¿Qué tienen en común? ¡Son símbolos!
Los símbolos son cosas sencillas, como colores, objetos y gestos que nos recuerdan ideas más complejas. Nos ayudan a comunicarnos a través de las barreras de los idiomas y a aprender según cuánto estemos listos para entender.
Las Escrituras están llenas de símbolos. Dedicar tiempo a pensar en ellos y estudiarlos puede profundizar nuestro entendimiento e invitar la revelación personal del Espíritu. Aquí tienes cuatro ideas para comprender mejor los símbolos:
- Cuando leas las Escrituras, busca símbolos en relatos, parábolas, sueños y visiones.
- Por ejemplo, Jesús nos invitó a comer y beber para acordarnos de Él.
- Verifica si se explica algún símbolo en otros versículos.
- Por ejemplo, el Salvador explicó que el pan representaba Su cuerpo, que Él dio por nosotros.
- Hazte preguntas sobre los símbolos. ¿Qué características tienen? ¿Cómo se usan? ¿Puedes establecer alguna relación entre ellos y los principios del Evangelio?
- Por ejemplo, el pan nos nutre y puede sostener la vida física, tal como el Salvador es la fuente de la vida eterna.
- Observa cuándo aparecen los mismos símbolos en diferentes lugares. ¿Pueden llevarte a establecer alguna otra relación?
- Por ejemplo, el Salvador una vez hizo un milagro en el que multiplicó el pan en una cantidad suficiente para alimentar a todos (véase Marcos 6). ¿Qué puede enseñarnos esto?
¿Por qué no das un paso más en el estudio de las Escrituras esta semana? Hay un tesoro de revelación reservado para aquellos que hacen un pequeño esfuerzo.
Detective de símbolos
Busca un símbolo en las Escrituras y contesta las preguntas anteriores.
Adaptado de “El siguiente nivel” de la revista Para la Fortaleza de la Juventud de junio de 2023.