Tengo muchos buenos recuerdos de mi niñez con mi padre. Al juzgar por el gesto que hago en esta foto, puede que este fuera o no uno de esos buenos recuerdos. Aunque no recuerdo todos los detalles sobre este momento con mi padre y mi hermano mayor Neil, el amor que mi papá sentía por sus hijos sigue estando muy claro.
Fue su ejemplo lo que me enseñó lo que significa trabajar arduamente. Se despertaba todos los días a las cuatro de la mañana para conducir un camión de reparto de pan y no regresaba hasta última hora de la tarde. Mis padres tuvieron dificultades económicas, pero nuestra familia siempre tuvo las ricas bendiciones del Evangelio. Nunca tuvimos mucho dinero, pero eso nunca influyó en mi felicidad.
En este Día del Padre, expreso mi gratitud por los padres de todas partes que dan ejemplos de rectitud. El amor, la perseverancia y la dedicación de un padre dejan una impresión duradera en todos nosotros. Al igual que nuestro Padre Celestial, los padres brindan amor y ayuda a quienes los necesitan. Ruego que todos los padres sigan fijándose en Él como el ejemplo principal de todo lo que hacen.