Jóvenes adultos
Puedes encontrar la libertad
¿Te encuentras tú o alguien que amas atrapado en el ciclo de cometer un error, arrepentirse, comprometerse de nuevo y volver a equivocarse? Muchos jóvenes adultos maravillosos con los que trabajé mientras prestaba servicio como obispo de un barrio de jóvenes adultos solteros estaban atrapados en el mismo ciclo. Sin embargo, muchos también encontraron la libertad mediante la expiación de Jesucristo. Los mensajes acerca de la adicción en la sección de este mes ofrecen una perspectiva útil sobre cómo hallar la libertad, tanto para ti como para otras personas.
Lo más importante que debemos recordar es que todos somos amados hijos del Padre Celestial. El élder Dieter F. Uchtdorf enseñó: “[Dios] no está esperando que superen sus debilidades y malos hábitos para quererl[es]. Él [les] ama hoy mismo, con pleno entendimiento de sus dificultades […]. Él sabe de su remordimiento por los momentos en que fallan o fracasan; pero aun así, Él [les] ama” (“Vivir el Evangelio con gozo”, Liahona, noviembre de 2014, pág. 123; cursiva agregada).
Por otro lado, Satanás tratará de convencerte de que irremediablemente estás exento(a) del amor del Padre Celestial y del poder del Salvador para transformarte y purificarte. Satanás intentará mantenerte atrapado(a) en un torbellino de vergüenza y autodesprecio, pero no creas sus mentiras.
En cambio, acude al Padre Celestial. No tengas miedo de compartir tus sentimientos con tu obispo o presidente de rama y con otras personas que te aman. Al leer los relatos de esperanza de otros jóvenes adultos que se han visto afectados por la adicción, actúa de acuerdo con las impresiones que recibas. Sé paciente contigo mismo(a), recuerda tu naturaleza divina, vive un día a la vez y cree en el poder sanador de Jesucristo. Él y muchos recursos nos ayudarán a encontrar la libertad que deseamos. Nunca te rindas.
Tu amigo,
Richard Ostler