial eliminará cualquier prueba por la que estemos pasando”.

Algunas posibles actividades de aprendizaje

Las pruebas de la vida

Si es posible, lleve a la clase una rosa con un tallo espinoso o muestre la imagen de una.

Imagen
Spring rose bush thorns.
  • ¿Cuál crees que es el propósito de las espinas en un rosal?

En la vida, tenemos muchas experiencias maravillosas que se pueden comparar con una rosa. Sin embargo, también afrontamos pruebas y desafíos que se podrían comparar con las espinas.

  • ¿Cuáles son algunas pruebas y desafíos que las personas pueden afrontar en la vida?

Escuche atentamente las respuestas de los alumnos a las siguientes preguntas. Sus respuestas podrían ayudarlo a determinar las verdades más relevantes en las que debe centrarse a lo largo de la lección.

  • ¿Qué pensamientos podrían tener y qué preguntas podrían hacer las personas acerca de Dios cuando pasan por pruebas? ¿Qué podrían preguntarse acerca de sí mismos?

Al estudiar hoy, busca verdades que puedan ayudarte a sobrellevar fielmente las pruebas que Dios, en Su amor y sabiduría, decide no quitar. Medita en la razón por la cual necesitas la ayuda de Dios a medida que las sobrellevas.

Las pruebas de Pablo

Lee 2 Corintios 11:24–28 y busca algunas de las pruebas que sobrellevó Pablo durante su ministerio.

A fin de ayudar a los alumnos a darse cuenta de la profundidad del sufrimiento que Pablo experimentó, considere invitarlos a hablar sobre cuál de las pruebas de Pablo piensan que sería más difícil de sobrellevar.

  • ¿En qué otros ejemplos de las Escrituras o de la historia de la Iglesia puedes pensar que demuestren que incluso los justos sufren dificultades? ¿De qué manera es la vida del Salvador una prueba de esto?

  • ¿Por qué crees que el Padre Celestial permite que los discípulos fieles de Jesucristo padezcan tanto?

Aunque Dios bendijo a Pablo con revelaciones maravillosas, entre ellas una visión del Reino Celestial (véase 2 Corintios 12:1–4), él aún tuvo que sobrellevar dificultades y pruebas de fe. Lee 2 Corintios 12:7 para ver con qué comparó Pablo una de las pruebas que estaba enfrentando.

  • ¿Cómo podría “un aguijón en [la] carne” ser una buena descripción de algunas pruebas personales?

En lugar de simplemente hacer la siguiente pregunta, considere invitar a los alumnos a dibujar en su diario de estudio o en la pizarra algo que podrían comparar con una de sus pruebas personales.

  • ¿Qué comparación podrías utilizar para describir una prueba específica que tú o tus seres queridos hayan sobrellevado? ¿Por qué?

Lee 2 Corintios 12:8–10 para ver la experiencia de Pablo en la que oró para que se le quitara su “aguijón en [la] carne”. Conforme leas, ten en mente que la palabra gracia significa “ayuda o fortaleza divina [que] proviene de la misericordia y el amor de Dios” (Guía para el Estudio de las Escrituras, “ Gracia ”, disponible en scriptures.ChurchofJesusChrist.org, y Éter 12:27).

Una verdad que podemos aprender de la experiencia de Pablo es que el Señor no siempre elimina nuestros desafíos, pero, al sobrellevarlos fielmente, podemos ser fortalecidos por Su gracia.

  • ¿Qué evidencias de esa verdad ves en la vida del Salvador? (véase Lucas 22:41–44).

Para la siguiente actividad, puede invitar a los alumnos a que trabajen con un compañero y pedir a cada alumno que lea un pasaje diferente, y que compartan lo que aprendieron el uno con el otro.

Encuentra y lee al menos un relato de las Escrituras que demuestre la forma en la que el Señor puede bendecir a quienes sobrellevan las pruebas con fe en Él. (A continuación, se presentan sugerencias de relatos que podrías elegir).

Doctrina y convenios 121:1–8; 122:7–9 . (José Smith oró mientras sufría en la cárcel de Liberty).

Mosíah 24:8–15 . (El pueblo de Alma era cautivo de los lamanitas y era gobernado por el inicuo sacerdote Amulón).

  • ¿Qué aprendiste acerca del Señor y de lo que Él ofrece a quienes sobrellevan las pruebas fielmente?

  • ¿Cuáles de Sus bendiciones necesitas más a medida que sobrellevas tus pruebas? ¿Por qué?

  • ¿A quién conoces personalmente que haya sobrellevado fielmente un desafío? ¿Qué hizo esa persona para permanecer fiel? ¿En qué has visto que la gracia del Señor lo ayudó?

  • ¿Qué crees que el Salvador desea que hagas para sobrellevar fielmente tus pruebas?

Miren el video “Alto me eleva” (5:00), disponible en LaIglesiadeJesucristo.org, y busquen lo que podemos hacer para sobrellevar las pruebas fielmente.

  • ¿Qué aprendieron sobre el sobrellevar las pruebas con fe en Jesucristo?

Basándote en lo que aprendiste y sentiste al estudiar 2 Corintios 12 hoy, vuelve a escribir la siguiente declaración para hacerla más adecuada.

Considere escribir la siguiente frase incompleta en la pizarra y pedir a los alumnos que analicen en grupos pequeños cómo la cambiarían. Luego, invite a algunos alumnos a acercarse a la pizarra y volver a escribir la declaración basándose en el análisis de su grupo. Pida a estos alumnos que expliquen a la clase por qué su grupo hizo esos cambios.

