Transmisiones anuales
Ancla espiritual


Ancla espiritual

Transmisión anual de SeI de enero de 2024

Viernes 26 de enero de 2024

Mi esposa, Kristi, creció cerca de la costa en el sur de California y siempre le ha encantado el océano. Una de las cosas que más le gusta es ir a ver faros. A pesar de vivir ahora lejos del mar, hemos visitado juntos unos quince faros diferentes y he llegado a saber por qué le gustan tanto. Me conmueve la imagen de un faro que se mantiene firme contra los vientos y las olas porque está anclado de forma tan profunda y firme en el lecho rocoso que, a pesar de las poderosas tormentas, nada puede quitarlo de los cimientos sobre los que está asentado. De manera similar, nuestra esperanza es que nuestros alumnos sean capaces de resistir cualquier tormenta que pueda sobrevenir en sus vidas. Gracias por proporcionarles el ancla espiritual que necesitan y por ayudarlos a edificar sus cimientos sobre Jesucristo.

Gracias a sus increíbles esfuerzos en los dos últimos años, el número de alumnos de Instituto ha aumentado en 57 000, y la inscripción en Seminario ha crecido en 22 000 a pesar de tener menos posibles alumnos. Ahora nos encontramos en el porcentaje más alto de alumnos de Seminario inscritos que jamás hayamos registrado. Gracias por responder a la invitación del presidente Nelson de ayudar a recoger a una generación. Como él enseñó, cada vez que hacemos algo que ayude a alguien […] a hacer y guardar sus convenios con Dios, estamos ayudando a recoger a Israel1. Además del aumento de inscripciones, el año pasado más de 25 000 amigos de otras religiones asistieron a las clases y 9000 de ellos fueron bautizados.

Gracias por sus invitaciones personales, por trabajar con los líderes de la Iglesia y con los padres, y por alentar a sus alumnos a invitar a sus amigos. Lo que están haciendo está marcando una diferencia notable y no solo en el número de inscripciones. La verdadera diferencia está en el impacto que están teniendo. Cada día, hay vidas que están cambiando cuando asisten a sus clases, cuando sienten su amor y fe y cuando aceptan su invitación a estudiar las Escrituras y escuchar la voz de Dios. Gracias por ejercer su fe para bendecir a más y más hijos del Padre Celestial al proporcionarles el ancla espiritual que tanto necesitan.

En un esfuerzo por continuar explorando más y mejores formas de bendecir a nuestros alumnos, hace unos años probamos un nuevo curso en Seminario. Durante un semestre enseñamos a los alumnos de primer año de Seminario una versión revisada del curso de Instituto “Principios básicos del estudio de las Escrituras”. Al cabo de un semestre, los alumnos de esas clases superaban a sus compañeros en cuanto a su capacidad de llevar a cabo un estudio personal significativo de las Escrituras y de participar en los análisis de clase. Más o menos al mismo tiempo, un programa llamado “Éxito en la escuela” estaba obteniendo un resultado notable ayudando a los alumnos a mejorar en la escuela y a estar más preparados para futuras oportunidades educativas. Ambas experiencias llamaron la atención del élder Gilbert y comenzó a alentarnos encarecidamente que consideremos lo que el Señor nos estaba enseñando.

Mientras esto sucedía, se iniciaron conversaciones con miembros del Departamento Misional sobre qué más podría hacer Seminario para ayudar a preparar a los futuros misioneros. Asimismo, se mantuvieron conversaciones con miembros del Departamento de Templos sobre cómo ayudar a quienes asistían por primera vez al templo a tener una experiencia significativa y a comprender los convenios que harían. Otras personas hablaron con miembros del Departamento de Servicios de Bienestar y Autosuficiencia sobre cómo ayudar a satisfacer la creciente necesidad de resiliencia emocional y autosuficiencia. Al mismo tiempo, se analizaba un anhelo que muchos habían tenido por un largo tiempo de centrarse más en las enseñanzas de los profetas modernos.

Como afluentes que desembocan en un río, confluían muchas ideas que parecían guiarnos a la misma dirección. Al considerar las posibilidades, nos dimos cuenta de que Seminario se encuentra en una posición única. Otras buenas personas, como los consejeros escolares o los terapeutas familiares, pueden ayudar a tratar temas de necesidad y pueden ser muy útiles, pero nosotros somos únicos en nuestra capacidad de tratar esos temas desde la óptica del Evangelio restaurado de Jesucristo. También nos dimos cuenta de que somos únicos, incluso dentro de la Iglesia, sencillamente por la cantidad de tiempo que pasamos con nuestros jóvenes cada semana.

Nos encontramos también en una posición única dentro de nuestra propia historia. Desde que alineamos nuestro programa con Ven, sígueme, estamos ahora estudiando el mismo libro de Escrituras que los miembros, las familias y las otras clases de la Iglesia. Esto nos hizo preguntarnos si podríamos liberar parte de nuestro valioso tiempo para tratar directamente temas específicos dentro del contexto de nuestro estudio de las Escrituras. Con todos estos afluentes manando hacia nuestro río de pensamiento, seguimos aferrándonos a algunas ideas fundamentales. Nos comprometemos a estar siempre centrados en Cristo, basados en las Escrituras y enfocados en el alumno. Siempre nos esforzaremos por invitar al Espíritu Santo y nos centraremos en nuestro objetivo de profundizar la conversión a Jesucristo y a Su Evangelio restaurado.

Mientras considerábamos con espíritu de oración lo que todo esto tenía que ver con nuestros esfuerzos por bendecir a los jóvenes, recordamos que el élder David A. Bednar había enseñado el valor de estudiar las Escrituras de tres maneras: de forma consecutiva, por temas y buscando patrones en los temas. Él enseñó:

“El leer un libro de Escritura de principio a fin inicia el flujo del agua viva en nuestra vida al exponernos a relatos y doctrina del Evangelio importantes y a principios eternos […].

