Montaña de Egipto que tradicionalmente se cree que sea el monte Sinaí

18 – 24 abril

Éxodo 18–20

“Todo lo que Jehová ha dicho haremos”

Lea Éxodo 18–20 y anote las impresiones que reciba sobre cómo ayudar a los miembros de la clase a aprender de estos capítulos. Hasta las impresiones sencillas pueden llevarnos a tener experiencias de aprendizaje significativas.

Anote sus impresiones

Invitar a compartir

A fin de invitar a los miembros de la clase a que compartan lo que hayan aprendido, podría escribir en la pizarra 18, 19 y 20, que son los capítulos de Éxodo que leyeron esta semana. Pídales que escriban junto al número de cada capítulo el número de los versículos que les gustaría analizar de ese capítulo. Conforme vayan compartiendo sus impresiones, pregunte a otros si tienen algo que decir sobre los mismos pasajes.

Enseñar la doctrina

Éxodo 18:13–26

Podemos ayudar a “llevar la carga” de hacer la obra de Dios.

• Usted podría animar a los miembros de la clase a que analicen el consejo que Jetro dio a Moisés (véase Éxodo 18:13–26). Para ello, pídales que se imaginen que están teniendo una conversación con alguien que siente que su llamamiento en la Iglesia, las obligaciones familiares y otras responsabilidades son “demasiado pesada[s]” y que “desfallecer[á] del todo” (Éxodo 18:18). ¿Cómo podría ser de ayuda el consejo que se encuentra en Éxodo 18:13–26? ¿Qué otros consejos podríamos compartir de nuestras experiencias personales?

• Hablar de lo que se dice en Éxodo 18:13–26 podría ofrecer una oportunidad de analizar la manera en que la ministración nos permite ayudar a “llevar la carga” junto con nuestros líderes en la obra del Señor (Éxodo 18:22). ¿Qué cualidades le sugirió Jetro a Moisés que buscara entre los hombres que servirían como “jefes” del pueblo? (véase Éxodo 18:21). ¿Por qué son importantes esas cualidades en nuestros empeños por ministrarnos los unos a los otros? ¿En qué forma el ministrar a nuestros familiares, a los miembros de la Iglesia y a otras personas contribuye a “llevar la carga” de nuestros líderes de la Iglesia? Como parte del análisis, podría mostrar uno de los videos relacionados con el tema que se encuentran en ministering.ChurchofJesusChrist.org .

  

  Ministrar a los demás es una de las maneras en que podemos participar en la obra del Señor.

Éxodo 20:2–11

Debemos colocar al Señor en primer lugar en nuestra vida.

• ¿Se le ocurre alguna tarea que se hace mejor si primero se realizan los pasos más importantes? (Algunos ejemplos podrían ser resolver una ecuación o seguir una receta). Comparta con los miembros de la clase algunos ejemplos con los que usted esté familiarizado e invite a ellos, por su parte, a pensar en otros. ¿Cómo se relaciona el hecho de realizar primero los pasos más importantes con los mandamientos que se encuentran en Éxodo 20:2–11? ¿Qué nos enseñan los mandamientos en cuanto a poner a Dios en primer lugar en nuestra vida? ¿Qué podríamos sentirnos tentados a poner antes que a Él? (Para ver algunos ejemplos, véase la declaración que está en “Recursos adicionales”). Un repaso de Éxodo 20:2–11 puede ayudar a los miembros de la clase a reflexionar en el compromiso que tienen de poner a Dios en primer lugar.

Éxodo 20:2–17

Dios es misericordioso.

• ¿Cómo puede ayudar a los miembros de la clase a comprender la importancia que tienen en la actualidad los Diez Mandamientos? Podría dividirlos en grupos de dos y pedirles que lean Éxodo 20:2–17, y que después analicen la manera en que el obedecer cada uno de los mandamientos los bendice a ellos, a sus familias y a las personas que los rodean. También podría mostrar el video “La obediencia a los diez mandamientos” (ChurchofJesusChrist.org). ¿Qué bendiciones nos promete el Padre Celestial si obedecemos Sus mandamientos? (véase, por ejemplo, Mosíah 2:41). ¿Cómo demuestran esos mandamientos el amor que Dios tiene por nosotros?

Recursos adicionales

No tendrás dioses ajenos

El presidente Spencer W. Kimball enseñó que hay semejanzas entre la adoración de imágenes esculpidas en la antigüedad y la conducta de las personas en el presente. Él dijo:

“La idolatría es uno de los pecados más graves […].

“Los ídolos modernos, o dioses falsos, pueden asumir formas tales como ropas, casas, negocios, máquinas, automóviles, barcas de paseo y otras numerosas atracciones materiales que desvían del camino hacia la santidad […].

“Las cosas intangibles constituyen igualmente dioses falsos. Los títulos, los logros en el deporte y las calificaciones pueden convertirse en ídolos […].

“Hay muchas personas que primero construyen y amueblan una casa, y compran un automóvil, y entonces descubren que el dinero ‘no alcanza’ para pagar el diezmo. ¿A quién están adorando? Ciertamente, no es al Señor de los cielos y de la tierra […].

“Muchos adoran la cacería, la pesca, las vacaciones, los días de campo y paseos de fin de semana. Otros tienen como ídolos las actividades deportivas, el béisbol, el fútbol, las corridas de toros o el golf […].

“Otra imagen que los hombres adoran es la del poder y el prestigio […]. Estos dioses de poder, riqueza e influencia son sumamente exigentes, y son tan reales como los becerros de oro de los hijos de Israel en el desierto” (Enseñanzas de los Presidentes de la Iglesia: Spencer W. Kimball, 2006, págs. 162–163).

Cómo mejorar nuestra enseñanza

Concentrarse en unos cuantos principios. “Aunque hay mucho material para analizar en cada lección, no es necesario usarlo todo en un solo día a fin de llegar al corazón de alguien; por lo general, uno o dos puntos clave son suficientes” (Enseñar a la manera del Salvador, pág. 7).