“3 – 9 julio. Hechos 1–5: ‘Me seréis testigos’”, Ven, sígueme — Para la Escuela Dominical: Nuevo Testamento 2023 (2022)
“3 – 9 julio. Hechos 1–5”, Ven, sígueme — Para la Escuela Dominical: 2023
3 – 9 julio
Hechos 1–5
“Me seréis testigos”
Si lee Hechos 1–5 y busca la guía del Espíritu, recibirá inspiración para saber qué verdades de esos capítulos ayudarán a los miembros de la clase a confiar más plenamente en el Espíritu Santo y a ser testigos fieles del Señor Jesucristo.
Invitar a compartir
En Hechos 1–5 se encuentran varios pasajes y principios significativos. Una buena manera de averiguar cuáles son de más valor y relevancia para los miembros de su clase consiste en dejar que ellos le digan qué les llamó la atención al estudiarlos. ¿Cómo los invitará a que expresen lo que sintieron? Podría ser tan sencillo como concederles algunos minutos para que busquen y compartan un versículo de Hechos 1–5 en el cual hayan sentido que la voz del Señor les hablaba.
Enseñar la doctrina
Hechos 1:1–8; 2:37–39; 4:1–13, 31–33
Jesucristo dirige Su Iglesia por medio del Espíritu Santo
-
La lectura de las experiencias de los apóstoles podría ayudar a los miembros de la clase a ver la manera en que pueden recibir poder y guía del Espíritu Santo en sus llamamientos y asignaciones de la Iglesia. Una de las maneras de repasar las experiencias que se encuentran en Hechos 1–5 sería escribir en la pizarra: Maneras en que el Espíritu Santo ayudó a los apóstoles a dirigir la Iglesia: y luego invitar a los miembros de la clase a que escudriñen Hechos 1:1–8; 2:37–39 y 4:1–13, 31–33, buscando maneras de finalizar el enunciado. Después, ellos podrían contar experiencias en las que el Espíritu Santo los haya ayudado de alguna de esas maneras. ¿Por qué los apóstoles necesitaban al Espíritu Santo y por qué lo necesitamos nosotros?
Los apóstoles de Jesucristo son llamados por Dios por medio de la revelación
-
Considere invitar a los miembros de la clase a que expliquen la forma en que una empresa selecciona a un reemplazo para que ocupe un puesto ejecutivo. ¿Qué requisitos tendría que llenar la persona? Pida a los miembros de la clase que contrasten ese proceso con la manera en que se llamó a Matías (véase Hechos 1:15–26; véase también 1 Samuel 16:1–13) y con las palabras del presidente Gordon B. Hinckley que se encuentran en “Recursos adicionales”, donde describe la forma en que los apóstoles son llamados en la actualidad. El método que Dios sigue para escoger líderes, ¿de qué modo influye en la fe que tenemos en quienes Él ha llamado? Los miembros de la clase podrían hablar de la forma en que han adquirido un testimonio de que los apóstoles y profetas de la actualidad son llamados por Él.
El Espíritu Santo nos inspira a actuar conforme a lo que aprendemos
-
A medida que los miembros de la clase estudien las Escrituras en casa y juntos en clase cada semana, podrían a menudo sentirse “compungi[dos] de corazón” (Hechos 2:37). Quizás usted sienta la inspiración de ayudarles a ir un poco más lejos al preguntar: “¿[Q]ué haremos?” (Hechos 2:37). Lean juntos Hechos 2:37–47 e invite a los miembros de la clase a buscar las cosas que ese grupo de 3000 personas hizo como resultado de la invitación hecha por Pedro. Tal vez ellos podrían hablar de la manera en que han actuado conforme a la inspiración que han recibido de su estudio de la palabra de Dios. Si lo desea, podría dejar tiempo al final de la clase para que cada persona se pregunte a sí misma: “¿Qué haré?” y anote sus impresiones.
Cuando estamos llenos del Espíritu Santo, podemos compartir el Evangelio con valentía
-
Los miembros de la clase podrían repasar Hechos 3; 4:1–21; 5:12–42 en busca de ejemplos de cuando Pedro testificó con osadía. O bien, podrían ver uno de los siguientes videos: “Pedro predica y es arrestado”, “Pedro y Juan son juzgados” o “Pedro y Juan continúan predicando el Evangelio” (LaIglesiadeJesucristo.org). ¿Qué significa hablar “la palabra de Dios con osadía”? (Hechos 4:31). ¿Cómo nos ayuda el Espíritu Santo a compartir el Evangelio con osadía? ¿En qué difiere ese tipo de osadía de ser una persona contenciosa? Los miembros de la clase podrían tener experiencias que contar en las que ellos, o alguien que conozcan, hayan defendido el Evangelio o testificado de él con osadía.
Recursos adicionales
El llamamiento de un miembro de los Doce Apóstoles
Gordon B. Hinckley compartió las siguientes reflexiones en cuanto al proceso para llamar a un nuevo Apóstol: “… Este procedimiento es particular de la Iglesia del Señor. No se buscan los cargos, no se maniobra para obtener posiciones, no se hacen campañas para proclamar las virtudes del candidato. Comparen lo que hace el Señor con lo que hace el mundo; lo que hace el Señor es sencillo, pacífico y sin ostentación ni costos monetarios; no hay en ello egoísmo, vanidad ni ambición. En el plan del Señor, los que tienen la responsabilidad de seleccionar a los oficiales se rigen por una pregunta principal: ‘¿A quién quiere el Señor en este llamamiento?’. Hay deliberaciones calmadas y reflexivas; y se ora mucho para recibir la confirmación del Santo Espíritu de que la elección es correcta” (véase “La obra sigue adelante”, Liahona, julio de 1994, págs. 64–65).