Seminario
3 Nefi 23: Escudriñar las Escrituras diligentemente


“3 Nefi 23: Escudriñar las Escrituras diligentemente”, El Libro de Mormón: Manual del maestro, 2024

“3 Nefi 23”, El Libro de Mormón: Manual del maestro

3 Nefi 23

Escudriñar las Escrituras diligentemente

Cristo y el pueblo del continente americano mirando las planchas de oro

¿Cómo te está yendo con tu estudio personal de las Escrituras? ¿Qué diferencia marca esto en tu vida? En 3 Nefi 23, Jesús hizo hincapié en la importancia de preservar y estudiar las Escrituras y las palabras de los profetas. El objetivo de esta lección es ayudarte a estudiar las palabras del Señor con más diligencia.

Ayudar a los alumnos a desarrollar técnicas de estudio. A fin de ayudar a los alumnos a obtener mejores resultados al estudiar las Escrituras, ayúdelos a desarrollar una variedad de técnicas de estudio de las Escrituras. Estas técnicas deben tener como objetivo ayudar a los alumnos a invitar al Espíritu a su estudio, a comprender mejor las Escrituras y a descubrir y poner en práctica la doctrina y los principios del Evangelio.

Preparación del alumno: Invite a los alumnos a dedicar tiempo a estudiar las Escrituras antes de esta lección, prestando atención en particular a lo que hacen para que su estudio sea más significativo. Aliéntelos a estimar el valor y la calidad de su estudio y la influencia que está teniendo o no en su vida.

Algunas posibles actividades de aprendizaje

Tu estudio personal de las Escrituras

Antes de la clase, podría ocultar varios objetos por todo el salón. Escriba la palabra “búsqueda” en la pizarra. Diga a los alumnos lo que deben buscar e invítelos a encontrar tantos objetos como sea posible.

  • ¿Qué significa buscar o escudriñar?

  • ¿Qué resulta interesante o emocionante cuando se busca o escudriñar algo?

  • ¿Qué puede resultar difícil o desalentador al respecto?

La invitación del Salvador

Lee 3 Nefi 23:1–5 para saber lo que el Salvador nos mandó escudriñar y por qué.

Invite a los alumnos a hablar sobre lo que encontraron.

En los capítulos anteriores, el Salvador citó gran parte de Isaías para ayudar y bendecir a los nefitas (véanse 3 Nefi 16:18–20; 20:32, 34–45; 21:8; 22:1–17).

  • ¿Qué razones dio el Señor para que escudriñemos las palabras de Isaías? (véase 3 Nefi 23:1–3).

    Si lo desea, dediquen un tiempo de la clase a analizar el valor de las enseñanzas de Isaías. Por ejemplo, podría pedir a los alumnos que hablen de lo que sienten por las palabras de Isaías. Podrían leer y reflexionar sobre los versículos de Isaías y pensar en la razón por la que es valioso estudiarlos. Por ejemplo, podrían leer Isaías 7:14; 9:6–7; 41:10; 49:13–16; 53:1–5; 55:1–3; 61:1–3.

  • Según 3 Nefi 23:5, ¿por qué debemos escuchar las palabras del Señor y las palabras de los profetas?

Escuche atentamente las respuestas de los alumnos y, si lo desea, escríbalas en la pizarra.

Uno de los principios importantes que aprendemos en esta lección es el siguiente: El Salvador nos manda que escuchemos Sus palabras y escudriñemos diligentemente las palabras de los profetas.

  • ¿Qué crees que significa escudriñar las Escrituras diligentemente?

Dedica un minuto a reflexionar sobre cómo estudias las Escrituras; esto puede incluir el estudio personal y familiar, así como el estudio en las reuniones de la Iglesia y en Seminario. ¿Crees que escudriñas las Escrituras diligentemente? ¿Por qué sí o por qué no?

  • ¿Cuáles son algunas de las razones por las que podría ser difícil escudriñar las Escrituras diligentemente?

    A medida que los alumnos compartan sus respuestas, podría anotarlas en un lado de la pizarra. Si lo considera oportuno, podría referirse a la actividad de búsqueda que se encuentra al comienzo de la lección. A fin de pensar en posibles dificultades, los alumnos podrían comparar el escudriñar o buscar en las Escrituras con la búsqueda de los objetos de la actividad.

    Una respuesta podría ser que puede resultar difícil dedicar tiempo a escudriñar las Escrituras cuando sentimos que no encontramos nada significativo, o bien, que puede resultar difícil comprenderlas o ser aburrido. Una de las mejores maneras de superar muchas de estas dificultades es saber cómo encontrar perspectivas o verdades que puedan ayudarnos con nuestra vida.

  • A pesar de estas dificultades, ¿cuáles son algunas de las cosas que has hecho o podrías hacer para tener una experiencia de estudio de las Escrituras significativa?

A medida que los alumnos respondan, haga una lista en el otro lado de la pizarra. Si lo considera útil, agregue cualquiera de los ejemplos siguientes.

A continuación se dan algunos ejemplos:

  • Ora antes de estudiar.

  • Marca las palabras y frases importantes, especialmente las que te ayuden a conocer mejor al Salvador.

  • Busca palabras o frases que sean difíciles de comprender.

  • Haz una pausa y resume lo que has leído.

  • Utiliza pasajes correlacionados para comprender mejor un tema o una doctrina.

Cristo hablando con Nefi acerca de los anales

Para practicar dos de estas técnicas, lee 3 Nefi 23:6–14 y haz lo siguiente:

  • Resume con tus propias palabras lo que leíste.

  • Marca cualquier palabra o frase que te ayude a comprender mejor al Salvador.

    Invite a los alumnos a hablar sobre lo que encontraron. Para ello, podrían trabajar de dos en dos. Un alumno podría resumir los versículos y el otro alumno podría señalar palabras o frases que lo ayuden a comprender al Salvador.

    Si los alumnos tienen dificultades para resumir lo que leyeron, podría explicar que el Salvador pidió ver los anales nefitas. Señaló que la profecía de Samuel en cuanto a los santos resucitados que se aparecerían a muchos (véase Helamán 14:25) se había cumplido, pero el cumplimiento no estaba en los anales. El Salvador mandó a los nefitas que registraran ese relato.

  • ¿Qué palabras manifiestan que al Salvador le importa lo que está registrado en las Escrituras?

  • ¿De qué manera el saber esto acerca del Salvador podría influir en la forma en que estudias las Escrituras?

Practicar el estudio eficaz de las Escrituras

Dedica unos minutos a practicar escudriñar las Escrituras diligentemente. Podrías optar por estudiar un capítulo o buscar versículos sobre un tema del que quieras saber más. Utiliza al menos una técnica de estudio de las Escrituras que se te haya ocurrido o que hayas descubierto en la lista anterior.

Conceda a los alumnos tiempo suficiente para que lean y reflexionen. Invite a los alumnos a compartir algo que hayan estudiado que les parezca significativo y las técnicas que usaron. Las preguntas siguientes tienen el objetivo de ayudar con un análisis.

  • ¿Qué método de estudio utilizaste? ¿Por qué podría ayudarte este método a estudiar más diligentemente?

  • ¿Qué aprendiste acerca del Salvador que no habías comprendido antes?

  • ¿Cuáles de estas técnicas podrías implementar en tu estudio de las Escrituras en el futuro? ¿Cómo lo harás?

Durante la próxima semana, reflexiona sobre lo que has aprendido hoy. Elige una manera en la que puedes esforzarte por escudriñar las Escrituras más diligentemente y piensa en cómo eso puede ayudarte en la vida.