La Navidad celebra a Jesucristo.
El propósito de estas fiestas, a pesar de lo que los anuncios publicitarios podrían decirte, es celebrar el nacimiento de Jesucristo.
“Porque un niño nos es nacido, hijo nos es dado”, escribió el profeta Isaías, “y se llamará su nombre Admirable, Consejero, Dios fuerte, Padre eterno, Príncipe de paz” (Isaías 9:6).
Acuérdate de Él, ámalo, ¡síguelo!