“Alma 39: ‘Abstente de estas cosas’”, El Libro de Mormón: Manual del maestro, 2024
“Alma 39”, El Libro de Mormón: Manual del maestro
Alma 39
“Abstente de estas cosas”
A lo largo del tiempo, Satanás ha conducido a muchas personas a creer que las relaciones sexuales fuera del matrimonio son aceptables. El Padre Celestial y Jesucristo nos han dado la ley de castidad para nuestra protección, paz y felicidad. El profeta Alma aconsejó con amor a su hijo Coriantón que abandonara sus pecados y se arrepintiera de ellos, los cuales incluían la violación de la ley de castidad. Esta lección puede ayudarte a comprender la gravedad del pecado sexual y cómo puedes resistir la tentación de quebrantar la ley de castidad.
Algunas posibles actividades de aprendizaje
La ley de castidad
Lee los enunciados que se encuentran a continuación y determina cuál de las opciones siguientes representa mejor tus sentimientos:
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En desacuerdo
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Mayormente en desacuerdo
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Mayormente de acuerdo
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De acuerdo
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Los jóvenes de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días comprenden claramente la ley de castidad, o ley del Señor sobre la pureza sexual.
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Comprenden por qué es importante y por qué el Señor desea que la vivamos.
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Puede resultar difícil guardar la ley de castidad en el mundo actual.
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Los jóvenes de la Iglesia saben cómo resistir la tentación y mantenerse sexualmente puros.
La ley de castidad es la ley del Señor en cuanto a la pureza sexual. Obedecer la ley de castidad significa mantenerse limpio en pensamientos, palabras y acciones, lo cual incluye permanecer alejado de todo tipo de pornografía. También significa evitar las relaciones sexuales antes del matrimonio y ser completamente fiel a la esposa o el esposo durante el matrimonio. “Tal como otras transgresiones de la ley de castidad, las actividades homosexuales son un pecado grave; son contrarias a los propósitos de la sexualidad humana” (Temas del Evangelio, “Castidad”, topics.ChurchofJesusChrist.org).
Dedica un momento a meditar sobre tu comprensión y tus sentimientos acerca de la ley de castidad. ¿Qué preguntas tienes? ¿Por qué es importante para ti? ¿Qué tentaciones relacionadas con la castidad afrontas? Al estudiar esta lección, busca respuestas a tus preguntas y ayuda para vencer las tentaciones.
Alma aconseja a su hijo Coriantón
Alma 39 es el primero de cuatro capítulos que contienen consejos, mandamientos y enseñanzas de Alma a su hijo Coriantón, quien había acompañado a su padre y a su hermano Shiblón a predicar el Evangelio entre los zoramitas. Sin embargo, durante esa misión, Coriantón cometió pecados graves.
Lee Alma 39:1–5 y busca los errores que cometió Coriantón y cómo se sentían Alma y el Señor al respecto. (La palabra ramera en el versículo 3 se refiere a una mujer inmoral o una prostituta).
Para ayudarte a meditar sobre por qué el quebrantar la ley de castidad es “penoso” para un padre y un profeta (Alma 39:3), así como una “abominación a los ojos del Señor” (Alma 39:5), puede resultar útil comprender las bendiciones que recibimos al guardar esta ley. Lee acerca de las bendiciones y el poder que esta ley proporciona en la sección “Vivir la ley de castidad trae la aprobación de Dios y brinda poder espiritual personal”, en la página 26 de Para la Fortaleza de la Juventud: Una guía para tomar decisiones, librito, 2022.
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¿De qué manera el guardar la ley de castidad nos prepara para recibir grandes bendiciones del Señor en esta vida y en la vida venidera?
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¿Qué sucederá si una persona no se arrepiente del pecado sexual? (Alma 39:7–9)
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¿Qué consecuencia de quebrantar la ley de castidad a menudo se pasa por alto? (Alma 39:11–13)
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A partir de lo que aprendiste, ¿por qué un padre o una madre, un profeta y el Señor podrían tener sentimientos tan fuertes en cuanto a la castidad?
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¿Cómo demuestra la ley de castidad el amor de Dios por Sus hijos?
“No te dej[es] llevar más por las concupiscencias de tus ojos”
Además de enseñar a su hijo acerca de la gravedad del pecado sexual, Alma también enseñó a Coriantón cómo evitar cometer los mismos errores en el futuro.
Repasa Alma 39:9 y Alma 39:13, y busca palabras o frases que puedan ayudarte a resistir la tentación y a guardar la ley de castidad. (Las palabras “te refrenaras” que se encuentran en el versículo 9 se refieren a ejercer autocontrol o autodominio).
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¿Qué principio enseñó Alma a Coriantón en estos versículos?
Un posible principio de estos versículos es el siguiente: Al ejercer autocontrol y acudir al Señor, podemos vencer la tentación de violar la ley de castidad de Dios.
A veces puede resultar difícil ejercer autocontrol y acudir al Señor para vencer la tentación. Puede ser útil pensar en diversas maneras de hacer esto y luego seguir las impresiones del Espíritu en cuanto a lo que te resultaría más útil.
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Lee el resto de los consejos sobre la pureza sexual que se encuentran en Para la Fortaleza de la Juventud: Una guía para tomar decisiones (consulta “pureza sexual” en la sección “¿Y qué hay acerca de…?”). Para obtener consejos adicionales de los miembros del Cuórum de los Doce Apóstoles, podrías leer “La pureza personal” (Jeffrey R. Holland, Liahona, enero de 1999, págs. 89–92) o “Creemos en ser castos” (David A Bednar, Liahona, mayo de 2013, págs. 41–44).
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Busca pasajes de las Escrituras que creas que pueden fortalecerte contra las tentaciones de quebrantar la ley de castidad. También puedes anotar himnos o canciones de la Primaria a los que podrías querer acudir en busca de fortaleza cuando seas tentado.
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Anota las maneras en que podrías esforzarte por “v[olverte] al Señor” con tu “mente, poder y fuerza” (Alma 39:13). Incluye lo que hayas hecho en el pasado que consideras que te ha fortalecido.
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Escribe los consejos que hayas recibido de tus padres y de los líderes de la Iglesia que podrían ayudarte contra la tentación.
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Mira el video “La castidad: ¿Cuáles son los límites?” (3:59), que se encuentra disponible en LaIglesiadeJesucristo.org.
Reflexión personal
Dedica un momento a meditar sobre por qué deseas mantenerte sexualmente puro y luego escribe los pasos que darás para obedecer continuamente la ley de castidad del Señor. Piensa en lo que el Espíritu Santo tal vez te haya inspirado a hacer y anota cualquier otra idea en tu diario de estudio. Si tú o alguien a quien conozcas han quebrantado la ley de castidad, recuerda que Jesucristo ha venido “a quitar los pecados del mundo” (Alma 39:15) y perdonará a todos los que se arrepientan sinceramente y abandonen sus pecados (véanse Mosíah 26:30, Alma 39:9).