“El estudiar por temas aumenta la profundidad de nuestro conocimiento”.

El élder Bednar añadió:

“El escudriñar diligentemente para descubrir conexiones, modelos y temas es, en parte, lo que significa “deleitarse” en las palabras de Cristo. Este método puede abrir las compuertas de la reserva espiritual, iluminar nuestra comprensión mediante Su Espíritu y producir una profunda gratitud por las Santas Escrituras y un nivel de compromiso espiritual que no puede recibirse de otra manera. El escudriñar nos permite edificar sobre la roca de nuestro Redentor y resistir los vientos de la iniquidad en estos últimos días”2.

Sabiendo que necesitábamos mantenernos fieles a nuestra larga y apreciada historia de enseñanza secuencial de las Escrituras y continuar beneficiándonos de nuestra alineación con Ven, sígueme, y sabiendo también que nuestros jóvenes tienen desafíos específicos y la necesidad de prepararse para su futuro, llevamos la siguiente recomendación a la Mesa Directiva de Educación. Ahora leo de las actas de la Mesa Directiva.

“[La Administración de Seminarios e Institutos de Religión] recomendó crear un curso de estudios de Seminario que enseñe el enfoque secuencial de Ven, sígueme de las Escrituras tres o cuatro días a la semana, y lecciones temáticas una o dos veces a la semana (desarrolladas a partir de temas tales como la preparación para la misión, el templo y la formación académica; técnicas de estudio de las Escrituras; la resiliencia emocional; habilidades para la vida; y enseñanzas de los profetas de los últimos días). Las lecciones temáticas también se basarían en las Escrituras y se centrarían en los principios del Evangelio restaurado de Jesucristo”.

La recomendación fue aprobada con entusiasmo para ser implementada a nivel mundial a partir de enero de 2025.

Tengan en cuenta que cada semana continuaremos enseñando las Escrituras secuencialmente. Es imperativo que continuemos ayudando a nuestros alumnos a tener confianza en su capacidad de estudiar y entender las Escrituras y de conocer y vivir los principios que estas enseñan. También seguiremos ayudando a los jóvenes a encontrar respuestas a sus preguntas mediante los principios de adquirir conocimiento espiritual y a obtener los beneficios del dominio de la doctrina. Además, se añadirán al nuevo curso de estudios nuevas lecciones temáticas, denominadas “lecciones de preparación para la vida”. Estas lecciones tratarán necesidades específicas de nuestros alumnos de Seminario de manera que sigan estando centradas en Cristo, basadas en las Escrituras y enfocadas en el alumno.

Estas lecciones les permitirán a ustedes hacer uso de las habilidades, experiencias y dones que han utilizado como maestros de estudio secuencial de las Escrituras. Esto no es empezar de nuevo. No les pedimos que sean expertos en ninguno de estos temas nuevos. De hecho, esperamos que ninguno de ustedes asuma la función de padre o terapeuta, consejero o especialista. Sencillamente les pedimos que permanezcan firmemente arraigados en las enseñanzas de Jesucristo, tal como se exponen en estos nuevos materiales correlacionados y aprobados.

Para ayudarlos a prepararse para el 2025, se les enviarán nuevos materiales en julio de 2024, que incluirán tanto las lecciones de Ven, sígueme como las de preparación para la vida. Los invitamos a que revisen estas lecciones en ese momento y también a que empiecen a difundir este anuncio entre los padres, los líderes locales y las autoridades escolares para ayudar a animar a más jóvenes a inscribirse en Seminario. Al combinar los enfoques del estudio secuencial y temático de las Escrituras, esperamos abrir una reserva espiritual como nunca antes hemos visto.

Nuestra esperanza es ayudar a preparar una generación de jóvenes que sepa estudiar las Escrituras y se sienta compenetrada con las enseñanzas de los profetas vivientes; una generación de jóvenes emocionalmente resilientes que tengan las habilidades y la capacidad para alcanzar el éxito en la escuela y convertirse en padres y madres rectos, y que lideren en la Iglesia y en sus comunidades. Nuestra esperanza es ayudar a una generación a estar preparada para comprender los convenios del templo, que esté profundamente comprometida a guardarlos y una generación de misioneros que sean dignos, competentes, llenos de energía espiritual y preparados para representar al Salvador al invitar al mundo a venir a Él.

Nuestra esperanza es preparar una generación de discípulos de Jesucristo que se conviertan profundamente a Él y a Su Evangelio restaurado durante toda su vida. Gracias de nuevo por recoger a una generación y por el notable impacto que tienen sobre ella. Sabemos que se les pide mucho. Gracias por todo lo que están haciendo tan maravillosamente bien. A medida que sigan ejerciendo su fe, creo que verán milagros, que el Señor está listo para fortalecer y proteger a nuestros alumnos y hacer frente a las tormentas de estos últimos días. El Señor continuará ayudándolos. Eso es lo Él que hace; eso es lo que Él es. Doy testimonio de Él en el sagrado nombre de Jesucristo. Amén.

Notas

  1. Véase Russell M. Nelson y Wendy W. Nelson, “Juventud de Israel”, devocional mundial para jóvenes, 3 de junio de 2018, Biblioteca del Evangelio.

  2. David A. Bednar, “Una reserva de agua viva”, devocionales del SEI, 4 de febrero de 2007, págs. 2–3. https://www.churchofjesuschrist.org/broadcasts/archive/ces-devotionals/2007/01?lang=spa

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