“Si oramos con suficiente fe en Jesucristo, el Padre Celestial eliminará cualquier prueba por la que estemos pasando”.

Testifique del amor del Padre Celestial y de Jesucristo, y de la gracia que nos ofrecen a medida que sobrellevamos las pruebas con fe en Ellos. Invite a los alumnos a relatar experiencias acerca de la forma en que Dios los ha bendecido, así como lo que han aprendido al sobrellevar sus pruebas.

Comentarios e información de contexto

¿De qué modo fue el Salvador un ejemplo de las verdades que se enseñan en esta lección?

El presidente Dallin H. Oaks, de la Primera Presidencia, compartió lo siguiente con respecto a Lucas 22:41–44 :

Imagen
Official Portrait of President Dallin H. Oaks taken March 2018.

Aquí podemos ver la fe y confianza absolutas que el Salvador tenía en el Padre. Dijo: “[P]ero no se haga mi voluntad, sino la tuya”. La respuesta del Padre a la súplica de Su Hijo unigénito fue negativa. La Expiación tenía que llevarse a cabo por aquel Cordero sin mancha, pero aunque se negó la súplica del Hijo, se dio respuesta a Su oración. Las Escrituras registran: “Entonces se le apareció un ángel del cielo para fortalecerle” ( Lucas 22:43).

(Véase Dallin H. Oaks, “Fe en el Señor Jesucristo”, Liahona, julio de 1994, pág. 113)

¿Qué nos ofrece el Salvador durante nuestras pruebas?

El presidente Dallin H. Oaks, de la Primera Presidencia, expresó lo siguiente:

Imagen
Official Portrait of President Dallin H. Oaks taken March 2018.

El poder sanador del Señor Jesucristo, ya sea que quite nuestras cargas o nos fortalezca a fin de perseverar y vivir con ellas como lo hizo el apóstol Pablo, está a nuestro alcance para toda aflicción de la vida terrenal.

(Dallin H. Oaks, “Él sana a los que están cargados”, Liahona, noviembre de 2006, pág. 8)

¿Cómo pueden nuestras dificultades ayudarnos a bendecir a quienes nos rodean?

La hermana Reyna I. Aburto, Segunda Consejera de la Presidencia General de la Sociedad de Socorro, enseñó:

Imagen
Official Portrait of Sister Reyna Aburto. Photographed in 2017.

Tus aflicciones no te definen, sino que te pueden refinar. Debido a un “aguijón en [la] carne”, podrías tener la capacidad para sentir más compasión por los demás.

(Reyna I. Aburto, “En sol y sombra, Señor, acompáñame”, Liahona, noviembre de 2019, pág. 58)

¿Pueden los poseedores del sacerdocio sanar a todos los que tienen fe para ser sanados?

El presidente Dallin H. Oaks, de la Primera Presidencia, explicó:

Imagen
Official Portrait of Sister Reyna Aburto. Photographed in 2017.

Aunque el Salvador podía sanar a todos los que quisiera sanar, ese no es el caso de los que poseen la autoridad del sacerdocio. La voluntad de Aquel a quien pertenece el sacerdocio limita el ejercicio de tal autoridad por parte de los mortales. Por lo tanto, se nos indica que algunas personas a las que los élderes dan una bendición no sanan debido a que están “señalad[as] para morir” (véase Doctrina y Convenios 42:48). De manera similar, cuando el apóstol Pablo deseó ser sanado del “aguijón en [la] carne” que lo abofeteaba ( 2 Corintios 12:7), el Señor rehusó curarlo.

(Véase Dallin H. Oaks, “Él sana a los que están cargados”, Liahona, noviembre de 2006, pág. 7)

Actividades de aprendizaje complementarias

Nuestras pruebas pueden refinarnos y pulirnos

Considere mostrar las siguientes ilustraciones o llevar a la clase una piedra áspera y una piedra pulida. Invite a los alumnos a analizar lo que se requiere para que una piedra sea pulida y lisa, y cómo se aplica eso al pulido que nosotros necesitamos en nuestra vida. Invite a los alumnos a meditar sobre por qué, en ocasiones, el Señor permite que suframos pruebas difíciles aun cuando tenemos suficiente fe en Él para ser sanados.

Imagen
A heart shaped rounded edge rock.
Imagen
Stones laid out on a white background.

Fe para no ser sanado

Considere utilizar este relato y estas preguntas de seguimiento para ayudar a los alumnos a comprender que se necesita fe en Jesucristo para aceptar Su voluntad cuando esta es diferente a la nuestra.

El élder David A. Bednar, del Cuórum de los Doce Apóstoles, contó la historia real de un joven fiel que sufría cáncer y la lección que él y otras personas aprendieron acerca de la fe para no ser sanados. Este relato se encuentra en el artículo “Aceptar la voluntad y el tiempo del Señor”, Liahona, agosto de 2016, págs. 17–23.

¿Qué significa para ustedes esta pregunta?: “¿Tienes fe para no ser sanado?”.

¿Cómo se podría relacionar esta pregunta con la situación que describió Pablo en 2 Corintios 12:7–10 ?

¿Hay alguna situación en sus vidas en la que necesiten ejercer fe en Jesucristo aun cuando no reciban una bendición en la forma o en el tiempo que ustedes esperan?

¿Qué saben acerca de Jesucristo que pueda ayudarlos a confiar en Él en estas situaciones?

Imprimir