13 – 19 diciembre

La Familia: Una Proclamación para el Mundo

“La familia es fundamental en el plan del Creador”

Al estudiar “La Familia: Una Proclamación para el Mundo” esta semana, piense en las verdades que apoyarán a los miembros de la clase en sus esfuerzos por fortalecer sus hogares y familias.

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Invitar a compartir

A fin de alentar a los miembros de la clase a compartir lo que han aprendido esta semana al estudiar la proclamación sobre la familia, podría pedirles que escojan algún párrafo y que resuman en una oración lo que este enseña.

Enseñar la doctrina

“La familia es fundamental en el plan del Creador”.

• A la Iglesia se la conoce por el énfasis que pone en la familia, y la proclamación revela las razones doctrinales de tal énfasis. Para fomentar el análisis sobre ello, quizá desee invitar a los miembros de la clase a imaginar que alguien les ha preguntado por qué la Iglesia hace tanto hincapié en la familia. ¿Qué verdades presentes en la proclamación podríamos compartir para responder esa pregunta?

• Una de las razones por las que la proclamación sobre la familia es tan importante es que reafirma las verdades que se hallan bajo ataque en nuestros días. ¿Qué verdades de la proclamación nos ayudan a no ser engañados por las ideas falsas sobre la familia que hay el mundo actual? ¿De qué forma tales verdades influyen en las decisiones que tomamos? La cita del presidente Dallin H. Oaks que se encuentra en “Recursos adicionales” podría resultar útil para contestar esa pregunta.

  

  Los padres deben criar a sus hijos con amor y rectitud.

“La felicidad en la vida familiar tiene mayor probabilidad de lograrse cuando se basa en las enseñanzas del Señor Jesucristo”.

• Tratar los principios de los párrafos seis y siete de la proclamación sobre la familia podría ayudar a los miembros de la clase a hallar mayor felicidad en sus relaciones familiares. Si lo desea, escriba los principios en la pizarra e invite a la clase a escoger un principio para analizarlo en grupos de dos personas. Podrían usar preguntas como estas para guiar el análisis: ¿Qué ejemplos de este principio hemos observado en la vida familiar? ¿De qué manera el vivir ese principio conduce a la felicidad en nuestra familia? ¿De qué modo el vivir ese principio contribuye a hacer que el Salvador sea el fundamento de nuestra vida familiar? ¿Qué pasajes de las Escrituras podrían ayudar a nuestras familias a entender mejor ese principio? (Los miembros de la clase podrían buscar pasajes de las Escrituras valiéndose de la Guía para el Estudio de las Escrituras [scriptures.ChurchofJesusChrist.org]). Después, cada grupo podría compartir con la clase lo que hayan aprendido.

  Haga hincapié en que, independientemente de nuestras circunstancias familiares actuales, podemos esforzarnos por edificar una familia eterna sobre el fundamento del Salvador y Su evangelio.

“Hacemos un llamado a los ciudadanos responsables […] para que fomenten aquellas medidas designadas a fortalecer a la familia y a mantenerla”.

• ¿Cómo puede ayudar a los miembros de la clase a comprender su responsabilidad de apoyar las verdades que contiene la proclamación sobre la familia? Para comenzar el análisis, podrían tratar lo que se aprende del título de la proclamación. ¿Qué es una proclamación? ¿Qué facultó a La Primera Presidencia y al Cuórum de los Doce Apóstoles a promulgar una proclamación para el mundo concerniente a la familia? Los miembros de la clase podrían mencionar lo que consideren que son los mensajes principales de la proclamación (ínstelos a citar pasajes específicos). Luego podrían hablar sobre las maneras de fomentar esos mensajes en su comunidad o nación. El mensaje de la hermana Bonnie L. Oscarson “Defensoras de la Proclamación sobre la Familia” contiene ejemplos que podrían repasar juntos como clase (Liahona, mayo de 2015, págs. 14–17). También podrían ver el video “Defensores de la fe” (ChurchofJesusChrist.org).

Recursos adicionales

Las familias en el plan de Dios.

El presidente Dallin H. Oaks enseñó:

“Los Santos de los Últimos Días que comprenden el Plan de Salvación tienen un punto de vista único acerca del mundo que les ayuda a ver la razón de los mandamientos de Dios, la naturaleza inalterable de Sus ordenanzas requeridas y el rol fundamental de nuestro Salvador Jesucristo. La expiación de nuestro Salvador nos recupera tras la muerte y, de acuerdo con nuestro arrepentimiento, nos salva del pecado. Con ese punto de vista del mundo, los Santos de los Últimos Días tienen prioridades y prácticas específicas y son bendecidos con la fortaleza para aguantar las frustraciones y los pesares de la vida terrenal […].

“El plan del Evangelio que cada familia debería seguir para prepararse para la vida eterna y la exaltación se encuentra delineado en la proclamación de la Iglesia de 1995: ‘La Familia: Una Proclamación para el Mundo’. Por supuesto, sus declaraciones son visiblemente diferentes de algunas leyes, prácticas y posturas actuales que se defienden en el mundo en que vivimos. En nuestros días, las diferencias más evidentes son la cohabitación sin el matrimonio, el matrimonio entre personas del mismo sexo, y el criar hijos cuando se es parte de tales relaciones. Aquellos que no creen en la exaltación o no aspiran a ella, y que son a los que más persuaden las maneras del mundo, consideran que esta proclamación sobre la familia es tan solo una declaración de normas que se debería cambiar. Por el contrario, los Santos de los Últimos Días afirman que la proclamación sobre la familia define el tipo de relaciones familiares donde la parte más importante de nuestro desarrollo eterno se puede dar” (“El plan y la proclamación” Liahona, noviembre de 2017, pág. 29).

Cómo mejorar nuestra enseñanza

Viva el Evangelio de todo corazón. “El poder se recibe cuando el maestro ha hecho todo lo posible por prepararse, no solo para cada lección, sino para mantener su vida en sintonía con el Espíritu” (Boyd K. Packer, Teach Ye Diligently, 1975, pág. 306).